Dead World

LA CABEZA ES LA CLAVE

Pov: Enzo

Nos paramos a escuchar algun sonido sospecho en el lugar donde ibamos a pasar la noche no encontramos ningún problema.
No se escucha nada. Las puertas delanteras están cerradas.

-Voy a mirar atrás.-dice Mich y se va a examinar las puertas traseras. Adiós. Ojalá la cojan y la maten uno de esos zombies.

-Voy también por si tiene problemas-dice Yael pero yo lo detengo.

-Estas loco? Voy yo mejor, tu quedate aquí.-

Voy atrás con Mich, no para ayudarle sino para tenderle una trampa si surge la ocasión. Y porque no quiero que le pase nada a Yael, es el más pequeño y débil aun que el intente ir de duro.

-Hay algo?- pregunto cuando llego a las puertas traseras.

-Cerradas.- dice y suspiro.

-no vamos a poder entrar tenemos que irnos a otra casa. Con suerte, puede que tengan las puertas abiertas.-

-No. Espera, estas puertas son más finas y de madera, tal vez....-dice, pero apenas la escucho porque ya voy hacía la puerta delantera.
Los tres siguen ahí buscando una manera de entrar. Pero no hay ninguna. Se escucha un fuerte ruido. Todos nos asustamos. Viene de atrás. A lo mejor son que abalanzan sobre Mich y la estan devorando. Ojalá. Cruzo los dedos mientras vamos hacía la puerta trasera con pasos tensos.

No, no son zombies. Ha sido Mich que ha abierto la puerta. Nos mira con aire de engreída y triunfadora. Que se habra creído. Yo también podría haberlo hecho pegandole una patada a la puerta, pero hubiera armado mucho ruido. Se ve que le falta neuronas.

-¡estúpida!- susurro-¡¿Quieres atraer más zombies?!-.

-Era la única forma de entrar.-me dice sonriendo con aire de superioridad.

-no era la unica alternativa- dice Yael y me alegro de que piense lo mismo que yo.

-Da igual. Ya esta hecho, entremos.-dice Mich.

-Tú has abierto la puerta así que entra tu primera. Si hay zombies, que te coman a ti.-le digo

-vale- sonrie y entra despacio, buscando el interruptor de la luz.

Lo encuentra. Se oye un "Clic". Pero no hay luz. Entro yo después. No se ve nada. Me tropiezo con una silla y me doy en la espinilla. Suelto un pequeño grito de dolor y sigo buscando algo.
Tanteo lo que parece ser una mesa y busco por encima de esta. Encuentro algo cilíndrico. Salgo afuera y veo lo que es a la luz de la luna. Una vela.

Los demás están en la entrada, vigilando. Vuelvo a entrar.

-Tienes un encendedor?- le pregunto a Mich.

-Porque deberia tenerlo?-me pregunta ofendida.

-supongo que fumas.-

-Supones?¿por qué?-

-ay, que importa. ¿Tienes un maldito encendedor o no?- digo molesto.

-Si,pero no fumo.- dice, aun que no me lo creo. ¿Por qué sino iba a tener un encendedor?. Me lo da y enciendo la vela que permite iluminar toda la sala.
La dejo en la mesa. Los demás entran pero yo los paro.

-Quedense ahí. Todavia no es seguro.-

-Enzo, soy mayorcita, se cuidarme sola.-me dice Karla ofendida.

-Pero esos dos no.-digo apuntando a Yael y Amy- quedate con ellos.-

-¡¿Como?! Nosotros también sabemos defendernos, eh!- dice Amy,ofendida.
Suspiro. Yo solo quiero protegerlos.