//Aristóteles//
Todo estaba bien, Bruno había salido de casa, imagino que con Yolo, ahora mi conciencia estaba tranquila. Estaba mucho más relajado, tranquilo y de cierta forma, agradecido con Axel. Jugamos videojuegos por toda la tarde, desde que Bruno se fue hasta que llegó, ya era un poco tarde y eso me hizo creer que si fue a la cita con Yolo, sabía que tenía razón. Pero algo me desconcertó, no se veía bien, me refiero a su actitud y en parte a su aspecto, porque cuando esta feliz, sonríe, bromea, habla y habla de lo sucedido, ahora pasaba todo lo contrario. Entro sin sonreír, sin bromear y sin hablar, solo subió a su habitación e hizo como si no nos hubiera visto.
—Axel, esto me preocupa —le dije a mi hermano, quien estaba a mi lado.
—Tengo la pequeña sensación de que Bruno la paso mal —respondió Axel.
— ¿Tu crees? —dije irónicamente— iré a verlo.
—OK.
Subí las escaleras y esta vez no entré sin permiso como la vez anterior, primero que nada por respetar su privacidad, y segundo porque esta vez la puerta estaba completamente cerrada. Toqué esperando una respuesta.
—¿Qué quieres Ari? —escuché una voz débil del otro lado de la puerta.
—¿Cómo supiste que era yo?
—Lo imagine.
—¿Estás bien? —pregunté muy preocupado.
—Sí, tú estas bien, yo estoy bien ¡TODOS ESTAMOS BIEN! —gritó con una voz muy extraña.
—Dios mío —susurré al imaginar lo que sucedió— ¿qué hiciste Bruno?
—¿Lo correcto? —preguntó.
—Ábreme la puerta —exigí—, necesitamos hablar.
—No tiene caso, lo hecho, hecho está.
--Pero... —intenté convencerlo pero me interrumpió.
—Necesito estar solo, me harías un gran favor si me dejaras.
—OK —suspiré— sea lo que sea que haya pasado, lo siento mucho hermano.
Espere una respuesta y no la recibí, cumplí con su petición y lo dejé solo, no volví a bajar con Axel, me fui directo a mi habitación, me sentía culpable.
No sé qué pasó pero imagino que no fue nada grato para Bruno, creí que había ido a esa cita, o quizás si lo hizo y hablo con ella de lo sucedido... ¡No tengo idea! Mi mente creaba miles de ideas en torno a ellos dos, algo pasó y no puedo evitar sentirme culpable. Si pudiera hacer algo para remediarlo, sin dudarlo lo haría, a ambos los quiero, claro que de diferente manera, pero si ambos estuvieran felices sería lo mejor, para ellos...para mi, no tanto.
Al día siguiente.
//Cuauhtémoc//
Me desperté después de un largo sueño con Ari, ya no me parecía extraño que soñara con él, es algo que no puedo evitar.
Llegué puntual a clases, la profesora aun no llegaba, tenía tiempo de platicar con Ari, pero tan grande era mi mala suerte que en cuanto me senté, la profesora entró. En las siguientes clases, Ari no habló mucho, estaba en sus días antisociales conmigo, ya no me afectaba, he entendido que así es él y más cuando necesitaba pensar.
Llegó la hora del receso, como de costumbre nos fuimos los tres juntos, al llegar a cafetería y sentarnos, Ari reaccionó de forma muy extraña.
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Dear, dear, diary -Aristemo
RomanceQuerido... querido diario; Cuando el pasado no se ha olvidado, se vuelve presente. Con una mirada comenzó todo. Él despertó en mí, sentimientos que no sabía que tenía, ilusiones que no sabía que existían, y esperanzas que nunca creí llegar a sentir...