Suffer

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- Puede que yo sea un rompecorazones, pero tú, princesa, no tienes límites.- Le dijo Derek a Emily, quien se había negado a bailar con 3 hombres en el poco tiempo que llevaban en la discoteca. Se encontraban en la barra y a juzgar por lo poco feliz que se veía la morena aún quedaban unas cuantas rondas de alcohol antes de que quisiera volver a casa.

Todos allí la habían mirado, más de uno con pensamientos lujuriosos y Derek estaba harto de ver como se la comían con los ojos.
Ese no era el trato que había aceptado al venir solo con ella a la primera discoteca de DC, pero su actitud de caballero no se había podido negar a acompañarla, y viendo ahora como los hombres se le tiraban encima sabía que había tomado la mejor decisión; jamás la dejaría venir a un lugar así, sola, por como estaba sintiéndose después de un caso difícil, por como lo había ido a buscar a su casa a la 1 de la madrugada para salir a despejar su mente, o por el simple hecho de que el vestido que llevaba era más de lo que él podía permitir.

Detonate, detonator (Detonar, detonador)

- Derek, nunca he tenido límites, ese es mi poder.- Emily había elegido a Derek para que la acompañara, por dos motivos: el primero; porque aunque fuera lo suficientemente capaz de cuidarse sola, hoy no tenía deseos de hacerlo, necesitaba sentir lo que era que alguien se preocupara por ella no sólo en el ámbito profesional, necesitaba despejar su mente pero sin tener que ocuparse de algún imbécil; y lo segundo: porque no había nada que le subiera más el ánimo que intentar ser más presumida que Derek Morgan, y sobretodo sus coqueteos y sus conversaciones que nada tenían que ver con cosas del trabajo.

Otra ronda de alcohol y Emily se empezaba a soltar más y más, no era que a Derek nunca le hubiera llamado la atención, pero no podía negar que esa noche la morena lo empezaba a volver loco.

Baby, oh, you blow my mind (Bebé, oh, me vuelves loco)

- ¿Sabes, Derek?- Él la miró fijamente, en la media hora que llevaban allí apenas habían hablado.- Podría haber venido sola si ibas a estar con esa cara de amargado.

- ¿Sabes, Emily?- Usó el mismo tono, haciendo que ella sonriera, por lo menos la vió sonreír.- Nunca dejaría que vinieras sola a estos lugares.

- ¿Por qué, no crees que sea capaz de cuidarme sola?- Le preguntó desafiante.

- ¿Quieres que te dé mis razones?- Esperó a que Prentiss asintiera.- Uno...- Derek levantó un dedo.- Jamás dejaría que llegaras al punto de tener que defenderte de algún imbécil.- Justo lo que necesitaba oír, aunque jamás lo admitiría en voz alta.- Dos...- Levantó el segundo dedo y la miró con una sonrisa pícara.- Jamás dejaría que vinieras sola con ese vestido, sería un desperdicio que los hombres de aquí sólo pensaran en quitártelo, mientras yo sólo puedo pensar en lo bien que te queda.- La morena casi se atragantó con su bebida, eran esos coqueteos nada sutiles los que en realidad la habían llevado hasta su puerta, quizás hoy necesitaba calmar algunas dudas que rondaban en su cabeza.- Y tres... Jamás dejaría que bailaras sola en la pista.- Le dijo mientras le extendía la mano, aquella canción decía absolutamente todo lo que estaba pasando por la mente de Morgan.

You'll tell me wait, wait on ya (Me dirás que espere, que espere por ti)

But baby, I can't wait all night (Pero cariño, no puedo esperar toda la noche)

- Tengo que admitir que han sido unas buenas razones.- Dijo tomando su mano, y antes de ir a la pista se acercó lo más que pudo a su cuerpo para susurrarle al oído.- Pero, no te creo la segunda.- Hizo una pausa para que Derek llegara al punto que ella estaba tocando.- No creo que sólo pienses en lo bien que me queda este vestido.- Se separó de él para disfrutar del segundo de escepticismo en su cara.- Creo que tú también piensas en quitármelo.- Ahora era ella la que le dedicaba la sonrisa coqueta y él quien se atragantaba con su bebida.

One Shots CM (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora