Lover | George Weasley

𝖋𝖔𝖗𝖙𝖞-𝖙𝖍𝖗𝖊𝖊

Disfruta el capítulo.

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"¡Mamá! ¡Mamá! ¡Mamá!"

Me desperté con el sonido de Elsie sacudiéndome mientras saltaba junto al sofá. Cuando mis ojos se posaron en ella, sonreí débilmente y envolví un brazo alrededor de ella para acercarla a mí.

"Hola bebé." Dije suavemente. "¿Cómo estuvo tu fin de semana con papá?"

Me senté y pasé una mano por mi cabello antes de mirar hacia la puerta. Malcolm se quedó allí con Leah del brazo.

"Lo siento." Respiré. "Debí de haberme quedado dormido."

"Se suponía que debías haberlas recogido hace dos horas."

"Lo dé." Suspiré antes de mirar a Elsie. "¿Por qué no vas y desempacas tu bolso, sí?"

"Okey." Ella dice en voz baja, corriendo a su habitación con su bolso.

Malcolm bajó a Leah y ella siguió a su hermana mientras me saludaba con la mano, diciendo un pequeño "hola mami", y yo le devolví el saludo con una pequeña sonrisa.

"¿Estás bien?" Preguntó Malcolm. "¿No te sientes mal ni nada?"

Negué con la cabeza.

"Estoy bien. Solo cansada."

"Has estado llorando."

"No mierda." Murmuré. "Gracias por dejarlas. Puedo seguir desde aquí".

Cuando no se movió, lo miré.

"Dahlia por el amor de Dios." Maldijo. "¿Qué está pasando? ¿Problemas en el paraíso?"

"Vete a la mierda." Le dije, poniéndome de pie. "La puerta está ahí."

En cambio, dio un paso más hacia mí, metiendo las manos en los bolsillos de sus pantalones.

"Te dije que fue un error involucrarte con él".

Caminé hacia él, presionando mi mano contra su pecho mientras lo empujaba hacia la puerta. "Fuera."

Extendió la mano hacia atrás para abrir la puerta, sin dejar de mirarme.

"Estoy aquí si quieres volver a casa".

Lo empujé de nuevo, luego le cerré la puerta en la cara. Me di la vuelta y caminé de regreso al sofá, agarrando mi teléfono de la mesa del sofá. George no me había devuelto la llamada.

Antes de quedarme dormida, lo llamé más veces de las que podía contar, pero no contestó.

Decidí llamarlo de nuevo, pero fue al buzón de voz que esperaba.

Colgué el teléfono antes de caminar hacia el dormitorio de mi niña.

Leah había encontrado sus juguetes y estaba jugando con ellos, su bolso acababa de ser tirado al suelo.

Elsie estaba tratando de doblar su ropa pero no sabía cómo hacerlo.

"¡Mami!" Ella gritó cuando me vio. "Necesito tu ayuda por favor."

Me acerqué y tomé la bolsa, la coloqué en su cama antes de sacar la ropa y doblarla para poder ponerla en el armario.

"¿Georgie vendrá esta noche?" Preguntó Elsie. "Quiero mostrarle un dibujo que hice".

Le sonreí suavemente mientras pasaba mis dedos por su cabello.

"No lo creo, cariño." Dije. "No esta noche."