Capítulo 1

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*A la mañana siguiente del deseo*

Sara es el nombre de nuestra protagonista, aquella que duerme plácidamente en una cama que no es la suya, aun ingenua de todo lo que le espera.

No tardó en abrir lentamente los ojos, enfocando su vista al techo de la habitación, le llevó un rato darse cuenta de que no sabía donde se encontraba. Se incorporó rápidamente de la cama con el ceño fruncido repasando la bonita habitación.

-¿Qué paso anoche? -se preguntó intentando recordar lo que hizo.

Se levantó de la grande cama temerosa, dispuesta a descubrir donde estaba, se acercó a los grandes ventanales de la habitación corriendo la cortina.

-Se puede saber como he llegado yo aquí -se seguía preguntando en voz alta.

Su vista examinó el exterior, por las casas que le rodeaban podía intuir que tenía gran cantidad de vecinos, pero sin lugar a duda la calle era totalmente desconocida para ella. Pasaron unos minutos y Sara no se despegó de la ventana, hasta que vio a un chico caminar tranquilamente por en medio de la carretera. 

Se despegó de la ventana dispuesta a preguntarle donde se encontraba, su vista recorría la enorme casa y por lo que parecía estaba totalmente sola, ni padres, ni hermano. Nadie.

Bajo las escaleras velozmente y abrió apresurada la puerta de la casa, saliendo al exterior.

-EHHH -gritó- ¡Disculpe!

El chico se giró extrañado por los gritos, Sara se paró a unos metros de él, sus ojos se entornaron examinando el rostro de ese chico.

-¿Necesita algo? -le preguntó. Sara no respondió, estaba demasiado ocupada recorriéndole la cara con los ojos - ¿hola?

-Emm si si perdón... es que me has recordado mucho a alguien ¿Dónde estoy? -le dijo aun examinándolo de arriba abajo, ese chico era igualito que uno de sus famosos ídolos.

-Varsevia.

-¿Varsovia?

-No, V A R S E V I A -rio

Sara se quedó pensativa, no conocía ese lugar ¿Cómo había llegado hasta allí? ¿Acaso era sonámbula?

-¿Como te llamas? No me suena haberte visto nunca -le preguntó él. Lo miró a sus grandes ojos verdes aun sorprendida por su gran parecido a su crush, guapo muy guapo.

-Sara ¿y tú?

-Aidan -dijo dejándola atónita- encantado de conocerte Sara, si necesitas algo vivo aquí- señalo la casa de enfrente.

-¿Aidan, Aidan Gallagher? -preguntó asombrada, la felicidad aceleró su corazón.

-¿Cómo sabes mi apellido? -preguntó mirándola perplejo- no te conozco de nada.

-No me lo creo -Sara retrocedió poniendo una de sus manos en su pecho- esto no puede estar pasando.

Aidan miró a su alrededor confundido - Emmm... ¿Esto es una cámara oculta? -preguntó confuso.

-Soy una gran fan -la emoción provocó que Sara hablara el triple de rápido- no me lo puedo creer, no me lo puedo creer.

-Creo que te estás confundiendo -el chico empezaba a pensar que esa chica que acababa de conocer estaba como una cabra- no soy ningún famoso.

Aidan se dio la vuelta algo asustando por la locura de aquella chica.

-Nos vemos -dijo él, pero en sus adentros no quería volver a verla.

-Adiós -agitó la mano aun subida en esa nube de felicidad.

Había conocido en persona a Aidan Gallagher, ese día no podría ser más raro... o quizás si.

Sara volvió dentro de casa dándose cuenta de que había salido en pijama, buscó algo de ropa en los armarios de aquella casa sorprendiéndose a ella misma, estaban llenos de hermosa ropa.

Ya vestida cogió su teléfono móvil y abrió Google Maps

*Ubicación desconocida*

Extrañada abrió Twitter

*No disponible en tu región*

Esto cada vez era más raro intentó llamar a su madre

*El número al que llama no existe*

-¿Qué pasa aquí?

Nada funcionaba, estaba totalmente incomunicada en ese lugar extraño llamado Varsevia.

Deseo hecho realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora