Llegaron temprano al aeropuerto, su vuelo sería de más de dieciséis horas, con una escala de una hora en San Francisco EEUU, el destino final era el aeropuerto de Vancouver Canadá.
- Nunca he viajado tanto tiempo, los vuelos entre Tokio y Okinawa eran de dos horas y medias - dijo con cara de aburrido.
- Cúando viajé a Japón, dormí casi todo el camino - respondió Langa.
- Tendré que hacer eso... - pensó Reki, la verdad estaba muy nervioso por dejar a su familia y Japón, comenzaría una nueva vida en Canadá, pero sería fuerte y aguantaría para poder casarse con su novio.
El viaje duró lo estimado, dónde Langa con una facilidad increíble durmió casi todo el camino mientras que Reki vio como cuatro películas y aún no tenía sueño, los asientos de la clase económica no eran los más cómodos.
Después de unas eternas casi dieciséis horas, finalmente habían aterrizado en tierras canadienses, al bajarse del avión y entrar al aeropuerto, Reki ya se sentía extraño y con miedo, todos hablaban una lengua diferente y la gente era totalmente distinta a su natal Japón, se detuvo unos minutos mirando a la gente pasar, comenzó a sentir una presión en el pecho.
- ¡Reki! Te estoy llamando.... ¿Estás bien? - preguntó Langa preocupado.
- Si, estoy bien - respondió Reki - sólo tuve un poco de miedo... Ya sabes, llegar a otro país distinto al tuyo.
- Te entiendo, me sentí igual cuándo llegué a Japón, pero la diferencia es que tú me tienes a mi y yo no te dejaré solo - respondió Langa tomándo su mano.
- Bien, vamos por nuestro equipaje - dijo Reki - y después ¿Cómo nos iremos?.
- Una amiga de infancia vino a recogernos ¿Recuerdas a Emma? Te conté de ella - dijo Langa.
- Oh si - Reki recordó que Langa le había contado sobre Emma Smith, su única amiga en Canadá, eran amigos desde que usaban pañales y siempre se escribían.
Al salir del aeropuerto una chica de pelo corto color castaño, vestida muy a la moda, con unas botas largas color café con tacones altos y un abrigo negro les hacía gestos.
- ¡Langa! Por dios mírate nada más, son cómo 5 años que no te veía, estás guapísimo - se acercó y abrazó a Langa - ¡Ay! Y tú eres Reki ¿Puedo abrazarte también? - preguntó emocionada la chica.
- Hola - saludo tímidamente Reki, la chica habló tan rápido que apenas le entendió lo que dijo pero por si acaso confirmó lo solicitado y la chica lo abrazó.
- Langa tu novio es muy bello - dijo Emma mientras observaba a Reki.
- No lo mires, es mío - respondió Langa.
- Jajaja lo sé lo sé... Amigo la verdad sabia que eras gay desde que usábamos pañales - bromeó Emma - pero no pensé que ibas a tener un novio tan tierno.
Mientras iban caminando hacia el auto, Emma los interrogaba con preguntas tipo ¿Y quién se confesó primero? ¿Cómo fue su primer beso? Etc...
Durante el camino iban hablando de ex compañeros y situaciones vividas en sus días de primaria y secundaria.
Reki mientras tanto iba mirando por la ventana, todo era tan distinto, desde el sentido de conducción hasta la arquitectura.
Se detuvieron antes en un gran tienda de artículos para la casa y construcción, compraron lo esencial para el aseo, cortinas, cosas para la cocina y baño y hasta un colchón inflable mientras compraban una cama.
Luego de la gran compra y para su comodidad, iban en auto por lo que cómo pudieron acomodar las cosas ahí.
Llegaron hasta Burnaby, una villa donde todas las casas eran similares, de 2 pisos y con mucha vegetación, específicamente a la casa número 176.
Aquella casa era de los padres de Langa, el creció en dicha casa y después de la muerte de Oliver, el padre de Langa, habían decidido irse al país natal de Nanako y esa casa alquilarla.
Y asi fue durante cinco años, pero cuando Langa le comentó a su madre que quería volver a Canadá con Reki para que éste obtuviera la residencia y poder casarse con él, ella terminó el contrato de alquiler para que Langa y Reki pudieran vivir ahí.
La villa era agradable, mientras bajaban el equipaje, Langa entró a revisar la casa mientras Reki y Emma estaban afuera.
- Langa siempre me habló de ti, me enviaba fotos y videos, así que siento que ya te conozco - dijo Emma amorosamente.
- A mi también me contó de ti y me mostraba algunas fotos - comentó Reki.
- Reki... - la chica miró hacia dónde estaba Langa y luego miró un tanto preocupada a Reki - te daré mi número, escríbeme en caso de cualquier cosa, si te sientes mal o algo sólo dime, porque... Porque seguramente conocerás a la familia de Langa y ellos son un tanto especial.
Reki sintió un nudo en su estómago.
- Por favor no le digas a Langa que te dije, pero ten mucho cuidado con su primo Liam y su abuela - aconsejó Emma.
- Gracias Emma - dijo Reki asustado.
- Y realmente si necesitas ayuda sólo dímelo, eres el valioso novio de mi amigo querido y no quiero que les pase algo - dijo preocupada mirando a Langa y luego tomándo la mano de Reki.
Langa se acercó a los dos.
- Listo, ya revisé la casa y está todo bien - dijo Langa.
- ¡Genial! - dijeron Emma y Reki.
Entraron y dejaron las maletas en la escalera.
- Tenemos mucho aseo que hacer - comentó Langa mientras observaba la casa.
-Los ayudaría pero no estoy vestida para hacer aseo pero si me dan unos minutos voy a cambiarme y los ayudo - propuso Emma.
- Perfecto, nos hará falta ayuda - respondió Langa.
Mientras Emma iba a su casa a cambiarse ropa, los chicos comenzaron a limpiar la casa.
- Menos mal vendimos mis muebles, ahora tenemos dinero para comprar acá, y al parecer no son tan costosos - dijo Reki.
- Tenemos mucho que hacer Reki, hay que abstecernos tanto de muebles, electrodomésticos, comida, artículos de aseo... Luego debemos contratar algún plan de datos para nuestros celulares - Langa comenzaba a enumerar todo sus pendientes.
Langa estaba muy emocionado al volver a su natal Canadá y más aún estar en su casa de infancia con su futuro esposo, no podía evitar querer abrazarlo y hacerlo en ese mismo instante, pero estaba muy sucio y Emma podría llegar en cualquier momentos.
- Tengo hambre - se quejó Reki mientras barría
- Yo también, cuando llegue Emma le pediremos que pida algún delivery - dijo Langa quién estaba limpiando la cocina.
A los minutos llegó Emma, vestida más cómoda para ayudarlos, con muchas bolsas de mercadería y cómo si les hubiera leído la mente, había traído pizza.
Los tres se sentaron en el suelo a comer mientras charlaban de sus vidas.
ESTÁS LEYENDO
Dᥱ⳽ρᥙᥱ́⳽ ᑯᥱ Ꙇᥲ toɾຕᥱᥒtᥲ - II Tᥱຕρoɾᥲᑯᥲ
FanfictionContinuación de la historia "Después de la tormenta" Después de graduarse de la preparatoria y viajar a Tokio para continuar sus estudios en la universidad, ocurrirán nuevos sucesos, conocerán nuevas personas y deberán confiar en el otro más que nun...