16. La Llave

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27 de octubre de 2033

Lily esperaba junto a Iván en el mostrador del Caldero Chorreante esperando a que Fleming bajará de una vez por todas, tenían media hora esperando y ya estaban fastidiados.

- Deberías ir a la oficina, para que no tengas problemas - aconsejó Lily cuando ya iban a cumplirse los cuarenta y cinco minutos - Debes tener ya trabajo acumulado - agregó apenada.

- Ya te dije, no pienso dejar que andes sola sin varita, por lo menos en Ollivander puedo estar tranquila sabiendo que estarás segura - dijo Iván cruzándose de brazos.

- Voy con Fleming - insistió Lily.

- Que tampoco tiene varita, peor aún - dijo Iván resoplando - ¿Dónde estará?

- Lo siento me dormí - dijo Fleming bajando rápidamente las escaleras, arreglándose aún la camisa y el despeinado pelo - ¿No llevaran esperando mucho o sí?

- Casi una hora - dijo Iván en tono de reproche.

- Tienes mejor pinta que ayer - dijo Fleming viendo a Lily.

- Hoy no he caído seis metros.

- Buen punto.

- Vamos - dijo Iván tomando la mano de Lily y guiándolos a la puerta trasera de la taberna.

- Tengo una duda - dijo Fleming después de que cruzaron la barrera de ladrillos.

- No me extraña - dijo Lily.

- ¿Cómo hiciste ayer el truco con la antorcha? - preguntó Fleming y Lily se tensó - ¿No creerán que no lo note?

- ¿Notar qué? - preguntó Lily haciéndose la loca e Iván presionaba con más fuerza su mano.

- Más bien he notado algo, tú tienes algo... como decirlo... no lo sé, pero resulta que a veces hay algunos hechos extraños que coinciden con tus cambios de humor, como si no controlaras la magia, similar a lo que sucede con un mago cuando es pequeño - explico Fleming, y ambos se vieron con miradas nerviosas.

- Bueno, que casualidad - dijo Lily tajante.

- Si claro, casualidad - dijo Fleming.

- Si casualidad - insistió Lily al ver que Iván no reaccionaba.

- No lo creo.

- Ya llegamos - dijo Iván parándose frente al envejecido local con un polvoriento escaparate - No creo, o espero que tarden más allá del mediodía para encontrar una varita.

- Sería estupendo que tuvieran una copia de la mía - dijo Lily con tristeza.

- ¿Entramos? - pregunto Fleming asomándose por la ventana.

- Te cuidas Lily - dijo Iván resignado.

- ¿Es decir que no estarás? - preguntó Fleming con alegría.

Iván entrecerró los ojos como si tratará de lanzar mentalmente alguna amenaza, y luego sorprendió a Lily dándole un beso con más ímpetu de lo normal, casi olvidándose de que había más gente alrededor de ellos.

- Nos vemos - dijo Iván despidiéndose con una radiante sonrisa.

- Entremos - dijo Lily después de varios minutos donde seguía procesando lo ocurrido.

- Parecía que te iba a comer - bromeó Fleming y Lily golpeo su brazo mientras cruzaban el umbral.

- Cállate Fleming.

- ¿Lily? - preguntó una persona asomándose por el mostrador.

- ¿Colin? - preguntó Lily impresionada, luego de reconocerlo, lucía bastante diferente a la última vez que lo había visto cuando estaban en Hogwarts, ahora con barba y un poco más corpulento - Que sorpresa verte.

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