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Mis amigos Charlie y Josh, se acercaron a mí y nos fuimos de ahí, fuimos a la cafetería, nos sentamos en una mesa de donde veía perfectamente la de Yolo, ella estaba en medio de Temo y Meli, como el otro día. Bruno, él no se había sentado en mi mesa, como lo hizo aquel día, ni en casa me hablaba sobre Yolo, quizás solo fue un capricho y ya la olvidó.

Estaba sentado "desayunando", frecuentemente la miraba como ya lo había acostumbrado pero ahora un poco menos, tenía mi mirada perdida en el centro de la mesa, pensando y pensando... estaba demasiado frustrado.

Sonó el timbre y por inercia me puse de pie y caminé, a mi lado estaban mis amigos, me encontré con Temo e hice como si no lo hubiera visto... ¿qué si fui discreto? No lo sé... pero no me importa, Yolo estaba con él y quería que le quedara claro que no somos lo que piensa. Fui frío con Temo, no sé como lo vaya a tomar.

//Cuauhtémoc//

Nos habíamos levantado de la mesa para dirigirnos a nuestro salón, al pararme me crucé con Ari, pero no me sonrió como de costumbre... quizás no me vio... no lo sé, quizás fue a propósito... no lo creo, Ari no es así.

Fuimos al baño y luego subimos a nuestro modulo, Yolo entro a su salón y Meli y yo al nuestro, Ari estaba sentado solo, en el piso y recargado en la pared, me acerque a él y me senté a su lado, como de costumbre, le dije "hola" y no contestó...

Se puso de pie y se fue de ahí, dejándome solo como idiota sentado en el piso. ¿Qué demonios estaba pasando?

Meli se sentó a mi lado.


—¿Estás bien? —me preguntó pero no contesté, la escuché pero no reaccioné— ¿Qué paso? —nuevamente no contesté— ¡TEMO! —gritó cerca de mis oídos y me aturdió.

—¿Eh? Oh... hola —reaccioné tontamente y forcé una sonrisa. Ella me miró raro.

—Hey, aquí pasa algo extraño ¿Por qué no estás con Ari? Creí que eran amigos inseparables.

—yo también creí eso... —confesé en voz baja.

—¿Qué paso?

—Mmm... nada... ese es el problema —inspiré profundo—. Me ignoro y no se porqué. No sé qué dije o que hice mal.

—Sabes, desde que vi a Ari pensé que era frío y serio... y aun pienso eso.

—No, él no es así —lo defendí, a pesar de todo— yo pensaba igual que tu, pero él no es así, es muy divertido y agradable, aunque a veces se pone muy serio pero es porque esta pensativo.

—¡Ves! De que te preocupas, seguro que tiene algo en la cabeza y por eso no habla contigo, quiere estar solo.

Dear, dear, diary -AristemoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora