jay.

XIII

Amaba estar en público con Jay, pero detestaba las fiestas. Las personas siempre lo rodeaban y hablaban con él mientras que a mí me dejaban relegado a solo un asiento en lo gran mesa redonda. Era irritante ver cuántas personas solo iban para saludarlo, incluso si no se quedaban, parecía obligatorio ir y tener una linda charla con él. Pero un día una chica se sentó a lado mío.

"¿y?" preguntó ella esperando que yo fuera capaz de leer su mente. "¿Cómo es tener de pareja a alguien tan lindo como Jay?

Yo sonreí mientras desviaba mi mirada hacia Jay, él bromeaba con un chico y ambos reían contentos, parecían llevarse bien. <Parecían> regresé mi atención a la chica y pensé en ni respuesta.

"Jay es especial" Me limité a decir tomando el vaso de agua que había ignorado hasta ese momento.

"Muchos desearían tener tu suerte" ella suspiró. "Mi pareja es esa de allá, la chica amargada que no mueve ni un dedo" hizo un puchero.

"Es linda." Dije por compromiso, aunque ella realmente fuera linda. "Estar con Jay no siempre es bueno, él a veces es demasiado distante."

"¿Jay? Pero si es un niño adulto, no me lo imagino quieto sin su alegre sonrisa"

Sonreí. Claro que nadie se imaginaba a Jay sin su alegre sonrisa, nadie se lo imaginaba sin sus características emociones o infantilidad. Era un poco gracioso, si yo contara la verdad la gente jamás me creería.

"Jung" Jay me llamó e inmediatamente sentí sus brazos alrededor de mí. Alzó su celular y tomó una foto. "Ah... no sonreíste. Intentémoslo de nuevo, sonríeme." La chica con la que hablaba sonrió despidiéndose con rapidez. "Jung..." Sonreí. "Umm... no, así no"

"No tengo otra manera de sonreír."

"Claro que la tienes, tu sonrisa suele ser linda." Jay me besó en la mejilla antes de dejarse caer sobre su silla. "me gusta tu sonrisa, Wonnie."

Solté una pequeña risa mirando a otro lado.

"¿ves?" preguntó Jay tomando otra foto con su celular. "tu sonrisa es hermosa. Es honesta."

Honesta.

Yo podía seguir siendo honesto.