30 de diciembre, 2005
La pelinegra pedaleaba con todas sus fuerzas mientras se dirigía a la farmacia con apuro, ya era de noche y temía encontrarla cerrada. Sentía sus manos congeladas debido al frio y de su boca solo salia vaho. Se detuvo frente a la farmacia, la cual milagrosamente estaba abierta, y dejó la bicicleta tirada de forma descuidada en la vereda mientras entraba.
A Kuta y a su madre les había dado la gripe de una forma exagerada, por lo que ella tenía que hacerse cargo de ellos y de la casa. En ese momento estaba comprándoles medicina con la esperanza de que se sintieran mejor de aquí a mañana, ya que ella quería salir con Chifuyu en año nuevo y si su familia seguía enferma no podría, además, sentía que ella también comenzaba a enfermarse.
Luego de unos minutos salió de la farmacia con la bolsa en las manos, levantó la bicicleta del suelo y comenzó a pedalear de vuelta a su casa.
Le emocionaba la idea de que tendría que bajar por una colina empinada para devolverse, esa era la única razón por la que había escogido ir a una farmacia más lejana.
Rio no se había dado cuenta de que alguien la había seguido hasta la farmacia, y le había cortado los frenos a su bicicleta.
...
Takemichi corría con desesperación, hace apenas unos minutos había vuelto del futuro y se había dado cuenta de que nada había funcionado.
Y el futuro que había visto era el peor de todos.
Hina estaba muerta.
Rio estaba muerta.
Chifuyu estaba muerto.
Todo por obra de Kisaki.
Él solo quería destruir a Takemichi, y para hacerlo debía dejarlo solo, arrebatarle a sus amigos. Por eso partió con Rio.
Si mataba a Rio, Chifuyu quedaría destrozado, sería la segunda vez que le quitan a alguien que le importa. Y así, quizás lograría que se alejara de Takemichi.
Cuando ella muriera los demás caerían como fichas de dominó. Chifuyu fue el siguiente al intentar matar a Kisaki él solo, prácticamente fue como un suicidio el ir de manera solitaria a enfrentarse a Tettas y sus hombres.
Naoto se lo había contado todo, y ahora Takemichi sabía lo que debía hacer. Fue un golpe de suerte haber vuelto justo ese día al futuro, sino, la muerte de Rio habría pasado desapercibida.
Takemichi ya no sentía las piernas de tanto correr, pero no podía detenerse, tenía que salvarla, tenía que salvarlos a todos.
A lo lejos vio la colina que le había indicado Naoto, corrió con más fuerzas.
...
El viento se azotaba contra su rostro mientras ella bajaba a toda velocidad por la colina, se sentía tan libre. Sonrió mientras se inclinaba hacia adelante.
"Podría hacer esto durante toda mi vida", pensó.
De lejos vio como se acercaba a la calle por donde pasaban vehículos y presionó los frenos de la bicicleta, se sorprendió un poco al ver que no hacían efecto.
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layitdown - chifuyu matsuno fanfic
Hayran KurguRio Ono nunca se tomó en serio su atracción por Chifuyu, para ella solo era el chico que raramente asistía a clases y se sentaba junto a la ventana a leer manga. Mirarlo a la distancia era suficiente para ella. Para Chifuyu Matsuno, Rio solo era la...