Es genial, ¿no?

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Cuando levanté todo mi ser existente y lo veo junto a mi lo primero que se me ocurre es vengarme, luce tan plácidamente durmiendo. Le tiró una almohada y salgo corriendo hacia el baño.

Refugiada en mi baño, alguien no demoró en levantarse e ir hacia mi. 

 —Vengo en son de paz.

Lo dejo pasar con las manos arriba, le apuntó con el cepillo de dientes.

—¡Uy, qué miedo! —Se ríe de mi arma letal.

Nos cepillamos los dientes juntos, peleamos un poco de quien cogía el agua y quien no. El salió primero y cerró la puerta. Al ver que la soledad abunda, comencé analizar mi cuerpo frente al espejo, me siento espectacular cuando estoy en calzones y una blusa ancha. No tengo tanto trasero pero luzco fenomenal. Amo cuando estoy de genio y mi autoestima esta en su punto más alto. 

¿Por qué duermo en interiores con Teddy presente?

Se me hace lo más normal del mundo estar con él así, siento que es lo mismo que estar en traje de baño. Además ni que viera algo "Guao". Salí de mi refugio convencional y fui directa a la cama donde no había nadie. Lo busque con la mirada, no lo encuentro. Estoy apunto de girar cuando sentí como alguien me alza para tirarme al colchón. Un grito extraño sale de mi boca. Libero mi cuerpo de su agarre y busco una almohada para protegerme del ser sin camisa y con una pantaloneta liviana frente mio. 

Deli.

Se balancea sobre mi quedando encima mio, no dejo que él tome el control y lo volteo. Le hago cosquillas y él se rinde sosteniendo mis manos para que no vuelva a hacerlo nuevamente. 

Siento todo de él, todo.

Por un momento nos quedamos quietos. Él baja lentamente sus manos hacia mis glúteos y las sube hacia mi espalda. Baja devuelta. Sonríe. Empiezo un movimiento lento y seductor. Subo la velocidad cada minuto que pasa, dejo que mi movimiento fluya con la tensión. Me jala hacia él y sus labios tocan mi cuello con delicadeza, haciéndome estremecer y que mi excitación suba más. Muerdo mis labios al sentir los besos en mi cuello, absorbe mi piel suavemente y hace que la piel de gallina aparezca en mis muslo. El calor recorre todo mi cuerpo. Nuestro corazones se aceleran al ritmo del movimiento. Alzo mi mirada hacia su rostro y mi ritmo va aumentando de velocidad. 

Se ve tan ardiente agitado.

Bajo de vuelta para besarlo, muerdo sus labios y voy hacia su cuello. Él sigue sujetando mis caderas y subiendo de nuevo hacia mi espalda. Beso, beso y beso. Siento como mi cuerpo se calienta aún más. Sigo con mis movimientos agresivos. Más y más. Hasta que Teddy suelta un suspiro de satisfacción al igual que el mío tres segundos después. Caigo en su pecho para descansar. Nuestro latido son iguales. Tomo aire, haciendome para un lado. 

Mis dedos juegan con mis labios, eso delata todo.

¿Qué se hace o se dice después de un acto... como éste?

Él se endereza viendo de reojo, poniéndose una almohada bajo su abdomen. Y en ese momento me di cuenta que lo he sentido pero no lo he visto.

Cállate, cállate, cállate.

Ninguno de los dos dice nada. Dejo salir un largo suspiro. Él bufa, eso me contagia. Nos miramos y sonreímos. Prácticamente hicimos algo que no se sí esté bien hacerlo y lo único que estamos haciendo es reírnos por los bajos. 

—Voy al baño —dice, caminando medio raro.

Reí a causa de eso. Luego de escuchar la puerta, siento mi trasero aun lado de la cama. Quedó en absoluta parálisis cuando siento que entre mis piernas está húmedo, muy húmedo. 

Mi vida en el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora