Deseo hecho realidad

Capítulo 14

Sara

Finalmente conseguí dormir unas horas, lo extraño fue cuando me desperté y note un peso extraño sobre mi cintura y aquí es cuando recordé que dejé a Joshua meterse en mi cama, y en ese preciso instante me estaba abrazando por la espalda. Fue extraño sentir un cuerpo masculino tan cerca del mío, notaba el calor que trasmitía era muy agradable sentirlo cerca, no quería alejarme pero sabía que cuando se despertara sería muy incomodo para ambos.

Lentamente agarre su brazo levantándolo, alejándolo de mi cintura pero, como no, tenía que moverse en sueños y apretarme más contra él, sintiendo todo su cuerpo contra el mío aun más cerca que antes, el rubor me subió a las mejillas nunca había estado en posición "cucharita" (claro que nunca has estado en esa posición si jamás has metido a nadie en tu cama estúpida), la idea de despertarlo se apoderó de mí, no quería, pero debía. 

-Joshua -dije con un tono de voz intermedio para no asustarlo.

No hizo ningún movimiento.

-Joshua -volví a decir aun mas alto.

Se removió un poco pero aun seguía en el mundo de los sueños.

-JOSHUA -grite, seguro que me escuchó toda la cuidad.

Pero no se despertaba, seguía durmiendo como si nadie lo llamara, sin hacer ningún movimiento. Esto solo me pasa a mí.

Giré mi cuerpo rompiendo la postura de la cucharita y empeorando más la situación, ahora lo tenía cara a cara, sus rostro demasiado cerca del mío y sus labios a centímetros... Sin pensarlo dos veces tome impulso haciendo que girara sobre su espalda, el agarre me impulsó hacia su cuerpo quedando Joshua boca arriba y yo encima de su torso. Y exacto lo habéis adivinado, ahora sí se despertó.

Abrió sus ojos como platos mirándome desde abajo, yo paralizada y sonrojada como un tomate le devolví una inocente mirada -buenos días dormilón- dije aun encima suyo con una sonrisa que mostraba todos mis dientes.

-Buenos... días -miró todo mi cuerpo, analizando la posición en la que me encontraba- ¿Qué haces ahí arriba?

Diosito aun estoy esperando para que me lleves contigo.

-Emm -Sara di algo joder, dile que intentabas zafarte de su agarre pero que eres más tonta que una piedra y has acabado encima suyo- contemplaba las vistas -dije como una completa estúpida señalando la ventana.

Primero me miró con una cara de confusión que no tardo en transformarse a una picara, me agarró de la cintura con sus dos manos en un movimiento rápido mi espalda chocó contra el colchón quedando yo debajo y el encima. 

Acercó su rostro al mío mi corazón empezó a latir como un loco, sentía una extraña presión en el estomago, las piernas me temblaban y una extraña sensación de nerviosismo mezclado con emoción se adueñó de mi ser.

-Espero que las hayas disfrutado -dijo dándome un lento beso en la mejilla, de esos besos tiernos que te hacen estremecer.

Me miró durante unos segundo a los ojos, unos segundos que se hicieron interminables, finalmente se levantó de la cama dejándome a mi colorada  y con la extraña sensación de no querer que se vaya ¿Por qué se va?        

 -Te espero para desayunar -dijo por ultima vez antes de salir de la habitación, guiñándome un ojo. 

Y así me quedé yo, como un trapo tirada en la cama ¿Por qué siempre me pasan estas cosas a mí? Es demasiado. 

Me quedé unos minutos en la misma posición hasta que escuche el timbre de la puerta principal sonar, durante unos segundos no me percaté que Joshua era nuevo en la cuidad y que nadie lo conocía, ni tampoco me acordé de lo que le hicieron a Asa y Mike por pensar que me habían hecho daño, SIN TENER PRUEBAS, que pensarían al ver a un chico totalmente desconocido para ellos en mi supuesta casa ¿matarlo?