Deseo hecho realidad

Capítulo 23

Sara

Pensaba que ya había conocido a todos los habitantes de la ciudad, pero parece que no. Ahora mismo tengo a Omar Rudberg encima de mí, mirándome divertido.

-¿Qué-e haces? -dije con voz entrecortada.

-Emmm ¿No lo ves? -si, lo veía, estaba encima de mí, aplastándome.

-Por favor necesito bajar -le supliqué- mi amigo está en peligro.

-Vale, pero con una condición -me sonrió enseñando todos los dientes de una forma muy inocente (y adorable).

-Vale, pero rápido.

Se relamió los labios mirándome -bésame.

¿¿¡¡QUÉEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!!??

Abrí ligeramente los ojos al escuchar su condición ¿Desde cuando alguien te pide que lo beses sin ni siquiera conocerte un poco antes?

-¿Estás loco?

-No, no lo estoy -su vista se fijó en mis labios- o me besas o no hay trato.

Me siento mal besando a tres chicos diferentes en un corto periodo de tiempo, pero bueno, no voy a tener esta oportunidad en mi vida.

Lo agarré del cuello con autoridad y lo aproximé hacia mí dándole un beso rápido en los labios.

Parpadeó unas cuantas veces con un poco de sorpresa hasta que su vista se fijó en la mía -¡Eso no vale! -pretextó.

-Lo siento, un beso es un beso -dije burlona empujándolo hacia un lado- si me disculpas, el deber me llama.

Bajé las escaleras a toda velocidad con Omar a mis espaldas, siguiéndome.

-¡TOM ESTÁS LOCO! -me quedé congelada ante el grito de Louis- ¡NO PODEMOS MATARLO!

-¡HACEDLO! -gritó Tom, con toda la cara roja de pura rabia.

No puede ser, esto no puede estar pasando.

-Cole ¿Tú estas a favor de hacer...eso? No sé ni como describirlo joder -Cole miró a Louis indiferente encogiéndose de hombros- no me lo puedo creer.

Los ojos de Louis se empezaron a cristalizar de rabia, la rabia de sentir que iban a acabar con una vida inocente.

Mi vista vagó por la sala hasta pararse en Joshua que estaba tirado en el suelo de espaldas a mí.

-¿No vas a hacer nada? -susurró Omar en mi oído.

Me quedé callada mirando a un punto fijo con la mente en blanco.

-Louis... -empezó a decir Cole.

-¡NO! No pienso permitir que lo matéis porque os dé la puta gana de hacerlo. ¡ESTOY HARTO DE ESTO! Tom... pensaba que habías cambiado, pero veo que no, sigues siendo el mismo psicópata de siempre, y tú Cole... Me decepcionas cada vez más, después te arrepentirás, y llorarás como un puto crío, como SIEMPRE haces. Tendréis que matarme a mi primero si queréis llegar hasta él -señaló a Joshua con el dedo índice colocándose enfrente de su cuerpo.

De repente me percaté de que Harrison se había dado cuenta de mi presencia en la habitación. Gesticuló una palabra con los labios que descifre al segundo:

AYUDA

-No me hagas tomar decisiones que no quieres que tome, apártate y acabemos con esto -dijo Tom con una tranquilidad inquietante.

-Ni en tus mejores sueños.

-Cole -Tom lo miró serio- encárgate de este problemilla llamado Louis.