Abandoné el salón del trono lo más veloz que pude después de que la reunión terminó. En medio del gentío que cruzaba por aquellas puertas abiertas de par en par, me di cuenta que Shi no me dejaría marchar tan fácilmente ya que en cuanto me coloqué en pie, él fue muy ágil en mirarme. Mis manos se aferraron de cuyo vestido alzandolo un poco ya que no permitía escapar como pretendí; no iba muy avanzada en el pasillo cuando sentí que me agarraron del brazo con brusquedad. De inmediato reaccione enfocando mis ojos en quién me detuvo, Yong Jan no se veía nada contento, y su disco duro templado fue algo que apesar de todo no me intimidó.
Lo enfrente sin más opciones, no agachando la mirada un solo instante.
-¿Quién es el padre de tus bastardos?- le urgía averiguar de una maldita vez si sus sospechas son ciertas. No le contesté, el pelilargo me sujetó de ambos antebrazos y me sacudió muchísimo peor- ¡Respóndeme cierva! ¡Ahora!- se oyó amenazante. Shi puede lastimarme cuanto quiere, pero yo por mis hijos podré soportar lo que sea.
Estaba enloqueciendo al no recibir respuestas por parte mía, o más bien al notar que así me torture yo no le tengo miedo.
-¡DEJA A MI MAMI! ¡SUELTALAA!- mi pequeño angelito luchó interponiéndose en medio de los dos. Yoonie utilizó toda su fuerza empujando al emperador por su estómago para poder quitármelo de encima, y como es lo irónico, de ese modo lo logró. Mi niña corrió abrazarme por mi cintura, escondía su rostro, pero aún teniendo miedo, miraba al demonio de Shi. Estreché a mi pequeña contra mi, mis intenciones eran proteger a Yoonie con mi cuerpo tal y como lo estaba haciendo con su hermanita, pero el rubio ojiazul valientemente encaraba aquél hombre con sus puñitos bien apretados, más un entrecejo bien fruncido.
El pelilargo miró a Yoonie detenidamente, lo reparo de arriba abajo y aclarada su duda, me observó de vuelta. Este tipo de idiota no tiene un solo pelo, con disimulo detalló a su alrededor, y al notar que estaba siendo espiado, compuso su postura. Es notorio, el senado imperial y el monarca Jeon Jung kook lo llevan entre ceja y ceja. Igualmente me di cuenta cuando a lo lejos los descubrí, si este hombre se atreve a tocarle un solo cabello a mis hijos, ellos se acercarán para interrogar lo que está sucediendo. A Shi no le conviene un escándalo ahora, y más cuando se sabe que hay otro ser más poderoso que él. Jungkook sin ningún problema podría ir a darle el reporte al soberano de Dae Jang Geum, sobre el comportamiento del emperador de Daechwita. Contarle que clase de hombre es, y como no tiene más derecho que mi niño al imperio, en un chasquear de dedos lo podrían substituir. Falsamente nos sonrió, acarició la cabecita de Yoonie hipócritamente y después de posicionarse en perfil dándole la espalda al monarca, nos miró de reojo.
-Fue muy astuto de tu parte mi querida ADRIANNAA, en contratar un impostor para que viniera asustarme- deforme un gesto confuso, ¿Este tipo de qué está hablando?- ¿Creíste que no iba a dar cuenta que ese aldeano insolente que mandaste amenazarme no era Min Yoon Gi? Yo conozco bastante bien a mi sobrino segundo, y así ese esclavo se parezca a él, no lo es.
-¿Me acusa de algo que no e hecho?- me ofendió.
-NO SÉ que clase de brujería hayan hecho para que se parezcan- enfureció su mandíbula- Pero no volverán a engañarme nuevamente. Te juro que a ese maldito lo encontraré y mataré con mis propias manos, vengaré con la vida de tus hijos la muerte de Hye, la muerte de mi hija.
-Yo no tuve nada que ver eso, Shi Yong Jan.. tampoco conozco al aldeano que te...
-No te creo una sola palabra- me interrumpió insistente- Prepárate, porque me convertiré en tu peor pesadilla.
Dado el aviso, con pasos muy serenos se retiró. Nunca quise que mis hijos escucharán eso, que estén pasando por esto, ahora los dos tiemblan horrorizados. Todavía están muy chiquitos como para cargar con esta clase de situación, ¿Qué haré? ¿Como los protegeré? Quisiera tanto que mi amado estuviera aquí, defendiendo a su familia, aveces siento que ya no podré más, que me rendiré antes sin haber luchado. Tengo que mostrarme fuerte para Yoonie y Eun, pero lo cierto es que en el fondo también temo.
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≠Daechwita≠ Terminada•
Historical FictionCada una de las cuatro esposas del emperador dió a luz un bebé en diferentes épocas del año. Todos ellos nacieron muertos, si eso no es maldición, ¿Entonces que lo es?.... 30 mujeres del harén en el palacio imperial es cambiado cada tres meses por c...