El baby shower de Eunice había llegado por fin, costó bastante que se decidiera por un solo tema pero una vez encontraron el que más iba con ella pudieron hacer algo maravilloso, se realizó en la tarde no duró mucho porque ella estaba cansada pero la pasaron muy bien entre los juegos típicos, la música y claro la comida. José Luís ya andaba queriendo que el embarazo de Altagracia avanzará más rápido para poder organizar uno propio.
Los primeros días de diciembre llegó la pequeña Lucía, era una bebé chiquitita pero bien cachetona, Altagracia se volvió loca de amor a penas la vio. Todo pasó en plena mañana pues la peque se adelanto a la fecha pactada para realizar la cesárea pero todo salió tan bien que no podían quejarse, Eunice estaba fuera de peligro y recuperándose, la chiquita era una bebé hermosa además de sana, una vez se habilitó el horario para las visitas Vale pudo conocer a su prima.
Los tres días que Eunice paso ingresada tuvo la compañía de Altagracia quien la ayudó todo lo que pudo, ya cuando Eunice necesitaba que alguien la ayudara a salir de la cama pues utilizaban al papá, Altagracia no podía realizar esfuerzos por ahora. En fin noche buena había llegado, Vale obtuvo lo que quería, pasarla con sus dos familias, fue un poco difícil de lograr ya que la abuela esperaba pasarla con sus nietos pero respeto la decisión que habían tomado, además se verían en el almuerzo del día siguiente.
‐ La ropa se te ve mejor ahora -- sonríe viéndola
- Claro! -- termina de colocarse los aretes -- Por fin se me nota el embarazo, todos aquí andaban vueltos locos para que eso pasará
- No puedes culparnos -- se levanta -- Ya queremos conocer al bebé
- La verdad estoy igual que ustedes -- sonríe -- Me da mucha curiosidad ver su carita
- Estás hermosa -- la abraza dejando un beso sobre su hombro -- Muy hermosa
- Aw! Gracias cielo, tú estás guapísimo! -- se mira al espejo -- Me parece que en una semana más ciertos vestidos ya no me van a cerrar ‐- ríe alizando la pequeña curva
- No importa, vamos y compramos otros más bonitos -- deja la mano sobre la suya
- Ay no que pereza! -- se recarga en él -- Mejor nos quedamos aquí en la cama para que me consientas
- No es mala idea sabes ‐- ríe
- Lo sé, puedes hacerme un favor? -- indaga
- Mi amor, tú dime que necesitas que haga y voy -- la suelta
- Podrías bajar a revisar si Magda necesita algo antes de irse? -- apaga la luz que venía integrada en su espejo
- Claro, cualquier cosa ya sabes, grita que yo vengo -- sale del cuarto
- Que barbaridad -- murmura viendo la hora -- Más vale que esa niña ya esté lista -- sale del cuarto yendo a buscarla ‐- Valentina, mi amor! -- toca la puerta -- Tu papá va a llegar en cualquier momento
- Ya casi estoy! Ma! Me puedes ayudar con algo? -- grita
- Qué necesitas corazón? -- pregunta al entrar
- Me haces esa trenza que sólo a ti te queda bien? -- ríe mientras se coloca los zapatos
- Me hubieras dicho con tiempo -- camina en su dirección -- Tenía unas cosas para el cabello pero ya no nos queda tiempo
- Es que iba a dejarmelo suelto pero creo que se verá mejor con la trenza -- le entrega el peine
- Si, te vas a ver más bonita -- toma asiento comenzando a peinarla
- La tía Eunice vendrá? -- indaga
- No mi amor, todavía se está recuperando de la cesárea -- divide el cabello en diferentes partes -- Pero mañana pasaremos a verla luego del almuerzo con tus abuelos, están en casa de tu tía Regina
- No te harás una cesárea verdad? A la tía parecía dolerle mucho todo cuando la vimos -- dice preocupada
- Bueno esperemos que no sea necesario -- ríe trenzandole el cabello -- Si las cosas salen bien no va a ser necesario una cesárea
- Puedo acompañarlos cuando vayan a saber el sexo? -- sonríe
- Te digo un secreto? -- susurra
- Dime! -- dice obvia
- Ya sé que es -- ríe -- Ustedes lo sabrán más tarde
- Mamá! -- se gira para verla
- Mi amor! Va a salir extraña tu trenza -- la regaña
- Cómo que ya sabes!? Fuiste al hospital? -- pregunta ‐- Cuánto más tarde?
- Lo sabrán cuando abran sus regalos y si, fui yo solita -- ríe volviéndola a girar -- Ahora déjame terminar esta trenza que se nos va hacer tarde
Una vez Vale estuviera lista bajaron a la sala, José Luís ya se había encargado de todo para que Magda pudiera irse tranquila a la vecindad junto con Matamoros, ellos iban a pasar las fiestas allí. No pasó mucho tiempo para que Ricardo y Deborah llegarán, ambos trajeron algunos regalos así como un flan que comerían luego de la cena que sería en la terraza, la noche estaba tan agradable que lo mejor sería estar ahí afuera, sin mencionar que podrían ver bien los fuegos artificiales cuando diera la media noche.
Mientras Vale compartía con su padre y padrastro ahí afuera, contándoles algo emocionante de sus clases de maquillaje artístico, adentro Deborah ayudaba a Altagracia con las bebidas además de los tentempiés para engañar a la panza hasta que quisieran cenar, luego de acomodarlos en la mesa ambas entregaron las copas con vino para los dos hombres guapos, Vale tenía la suya con jugo al igual que Altagracia, aprovecharon los muebles para sentarse allí y tener un momento más casual.
- Ma, recuerdas que te dije que tenía una presentación? Bueno ya tengo a mis modelos -- ríe
- Están seguros que se van a prestar para eso? -- cruza las piernas -- Vi lo que quiere recrear y si está complicado -- ríe
- Esa parte no nos dijo -- la mira Ricardo
- Ya aceptaron! No se pueden retractar -- ríe -- Además van a estar sentados, puedo colocarles el juego mientras trabajo con la primera mitad de sus caras y no van a notar el tiempo
- Que chantajista -- niega sonriendo-- Está bien, voy a seguir siendo tu modelo
- Yo no tengo opción -- bromea José Luís -- Sabe donde vivo!
- Ay que malos! -- cruza los brazos
- No les hagas caso mi vida -- sonríe -- Sabes que a ellos les encanta cuando los transformas en monstruos, después andan jugando como unos niños chiquitos
- Ay es verdad! -- concuerda Deborah -- La otra vez que Vale fue a la casa y convirtió a Ricardo en monstruo del pantano, se tomó muchísimas fotos
- José Luís es igual -- ríe
- Nos están exponiendo -- niega Ricardo
- Creo que va a ser así siempre -- concuerda Luís
- Qué tal las cosas con el nuevo bebé? -- sonríe Deborah -- Te ves muy bonita
- Ya mejor por suerte, me mareaba demasiado -- deja su copa sobre la mesita -- Además tengo dos niños muy emocionados -- mira a Vale y a Luís
- Es que! Tendré un hermanito o hermanita -- se defiende Vale -- Para mi solita!
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