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—Par de imbéciles... —refunfuñó Takemicchi MUY molesto—. ¡Paren de una vez!

—¿Qué? —le preguntaron Draken y Mikey—.

¿TAN BRUTOS SON PARA NO DARSE CUENTA DE LO QUE ACABAN DE HACER?.

—Takemicchi está furioso... Esto es malo

Nunca había visto enojado a ese enano, casi siempre lo veo llorando.

—Mis valiosos recuerdos... ¡Los destrozaron todos! ¡No puede ser en serio!

Takemicchi se lanzó a golpear a Mikey cegado por la furia, pero no pudo porque Mikey lo esquivó todo, provocando que Takemicchi chocara con las bolsas de basura que habían enfrente de su casa.

—¿Estás bien Takemicchi? —le preguntó—.

—¡Cállate! le gritó levantándose para ir a enfrentarlos—. Mis cosas les importan un bledo, ¿no?

—Ya, ya, cálmate —le pidió Draken—.

—¡¿Que me calme?! ¡Descarado! ¡Ustedes dos se descontrolaron!

Sus amigos salieron de la casa apresurados para detenerlo, así que decidí tomarlo por los brazos y alejarlo de Draken para que lo soltara de la camisa.

—¡Para, Takemicchi! ¡No seas idiota o vas a morir!

—¡Cállate, suéltame! Les da igual lo que pase con quienes los rodean, ¿no?

Hice lo que me pidió pero no porque iba dejarlo golpear a Draken y Mikey, sino porque mi súper olfato sintió un olor asqueroso a basura, y para una nariz como la mía es el triple de asqueroso.

—Ya me disculpé. No fue mi intención hacerte daño

—¡Es como si no existiera!... Si se pelean porque no les importan los demás —se tranquilizó—.

—Takemicchi...

Rendido, el enano furioso se calmó y se arrodilló en el suelo.

—Ustedes... no se dan cuenta del daño que causan a su alrededor cuando pelean ¿verdad? ¡los que los admiran también acaban peleándose! ¡No es algo entre ustedes, están dividiendo a la Toman! No soporto ver cómo sucede, apenas me hice amigo de ustedes tres...

Algunas lágrimas amenazaban con salir, soy fuerte pero mi lado sensible sigue aquí dentro, por lo que como consecuencia sentí la mirada de Draken así que bajé la cabeza a pesar del asqueroso olor.

Takemicchi tiene razón, esto es demasiado triste, no quiero que todo lo que Mikey construyó se derrumbe por esa pelea. La Toman es lo único que me queda y no podría elegir entre mis dos amigos

—Takemicchi...

—No me importa, ¡váyanse!

—Oye, todo este tiempo... haz tenido caca en el pelo

—¿Eh? ¡¿Qué demonios?!

—¡Qué asco, Takemicchi! —se burló Draken a carcajadas—.

—¡Ay mi pobre olfato! —exclamé cubriéndome la nariz y alejándome —.

—¡¿Pornqué no me avisaron antes?!

—¡Porque estabas muy serio! —rió Manjiro—. ¡Corre Kenchin, nos persigue la caca! ¡Corre (////)!

Ambos se fueron corriendo entre carcajadas y yo los seguí para alejarme lo más posible de ese asqueroso olor.

—¡No me dejen atrás par de idiotas!

[...]

—Qué manera de reírme, hace mucho que no me reía tanto... —rió Kenchin—.

La Guerrera y el Dragón [Draken×TN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora