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Payton.

Y aquí me encuentro, a las cuatro con cuarenta y cinco minutos de la mañana, con una t/n dormida con su cabeza sobre mi hombro.

Ella se veía bastante decidida a tomar ese vuelo por lo que no tuve más opción que acompañarla. Después de todo la invitación fue para ambos.

T/n fue la primera en levantarse y alistar todo. Llegó a mi cuarto molesta por no tener mi maleta echa y me despertó a almohadazos.

Ahora estamos esperando a que nos llamen para subir al avión.

***

Adrien Rose.

Perdí la noción del tiempo. Me siento débil por los golpes y la deshidratación.

Mi ropa está echa añicos. No veo a Robert hace día o... semanas. Ni si quiera se que día es hoy.

Lo último que supe de él es que lo estaban obligando a hablar con su hijo como su todo estuviera bien y como si no supiera donde me encuentro.

Todo es tan confuso, entran unos hombres, me hacen las mismas preguntas, me golpean, me inyectan algo y se van molestos por que no les doy las respuestas que quieren.

No se cuanto tiempo más pueda soportar esto, mi cuerpo ya no funciona como debería.

Los golpes ya no duelen y no se si esa cosa que me inyectan ya no me hace efecto por la cantidad que me ponen o si mi organismo ya se acostumbró a tenerlo.

Los días pasan y pasan. Siempre es lo mismo. Las mismas preguntas, mismos golpes, gritos y amenazas.

A este punto no se si pueda salir con vida de aquí y lo único que viene a mi mente es t/n.

Mi pequeña princesa, ¿qué pensarás de mi pequeña?

Debes pensar que estoy ocupado con el trabajo y que no estoy al pendiente ti como tantas veces me lo habías echo notar.

Si tan sólo supieras que daría lo que fuera por verte un sólo segundo para abrazarte y mimarte como antes.

Te amo mi pequeña t/n.

***

T/n.

Al llegar al hotel lo primero que captó nuestra atención fue el inmenso lobby que nos recibía repleto de personas de todo tipo.

Hay desde los de la clase más alta con trajes perfectos, sin ningún rastro de desorden. Hasta los que no les importaba paser en pijama y sandalias con medias por todo el hotel.

Se nos dificultó un poco registrarnos debido a que sólo hablan italiano. Yo se sólo lo básico del Italiano; los colores, como saludar, forma correcta de comunicarse, etc.

Al final un señor americano nos vio comunicarnos con dificultad y nos ayudó a traducirle a la recepcionista.

Unos hombres nos ayudaron con las maletas, (que siento que no fue necesario considerando que fueron tan solo dos maletas y un bolso pequeño).

Entramos en un gran elevador y un señor nos recibió con una sonrisa. Este habla tres idiomas: Italiano, Malayo y español.

Nos contó muchas historias que él había vivido a lo largo de su vida trabajando en el gran hotel.

Nos contó que se registraron muchos artistas famosos de Italia al igual que de otros países. También que más de una vez hubieron intentos de asesinatos en el hotel pero que todos actuaron muy rápido y no llegó a pasar a mayores.

Nos contó que él había sido el que peleaba con los "asesinos" y que él era el que los esposaba y los llevaba a la estación de policía.

El tono egocéntrico con el que contaba sus magníficos actos me hacía reir y cuando él se percataba de esto bromeaba con que deje de burlarme de él.

 Obscuros Secretos. (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora