¿Tú Abuela?

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Al día siguiente la noche de talentos del colegio. Bailo en una escena donde Troy anima a los chicos de la famosa película High School Musical. Invité a mi abuela y ella aceptó sin peros. Arregle todo lo que tenía que llevar, y en especial la cajita.

Al llegar dejé a mi abuela en la fila para que pase con el ticket sin problema. Como habíamos llegado temprano la cola no era muy larga.

En el camerino, ninguno de los de siempre estaba, así que, encontré un lugar donde compartía miradas con la puerta. Espere ahí unos largos minutos hasta que dos personas que conozco entran; Christopher y Selena.

Volteé para que no me vieran, aún así lo hacen.

-¡Hey, Josh! ¿Cómo estás? -Comienza el chico.

Sonreí por compromiso.

-Bien, todo bien.

-Hola, Joshy -dice su acompañante.

¡Wtf!

-Ah, Hola, Selena.

Después de unos minutos, sin dirigirles una palabra, ellos establecen una conversación. Parece que Chris encontró a alguien que comprende su compañía...

¿O tan solo Selena está fingiendo para saber sobre nosotros por puro morbo?

No es que me caiga mal, solo da mala espina. Aunque tampoco creo que estoy exagerando. Ella tiene un aspecto de ser muy manipuladora. Es linda, sí, no por nada Chris puso los ojos en ella. Hoy luce un labial rojo eléctrico en sus finos labios, tiene el cabello largo y marrón, usa esos lazos alrededor de su cabeza. Tiene los ojos excesivamente oscuros con un tono negro muy amenazante.

Lo sé, gracias a sus miradas fulminantes. Soy inútil para fijarme en pequeños detalles, peor cuando algo no me interesa. Pero aquello es algo inevitable porque cuando tiene a alguien frente suyo se la queda viendo por largos segundos...

Cómo justo ahora lo está haciendo.

Es muy incomodo.

Vuelvo a mirar inquieto la puerta, esperando tanto que ella la cruce. Le quiero mostrar, estoy desesperado. Su opinión es importante. Ella la conoce y creo que sabe más de sus gustos. Sofía entra con Charlie, sonreí cuando las veo. No pensé que iba a sonreír del mismo modo, pero, lo hizo.

-¡Hola! -exclama la chica de lentes.

-¿Podemos hablar? -preguntó, viendo tras mi espalda.

-Yo también quiero hacerlo.

Levanté mi trasero para ir donde ellas. Al estar en el punto comienzo sin esperar que ninguna inicie.

-Sé que el comentario de "son gallinas" no estuvo bien, lo siento por eso. En ese momento no entendí la situación.

Sofia estira su brazo para mi hombro, apretando suavemente -Yo ya te perdone, es ella la loca.

-También lo siento por lo que dije...

La interrumpí negando la cabeza -No, para nada te disculpes... me lo merecía, de una manera tuvieron que sacarme de la ignorancia.

-Bueno, ya pasó, se quedó en el pasado.

Acierta Charlie -Si, pasado pisado.

-¿Puedo quedarme con ustedes?

La pareja está riendo y jugueteando. No quiero molestar. Nos sentamos en una esquina y establecemos una pequeña conversación sobre la noche anterior. Después de unos minutos, llegaron la mayoría. Nos acompañan en el mismo círculo. Estoy en el regazo de Charlie, conversamos entre todos de un tema en específico.

Mi vida en el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora