Capítulo 19. Conveniente

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Durante aquellos días José Luís vino seguido a cenar lo cual era divertido pues Vale tenía con quien jugar verdaderamente a los vídeo juegos, Altagracia lo intentaba pero no eran su fuerte, al final Vale siempre salía victoriosa su mamá no era muy buena jugadora pero agradecía que al menos lo intentaba por ella, hoy las amigas de Vale vendrían a la casa para adelantar un poco del proyecto además de las tareas asignadas para el día siguiente, luego de una mañana muy ajetreada en la galería envolviendo cuadros que viajarian hasta Italia por fin llega el horario del almuerzo por ser jefa salía antes.

Ya que debía ir por su hija, en fin por suerte no le toco trafico permitiendole llegar con dos minutos de antelación al colegio, aprovecho para mirarse en el espejo checando su maquillaje, cuando termino vio acercarse cierto trío que reía a carcajadas, las tres saludaron antes de subir a la camioneta, los siguientes minutos las escucho chismear en el asiento trasero, al parecer había cierta onda con la profesora de música y el de teatro o bueno eso es lo que se creía, Amara y Florencia eran las mejores amigas de Valentina desde el kinder, eran de esas amistades que si una va a tal parte las otras dos consiguen el permiso para ir también ya que existía esa tranquilidad de que si estaban juntas no había nada de que preocuparse.





- Ma, sabes que hizo Magda para almorzar? -- indaga en lo que caminan hacía el elevador

- No tengo la más mínima idea -- admite -- Pero seguro las consintió con alguna cosa rica

- Nosotras dos no tenemos problema, con tal de que comamos -- ríe Amara

- Vale es muy quisquillosa -- la molesta Florencia

- Claro que no! -- se queja ingresando al elevador -- Mamá diles que no soy quisquillosa

- No me metan -- sonríe negando -- En sus riñas





Una vez el elevador se detuvo en el piso 10, Vale entra en su papel de guía, enseñándoles las pinturas que había en el pasillo antes de llegar a su puerta, ya cuando entraron les enseño todo el Loft mientras que Altagracia ponía la mesa, estaba hablando con José Luís por medio de una llamada, estaban poniéndose al día ya que esta mañana no les fue posible verse, Magda la veía de reojo pues supuestamente estaba checando que las pizzas caseras no se quemaran pero pues le gustaba ver feliz a su patrona cada que se comunicaba con el señor Navarrete o el estaba aquí en la casa, escucho por un par de minutos más hasta que le toco sacar las pizzas.

Las niñas habían subido al cuarto de Vale para conocerlo además de dejar sus cosas y cambiarse claramente, cuando volvieron a aparecer ya estaba todo listo para comenzar con  el almuerzo, les pareció un poco raro que Altagracia no estuviera ahí pero escucharon su voz enseguida provenir del balcón, antes de que Vale la llamara ella ya estaba encaminandose a la mesa, Magda las acompaño como de costumbre escuchando al igual que Altagracia todas las actividades que realizaron hoy, de lo interesante que era el proyecto y las ganas que tenían de comenzar con el, estuvieron charlando por largo rato, elogiando la comida de Magda logrando así que se ruborizara.

Rechazaron el postre al estar muy satisfechas pero que más tarde vendrían por el, sin más pidieron permiso para retirarse de la mesa e ir al cuarto de Vale, no hubo problema con eso pues a Altagracia le convenia que las tres adolescentes estuvieran ocupadas, debía de trabajar desde casa así que no las podría atender tanto como ella quisiera, en fin las niñas sólo salieron del cuarto por helado y chocolate regresandose enseguida, las horas fueron pasando, Altagracia terminó con todo lo que tenía pendiente así que aprovecho para prepararse un café, dentro de unos minutos iría a checarlas para ver si necesitaban alguna cosa pues estaban muy calladitas pero sonó el timbre.





- Magda -- sirve su café -- Podrías abrir por favor? Probablemente sea Luis, viene a esta hora más o menos

- Deje que me encargo -- va a la puerta con prisa

- Gracias -- va por el azúcar

- Hola Magda -- dice a penas le abre la puerta -- Tu patrona está?

- Señor León... -- frunce el ceño confundida

- Ella está? -- insiste -- Tengo que hablarle de un asunto importante

- Está, si... -- se quita antes de que la empujara al pasar -- Pero no sé si ella querrá hablar con usted

- Créeme que si -- avanza

- Quién era Mag... -- toma aire -- Que haces aquí? Quedamos que todo lo que quieras discutir se lo dirías a tu abogado que se comunicaria con el mío -- agita la cuchara en su taza

- Este es un asunto que nuestros abogados no pueden discutir -- queda frente a ella -- Y de preferencia quisiera que habláramos solos

- Magda, nos está haciendo falta ese cereal que Vale desayuna todas las mañanas -- saca unos billetes -- Compra unos tres si? Con sus amiguitas aquí quedándose a dormir, no quiero que nos haga falta mañana -- se lo entrega

- Doña está segura que quiere quedarse sola con el? -- susurra

- No te preocupes que no va a intentar nada -- asegura -- Ve tranquila con Matamoros, así no te tardas mucho

- Bien -- asiente -- Cualquier cosa, en el teléfono esta registrado el marcado rápido con el portero -- dice antes de irse

- Por si se te ocurre comenzar a gritarme -- camina en su dirección -- Vale está arriba con sus amigas, ahorremonos el esfuerzo de llamar a los de seguridad si?

- Lo que vine a hablar contigo es bien rápido -- asiente -- Ni siquiera existe la necesidad de gritar

- Entonces habla ya -- junta las manos

- Te daré el divorcio -- posiciona las manos sobre su cintura -- Pero tú debes hacer algo por mí

- Que vas a querer? Habla -- lo encara

- Me encontré con Magda de camino y me dio la llave -- dice Luís a medida que entra

- Uhm -- sonríe negando -- Que lindo, llegue a pensar que serías el único que estaría de mi lado pero me equivoque, incluso te acuestas con mis sobras

- No soy nada tuyo y nunca lo fui -- cruza los brazos -- Tus sobras es lo que nunca seré, de nadie, ahora vete no estoy dispuesta a hacerte ni un sólo favor

- Es mejor que te vayas -- concuerda Luís

- Si me iré -- asiente -- Mi abogado contactará al tuyo -- camina a la salida

- Te hizo algo? -- la toma de los hombros -- Sé sincera

- No me hizo nada -- lo tranquiliza a medida que acariciaba su mejilla -- Iba a pedirme algo, seguro un intercambio para que firmará los papeles -- le resta importancia -- De todos modos no iba a darle absolutamente nada pero... que bueno que llegarás

- Te alegra verme aquí? -- sonríe

- Sabes que si -- se inclina dejando un beso corto sobre sus labios -- Nunca fuiste tan oportuno como hoy

- Que crees que iba a pedirte? -- baja las manos hasta su cintura

- Alguna propiedad -- da de hombros -- En mi herencia tengo propiedades, estaba pensando venderlas, me quedaría con los departamentos -- piensa -- Con dos haciendas también, tal vez cuatro, no lo sé

- Tienes una fortuna en propiedades y te viniste a un Loft? -- ríe

- Tengo dos excusas -- hace puchero -- No quiero que Vale se vuelva prepotente, la quiero criar decentemente al menos -- explica -- Este Loft es bonito, se tiene buenas comodidades y lo mejor, no se gasta demasiado

- Esas son tus dos excusas? -- la trae más cerca

- Esa es una -- lo toma del mentón -- La segunda es que tú vives un piso abajo del mío, es deliciosamente conveniente -- sonríe

Entre Los Dos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora