ღ Capítulo 6 ღ

990 143 7
                                    


Larga había sido la noche de Volkov tras dejar al lobo durmiendo en el living de su hogar, pues seguía pensando en todo lo sucedido desde que había sido salvado de ser atacado en el bosque. Dificultándole el descansar. Aún somnoliento por la mañana salió de su habitación, quedando totalmente paralizado ante lo que veía, sintió que su respiración se cortaba abruptamente en un jadeo, y sus latidos le ensordecían.

La figura desnuda de Horacio, quien dormía sereno y despreocupado bajo la manta, estaba frente suyo. Las hebras de su largo cabello, ahora destrenzado, parecían caer con elegancia. Viktor se permitió recorrer con la mirada cada detalle de él.

—¿Acostumbras mirar a las personas mientras duermen? — Espetó el moreno con una sonrisa de lado, abriendo ligeramente sus ojos. Con total calma se estiró, bostezando y removiendo la manta.

Viendo la reacción de Volkov, continuó —¿Qué ocurre? Parece como si hubieses visto un fantasma— rió, hasta que vio su propio cuerpo transformado en humano —Oh, creo que entiendo— terminó por murmurar.

—¿Qué está ocurriendo? — la voz del peligris temblaba, mientras inconscientemente sus pasos le alejaban de Horacio. Mayor fue su desesperación al sentir su espalda chocar contra la pared, mientras el contrario acortaba distancias.

—Espera, ¿De verdad no lo notaste? — Preguntó desconcertado el de cresta, viendo como Volkov negaba con la cabeza. Podía ver el miedo y la confusión en sus grisáceos ojos. —¿No sabías que era yo? —

—¿C-cómo iba a saberlo? Nada de esto tiene sentido—

—¿De qué hablas? Si cuando me tenían encerrado en ese laboratorio escuché claramente que buscaban a los de mi especie—

Los ojos de Viktor se abrieron de par en par, recién comenzando a atar cabos sueltos, y sintiendo que finalmente despertaba del atontamiento que nublaba su mente en caos total.

Sus manos se posaron en el pecho del moreno para crear distancia física entre ambos, y notando recién su desnudez las retiró de inmediato.

—P-por favor, vístete primero, a-así podemos hablar con calma— titubeó inquieto.

—Bien, pero...necesito entonces que me des algo de ropa, no vine con equipaje o algo por el estilo, tal vez debí preparar una maleta antes de ser atrapado y adormecido por los de tu laboratorio ¿No crees? — habló con sarcasmo.

—Horacio, juro que no tenía idea de todo esto. Cuando me comunicaron del proyecto se me informó únicamente de mutaciones genéticas en la especie Canis Lupus, que coincidía según ellos con una parte de la cadena de ADN humana, por mi mente pasó la posibilidad de que fuese algún trastorno o enfermedad, pero jamás pensé que se referían a... esto— Volkov levantó su mirada, encontrándose con la del de cresta, quien le miraba atento ante su explicación.

Horacio pudo ver en su expresión que estaba siendo sincero, notando la tristeza y culpa con la que sus palabras habían salido. Aquello suavizó sus facciones, suspirando. No podía odiarle si no lo había hecho con mala intención, sólo seguía órdenes en su trabajo.

—Entonces, si no sabías que era yo ¿Por qué me defendiste en el laboratorio? ¿Por qué te preocupaste por mí y hasta me trajiste a tu casa, si viste en mí tan solo un lobo? — El moreno realmente estaba desorientado respecto a aquello.

—Cuando vi a esa criatura herida y maltratada en la camilla de metal, sabiendo que por mi culpa estaba allí, sentí la necesidad de remediar aquello, sabiendo que no merecía ese trato indigno— Suspiró, bajando la mirada y continuando, —Y porque los lobos son importantes para ti, Horacio. Lo supe cuando estuviste dispuesto a enfrentar a los del laboratorio sin pensarlo dos veces. Lo hice por ti, pensando que eso era lo que hubieses querido, que cuidase de "ese" lobo... que resultaste ser tú—

Finalmente podían aclarar lo sucedido, limpiando sus culpas y sincerándose. Ya no existía enojo de por medio, no había resentimiento, sólo nuevas oportunidades para ambos. Conmovido, sin pronunciar palabra alguna, el moreno se abalanzó sobre Volkov, abrazándole con fuerza.

—Eh...Horacio— murmuró avergonzado el ruso, sintiendo sus mejillas arder.

—dios, lo siento, ¿Me das ropa ahora sí? —

[Link al post original del dibujo ♡ https://twitter

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

[Link al post original del dibujo ♡ https://twitter.com/Nia_Camembert02/status/1394051904926277632] 

🐺🏹• Cuídame  • Volkacio AU [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora