Nada Es Lo Que Parece

Capítulo 13

Habían pasado dos semanas desde que escribieron la canción y la enviaron a la discográfica. En esas dos semanas solo se habían visto por un par de horas un día porque fueron a grabar las voces. Sólo habían intercambiado uno que otro mensaje para saber cómo se encontraban, pero nada mas que eso. Las cosas seguían tensas entre ambos y lo sabían perfectamente, por eso se evitaban. Aunque es cierto tambien que Flavio ya era parte de la discográfica y ya había comenzado a trabajar con varios artistas componiendo, le gustaba mucho trabajar allí aunque debió dejar la academia. Debido al hecho de tener que cuidar a su sobrina, acordó que sus horarios de trabajo debían ser por la mañana y por la tarde hasta que ella saliera de sus clases. Se lo aceptaron sin problema porque, al contratarlo, lo hicieron sabiendo lo que implicaba aunque a sabiendas que algún que otro día necesitarían que se presentara por la noche, por cuestiones de video o alguna fiesta en la que si o sí debía presentarse.  Samantha, por su parte, también estaba trabajando, 24/7, tanto en la discográfica como en la academia. Estaban produciendo algunos temas que había compuesto para su nuevo disco y eso implicaba mucho trabajo, pero estaba feliz porque todo le estaba saliendo como ella quería.  

Ese día, despues de esas dos semanas que, a pesar de tanto trabajo, se les hicieron eternas por no haberse visto, se encontraron en la discográfica. Era momento de grabar el videoclip de "Mar de dudas" tal cómo habían llamado a su canción. A pesar de sus propias dudas, cuando se vieron se dieron un abrazo, se habían echado de menos y sus cuerpos sintieron la necesidad de conectarse nuevamente. Los abrazos habían sido moneda corriente en ellos y por esa incomodidad que ellos mismos habían generado, dejaron de hacerlo. Se sintieron tan bien que se maldijeron a ellos mismos por haber sido tan tontos. Pero ninguno dijo nada, solo se preguntaron cómo estaban. 

A ambos les había fascinado la idea que les dieron para el videoclip. Primero grabarian el primer plano en el que ambos estaban sobre un escenario a oscuras, cantando con pie de micrófono, sin mirarse, solo mirando al frente. De su interpretación dependía que al escuchar la canción se te erizara la piel, y lo consiguieron. Mas de uno de los que estaba en el piso quedaron conmovidos, era una canción tan íntima y tan potente que no había manera de emocionarse. Mientras ellos cantaban se proyectaria de fondo una escena de ambos que también se grabaría en una sola toma. 

En esa escena, todo el comienzo de la canción, estarían sentados en un sillón, uno en cada extremo, molestos el uno con el otro, denotando incomodidad y mirando al piso. De vez en cuando mirarían al otro pero sin coincidir las miradas. Luego del primer coro, se acercarían y hablarían, primero de manera calmada, luego, en el momento en el que el estribillo estalla, ellos también. 

Mientras grababan la escena, sentían como si hubieran sabido lo que ocurría entre ambos, a excepción de la parte de los gritos. En el momento que los gritos cesaban, Flavio tomaba el rostro de Samantha y juntaban sus frentes, con lagrimas en sus ojos se pidieron perdón y se sentaron nuevamente. Se fundieron en un abrazo y al soltarse, en los últimos versos de la canción, se decían te quiero, tomados de la mano. Con esa imágen terminaba el video. 

Todos en el estudio los felicitaron porque a la primer toma lograron el resultado esperado. Ellos asintieron contentos pero Samantha salió corriendo, sin decir nada.  Se sintió agobiada, esa cercanía con Flavio no le había hecho bien, estaba sintiendo cosas por el y no se lo podía permitir, se había permitido ser feliz pero una voz dentro de sí le decía que no, que ella no estaba destinada a ser feliz, la hacía sentir culpable por lo que pasó. Hacía tanto tiempo que esas voces no se presentaban que se agobio demasiado. Para colmo, afuera llovía a mares

- Samantha- gritó Flavio corriendo hacia ella tratando de taparse del agua - entra que te vas a enfermar - ella no respondió, se arrodilló en plena vereda. Llorando. - Sam, ¿qué ocurre?