Primera parte: capítulo 7

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[Rio]

El vaso que tenía en la mano cayó al suelo y me paralicé al escuchar esas palabras. Mi madre me miró preocupada y se acercó. Miré hacía la televisión y vi como mostraban el lugar de los hechos, también había un detenido pero yo ya no escuchaba nada.

Mi mamá limpiaba el vaso quebrado mientras me hablaba, pero tampoco podía oírla.

—Perdón, me siento mareada —me excusé y subí rápidamente a mi habitación.

Comencé a llorar mientras recordaba lo que Baji me había dicho, ¿a esto se refería?. ¿Él sabia que iba a morir?.

Con desesperación comencé a buscar mi teléfono entre mis cosas, Chifuyu debía estar destrozado. Marqué su número, buzón de voz. Lo intenté una, dos, tres y cuatro veces más, pero no contestaba. ¿Qué debía hacer?, quería estar con él, sobre todo en este momento. Ahora entendía el nerviosismo y la preocupación que había cargado durante todos estos días. 

—¿Rio? —mi madre entró en mi cuarto, rápidamente comencé a limpiar mis lágrimas —. Oh, cariño, debes seguir nerviosa por lo de ayer —me abrazó y acarició mi cabello mientras yo sollozaba —. Acuéstate, necesitas descansar como ordenó el médico —dijo separándose de mí—, tu padre y yo también nos iremos a dormir para no molestarte con el ruido —me dio un beso en la cabeza y salió.

Rápidamente ideé un plan, solo debía esperar a que mis padres se durmieran e ir en busca de Chifuyu. Apagué la luz y me acosté en mi cama mirando hacia el techo, volví a llamar a Chifuyu pero nuevamente su buzón de voz me contestó. Suspiré nerviosa.

El cielo ya estaba completamente oscuro, miré la hora: 23:54. Estaba segura de que mis padres dormían, en silencio salí al pasillo y verifiqué que dormían profundamente al escuchar sus ronquidos. Bajé tratando de hacer el menor ruido posible y salí por la puerta principal. Me calcé los zapatos afuera y comencé a correr en dirección al departamento de Chifuyu, si tenía suerte lo encontraría allí, me dolía el estómago con cada paso que daba. Odiaba engañar a mis padres, pero necesitaba estar cerca de él y acompañarlo, si todo salía bien estaría de vuelta antes de que despertaran.

[Chifuyu]

n/a: decidí no narrar la muerte de Baji para ahorrarnos sufrimiento.

No lo entendía, no quería aceptar que Baji estaba muerto, los ojos ya me pesaban de tanto llorar. Takemichi y yo estábamos en mi cuarto, él no dejaba de lamentarse y decir que era su culpa, que no pudo evitarlo, yo no lo entendía.

—Basta, Takemichi —le dije, él me miró con los ojos empapados en lágrimas —, Baji lo quiso así, nadie hubiera podido evitarlo.

Desvié la mirada y la imagen de Baji sonriéndome por última vez volvió a mi cabeza, sentía que había cumplido con mi deber al nunca desconfiar de él, pero no sabía que debía hacer ahora que ya no estaba a mi lado. Quería entenderlo y aceptar los motivos de Baji, pero me costaba.

Me limpié las lágrimas mientras miraba por la ventana, estaba completamente oscuro. Creí estar alucinando cuando vi a Rio acercándose al complejo de departamentos, salí y bajé corriendo las escaleras. Me quedé parado mirándola mientras ella corría agitada hacia mí, se abalanzó a mis brazos y me paralicé por unos segundos hasta que le devolví el abrazo, atrayéndola hacia mí.

—Lo vi en las noticias —dijo sollozando —. Lo siento, Chifuyu.

Sentí como mi cuerpo temblaba mientras las lágrimas volvían a caer silenciosamente por mis mejillas. Rio me miró y estiró sus brazos para abrazarme por el cuello, obligándome a apoyar mi cabeza en su hombro. Seguí llorando mientras ella me abrazaba en silencio.

layitdown - chifuyu matsuno fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora