layitdown - chifuyu matsuno fanfic

Primera parte: capítulo 3

[Rio]

El jueves y viernes transcurrieron de forma normal, Chifuyu se sentaba junto a mí y yo le dejaba ver con disimulo, después me dirigía una sonrisa y se desaparecía por el resto del día. Durante el fin de semana atendí el negocio de mis padres y me dediqué a leer manga. El domingo recibí un mensaje de Chifuyu:

"Remitente: Chifuyu :)

Hora: 13:22

frutilla o manzana? "

Miré el mensaje intrigada, ¿era alguna pregunta de doble sentido?. Tecleé:

"Manzana."

Me quedé mirando el teléfono esperando alguna respuesta, pero los minutos pasaron y no había otra señal de Chifuyu. Decidí quitarle importancia y seguí leyendo mi manga, sabía que debía estar estudiando pero mi ánimo no me ayudaba.

El lunes me levanté desanimada, como ya era habitual en mí. Apenas pude ponerme las lentillas y salí en dirección a la escuela con el estómago vacío, no había querido desayunar. Llegué a mi clase y cerré los ojos mientras apoyaba mi cabeza en mis manos.

Unos minutos después sentí como deslizaban unos dedos en mi cabello.

—Rio, tienes un tremendo nudo aquí atrás —Hanae peinaba mi cabello con sus dedos, me dejé llevar y permití que me lo trenzara —. Listo —dijo satisfecha después de un rato, se sentó frente a mí —. ¿Estás bien, Rio?.

Asentí sonriendo —Claro, solo quiero que acaben los exámenes.

Hanae coincidió conmigo, procedió a sacar una revista y comenzó a enseñarme algo sobre una serie que había visto en la noche. De verdad quería prestarle atención, pero mi mente comenzó a divagar como es costumbre y a penas captaba lo que Hanae me decía. Me sentía una mala amiga. Pronto llegó la maestra y Hanae se dio la vuelta, comenzamos la clase y traté de concentrarme solo en eso.

Instintivamente miré hacía atrás, el puesto de Chifuyu estaba vacío, el examen no sería hasta el segundo período por lo que no esperaba que llegara antes. Me resigné a tratar de tomar apuntes mientras jugaba con el lápiz.

Cuando terminó la clase me estiré aliviada, apenas recordaba un cuarto de lo que habíamos hablado. Hanae se levantó y me dijo que fuéramos a comprar, estábamos por salir cuando una chica se nos acercó.

—¿Eres Rio Ono, verdad? —me preguntó. La miré y creí reconocerla, era del segundo salón. Asentí —. Kobayashi quiere hablar contigo —la miré extrañada, miré a Hanae y ella se veía tan confundida como yo. No conocía a ningún Kobayashi.

—Déjala tranquila, Sakura —un chico de cabello negro se acercó, no era de mi salón —. Eso se lo diría yo —la tal Sakura rodó los ojos y se fue —. Rio Ono, quería saber si puedo hablar contigo afuera.

Miré al chico, ¿lo conocía? claro que no, aunque no dudaba en que mi mente me estuviera jugando una mala pasada y en realidad si había hablado con él alguna vez en mi vida. Miré a Hanae, ella asentía y me miraba intrigada. Miré a Kobayashi y asentí, el chico sonrío y salimos. Lo seguí por la escuela hasta llegar al pasillo del patio central, el cual convenientemente se encontraba vacío.