[Bosque de Árboles Gigantes]
– Hola, Eren. ¿Ya despertaste?
– ...
Eren se inclinó un poco hacia adelante, hasta que notó que no tenía los brazos completos; los movió y se quitó la capa de encima, viendo que estos se estaban regenerando y ya iban por los codos.
– ¿Qué demonios...? ¡Mis brazos!
– Eren –llamó. Él la miró.– Mírame, estoy igual que tú –volteó la mirada.– Supongo que ambos tenemos un mal día.
– Ymir... –miró sus brazos.– ¿Por qué demonios no tengo brazos?
– Lo siento, fui yo quien te los arrancó –dijo Reiner.– Tenía prisa. Cuando te mordí la nuca, no tuve en cuenta los brazos.
El castaño bajó la mirada.
– Ya veo...Así que perdí –los miró de nuevo.
Todo quedó en silencio unos segundos, hasta que él levantó su cortado brazo y abrió un poco la boca, listo para morderse.
– ¡Detente, Eren! –pidió Bertholdt, poniéndose de pie.
– Cálmate, ¿Quieres? –él bajó su brazo.– Mira bien a tu alrededor –miró hacia adelante.– Estamos en un bosque dentro de la Muralla María. Pero estamos lejos de las murallas. En otras palabras, es territorio de titanes. Observa –miró hacia abajo.– Creo que ese de ahí es un titán excéntrico. Parece que solo esté descansando, pero no nos pierde de vista. Y hay muchos pequeños ahí abajo. Eso ya es peligroso de por sí –miró al otro lado.– Por allí hay otro grande. Nos está mirando, pero no se nos acerca. Será delicado –recargó un brazo en el hombro de él y miró a los guerreros.– Y luego están esos tres. Desgraciados...Son los únicos con equipo de maniobras tridimencionales. Reiner lleva el que usabas tú. Dudo que transformarse en titán vaya a solucionar nada. Ellos pueden hacer lo mismo o huir a la copa de los árboles. Ella puede reducirte sin problemas. Y sin contarlos a ellos, estamos rodeados de titanes. Salir de su territorio sería complicado incluso con nuestros poderes. ¿Lo entiendes? –lo miró.– Hacerse el héroe no aportará nada.
– No –negó el rubio. Ambos lo miraron.– Ni siquiera pueden transformarse en titanes. No es tan sencillo. Sus cuerpos están al límite, necesita concentrarlo todo en restaurarlos.
– ¿Es que eres tonto? –frunció el ceño.– ¿Por qué iba a creer lo que dices?
– Ya, no tengo mucha idea de cómo funcionan los poderes de titán. A diferencia de ustedes, sé poco –los miró.– Oye, Tn, dijiste que hablaríamos cuando Eren despertara. ¿Qué planean hacer con nosotros?
– ...Los llevaremos a nuestro hogar. Soy consciente de que no harán lo que les pida, pero como decía Ymir, esto está infestado de titanes.
– Podríamos pelear entre nosotros, pero los otros titanes nos devorarán cuando estemos débiles –dijo Reiner.– Así que tendremos que esperar aquí hasta que llegue la noche.
– Ya sea para que escapen de nosotros o para que los llevemos a nuestro hogar. Pase lo que pase, será esta noche.
– ¿Por qué no corriste hacia allí como Titán Acorazado? ¿Por qué parar aquí? ¿Necesitas descansar?
– Lo dejo a tu imaginación.
– Hm.
Eren frunció más el ceño, bajando la cabeza, pensativo.
– ¿Nos limitaremos a esperar a que se haga de noche?
– Es una opción.
– Los titanes del castillo se movían incluso de noche. ¿No lo harán estos también?
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Ocean Eyes 🌊 Armin Arlert
Fiksi PenggemarTn Hertz es una joven eldiana nacida en Liberio, una de los guerreros enviados a Paradis por Marley, aunque ella es la única que no posee un poder titán. «Te he estado observando por un tiempo No puedo dejar de mirar esos ojos oceánicos Ciu...