𝒔𝒕𝒂𝒓𝒔

capítulo 30.

Luego de comer, dejaron las cosas sucias a un lado y buscaron el postre. La chica se derritió y gimoteo de placer al comerlo. Los hombres se miraron de reojo y decidieron enfocarse en el postre. Cuando Ochako terminó de comer les habló.

-ahora yo limpió todo, ustedes si quieren vayan a acostarse- se habia parado y dado la vuelta, no sabia bien de que hablarles luego de lo que habia pasado hace tan solo unas horas atrás. De pronto recordó el atuendo que llevaba y como se le veía todo, se abrazó a si misma y busco una campera, se la colocó sin cerrarla.

-realmente me preguntaba como era que no tenias frío- Eijiro fue quién quiso romper el hielo en una charla trivial.

-uh realmente estaba con frío desde que sali afuera. Nevó y hay nieve por todas partes, mañana deberíamos ir a ver la temperatura de los animales- cuando quiso recoger las cosas, Katsuki ya lo hacia -oi les dije que yo lo hacia- a continuación hizo un puchero.

-tu lavas y luego guardas, nosotros te ayudamos- la chica al no tener más opción accedió. Se puso a lavar mientras los chicos le iban agregando cosas. De pronto una pregunta se le cruzó por la cabeza.

-cuando entre hoy habia música latina, que hacian? Hace mucho no escucho eso- quiso girar su rostro para verlos pero en un mal movimiento se mojó la remera, maldito cucharon. Rezaba para que no lo notaran, aunque era imposible, la tela fria se le pegaba a su calida piel.

-la abuela Yas nos estaba diciendo que el sábado bailariamos tango, no, era otra cosa...- Eijiro se puso a pensar el nombre raro que lr habia dicho la mayor.

-bachata, bailaremos bachata y este tipo tiene dos pies izquierdos- katsuki completó la frase mientras secaba un plato. Ochako los miro levantando la ceja mientras escuchaba.

-que yo sepa, tú también te equivocaste varías veces, además no es fácil bailar eso y seguir el ritmo blasty- se defendía cruzandose de brazos. Ochako ya habia terminado de lavar, cerró el agua y los miro cruzándose de brazos, en un intento de tapar la tela pegada a ella. 

-si quieren mañana les puedo enseñar, realmente no es difícil es cuestión de dejarse llevar- comenzó a guardar cada cosa donde correspondia, dandoles la espalda en todo momento, cuando terminó se dio cuenta que al pelirrojo en cualquier momento le saldrian estrellas por los ojos.

-podrias enseñarnos ahora?- Katsuki lo fulminó con la miraba y Ochako abrió los ojos sorprendida.

-eh, seguros? Es tarde, capaz estan cansados y debemos levantarnos a las cinco y media- el pelirrojo le dedico una mirada de suplica al cenizo, quien después de segundos suspiró y le afirmó a la chica con la cabeza -okey, vayan a la sala yo ire a cambiarme- en ese momento Ochako supo que debia sacarse eso ya.

-eh? Para qué? Dejate eso, vamos- no pudo objetar nada porque Eijiro la habia agarrado uno de sus brazos y la habia arrastrado hacia la sala. Ochako estaba segura que parecía un tomate.

Cuando finalmente los tres estaban en la calida sala, los perros se habian subido a los sillones a verlos, hicieron espacio en el medio y Ochako buscó alguna música para poder poner.

-saben que canción les habian puesto?- se habia dado vuelta para subirse la cremallera y poder estar más tranquila.

-no, nos la cambiaban cuando terminaba- los chicos estaban uno al lado del otro en medio de la sala mirandola. La chica suspiró.

-okey, les pondre algo de Romeo Santos o Prince Royce, a ver, imitadora no, mia no, corazón sin cara no,...- la chica hablaba más para si misma qué para los chicos. Mientras la chica seguía buscando y hablaba en español Eijiro quiso saber algo.

-Ochako, si tu digamos que, por lo que se obviamente, no tienes muchos ingresos económicos, como es que saben tantos idiomas y viajan por varías partes?- en lo que iban de los dos años en la UA ya les habian dado Inglés, un poco de francés y ahora le estaban dando español y la chica era de las mejores. En español era la segunda que mejor hablaba, el primer puesto se lo llevaba Sero.

-en realidad, no es que sea pobre, osea, los ingresos económicos en mi familia son altos, pero digamos que un ¿90%? Mas o menos, se va directamente a la constructora, ya saben, materiales, personal, permisos, etc. Y bueno, de lo que sobra una parte se va a los ahorros seguros de eso y el resto a casa, lo cuál no es mucho pero es mejor que nada- la chica se encogió de hombros y siguió pensando en que poner -oh, ya tengo la canción perfecta- Ochako habia puesto una canción de Romeo Santos.

-bien, ahora familiaricen con la música, yo ire a buscar unos tacones porque me siento rara explicándoles desde tan abajo y pisandome el pantalón, par de gigantes- Ochako subio rápidamente las escaleras y volvió con un par de tacones en mano. Se sentó en los sillones y cuando se levantó creció 15 centímetros, la seguían pasando, pero al menos ella ya no se fracturaba el cuello para verlos.

-okey, antes de nada tienen que familiarizar y conocer el ritmo, si se dan cuenta siempre repite, por lo cuál una vez que lo tengan, hacen un paso atrás, pasan pie, juntan y otra vez del otro lado. Luego comienzan a mover la cintura conforme hacen los pasos, cuando tengan eso van con la cadera y después con el resto del cuerpo, va?- el rostro de los chicos cuando termino de hablar fue un poema, por lo que no le quedo de otra que sacarse la campera y mostrarles ella misma como moverse bien. Los chicos miraban concentrados los movimientos de la chica.

-ahora ustedes- Eijiro lo intentó y casi se cae, Katsuki fue bien hasta que tuvo que integrar la cintura, Ochako suspiró y fue a corregirlos, iba a ser una larga noche.

En dos ocasiones bailó con cada uno y les enseño a como moverse en pareja, aunque casi se muere en el medio cuando ambos la habian pegado a ellos, quedando como barrera nada más que la ropa, luego conservaba la distancia y les seguía marcando errores.

Eran cerca de la una de la madrugada cuando finalmente, tuvieron un baile decente entre ellos, la chica casi llora de orgullo.

-oi cara redonda, hagámoslo los tres- lo había escuchado distraida y casi se cae con el aire, desviaba la vista entre ellos y tenia un poema en el rostro. Katsuki rápidamente se dio cuenta -me refiero a bailar tonta, aunque si quieres otra cosa nos tendras que preguntar- la chica enrojeció y murmuro algo que no lograron entender. Rápidamente elevó su tono de voz.

-tal vez mañana, por hoy estoy cansada y pasaron muchas emociones, descansen- luego de eso subió corriendo a su cuarto, poniendo seguro tras ella.