No hay peor cosa para una persona que sufrir de ansiedad o de inseguridad. Esa ansiedad que no te deja dormir, que te inquieta y que, en ocasiones, te lleva a esos ataques en los que sientes que el mundo se te viene encima y, lo peor, es que sientes que vas a morirte. Y la inseguridad, ¿qué persona no es insegura en este mundo? Ojalá no existiera porque a veces esa inseguridad es tan grande que no logramos siquiera llegar a querernos a nosotros mismos porque sentimos que todos los que nos rodean siempre están criticando algo nuestro. Pero no solo eso, hay algo igual de malo a los que nos lleva esta dichosa inseguridad, ver algo que solo estamos creando en nuestra mente, hacernos sentir inferiores porque pensamos que hay algo más en donde no lo hay. Estamos tan acostumbrados a ser cambiados, a ser criticados, que a veces nos cuesta subir nuestro propio autoestima y, para como de males, se critica tambien a aquella persona que tiene un autoestima alto porque se cree superior.
Samantha había sufrido de ansiedad desde pequeña, esos ataques horribles que solo la hacían pensar en lo peor. Y, por si fuera poco, la llevó a pensar por años que esa maldita ansiedad la había llevado a perder a su bebé.
Su bebé.
Aún no había logrado averiguar que había sido de la vida de ese niño o niña. Su padre le dijo que no le darían información alguna a ella pero no se daba por vencida.
Nunca lo haría y su padre tampoco.
Varios días después que le dieron el alta, un poco mejor de salud de lo que se encontraba, estuvieron hablando sobre el tema. En casa de Samantha. Ni bien salieron de la clínica lo llevó a vivir con ella al cuidado de una enfermera siempre que ella estuviera trabajando. Y cuando estaba ella en casa, aprovechaban para hablar de su madre, de la verdadera.
Mientras mas le hablaba sobre ella, más se daba cuenta que era una copia suya, incluso su padre se lo repetía. Y por fin entendía por qué nunca pudo sentirse identificada con esa mujer que la crió.
También hablaron de su bebé. Ese día que se descompuso había dado con el hogar a donde lo habían puesto en adopción. Al oír eso, Samantha comenzó a insistir para que le dijera donde era, se ya había llamado, si le darían información acerca suyo. Pero, para su mala suerte, un tiempo después que habían dado en adopción a todos los niños nacidos en ese año, el orfanato se incendió y se borraron todos los archivos, sin haber logrado hacer copias de respaldo. Ni siquiera sabían cuál era el registro que se había encargado de esos trámites.
Varios días estuvo procesando esa información, toda posible oportunidad de conocer a su hijo o hija habían desaparecido, literal, como humo. No sabía que hacer y se estaba desesperando. Esa semana estaba siendo horrible para ella, no solo en ese sentido. Debía hacer algo. Necesitaba encontrar a su hijo.
Una madre hace hasta lo imposible por sus hijos y eso se había propuesto ella. se comunicó con su AR y le habló de todo aquello. Una vez que logró sacarla de su asombro por esa idea que había tenido, llamó a la discográfica para pedir su opinión.
Aceptaron.
Ella no lo creía porque era algo que, o la ayudaría en grande, o la pondría en aprietos con su carrera. Pero decidió arriesgarse.
Para hacerlo más personal, hizo un directo en Instagram para hablar directamente con sus fans. Avisó con tiempo de anticipación y, a la hora propuesta ya se encontraba frente a la pantalla de su tableta saludando a sus fans y a los medios, porque ellos no se querrían perder aquello tan importante de lo que quería hablar.
"Buenas tardes a todos y a todas, espero que estén muy bien. Desactive los comentarios porque hoy solo quiero hablarles y contarles algo muy personal. Sé que nunca hablé en profundidad de mi vida y que mes sorprende esto pero el día de hoy necesito su ayuda y espero lo sepan entender y me puedan ayudar. Pero, por favor, quiero que se lo tomen esto en serio porque es un tema muy delicado y se que lo que voy a pedir no es exactamente de la mejor manera. Hace 10 años, cuando aún era adolescente y estaba bajo la tutela de mis padres, fui madre. Tuve un bebé. Lo cierto es que, en ese momento, me dijeron que mi bebé había muerto en mi vientre y lo hicieron nacer ya sin vida. Como se imaginarán eso fue algo que me destrozó por completo. Lo único en lo que pude aferrarme en ese momento fue en la música sin dejar de pensar en que había hecho algo que hizo que mi bebé no llegara a estar conmigo. Sin embargo, hace poco tiempo atrás, mi padre me confesó que mi bebé había nacido con vida y que mi madre lo había dado en adopción. Si, así como lo oyen. Mi hijo o hija, que ahora tendría 10 años, está vivo. Y lo estamos buscando. Recurro a ustedes porque los archivos del hogar al que lo llevaron se quemaron y no hay rastros de a donde fue. Yo solo quiero que, si ustedes saben de alguien que haya adoptado a un niño hace diez años en Alicante, me lo hagan saber. Quiero saber si mi hijo o hija está bien y es feliz y quiero tener la oportunidad de explicarle todo lo que sucedió. Eso es todo. Por favor, esto es algo muy cierto y quiero información real, no mentiras ni bromas. Fueron muchos años de pensar que mi bebé se había ido. Muchas gracias a todos. Los estaré leyendo"
Se había desnudado frente a sus seguidores, aquellos que le conocían hasta detalles de los que ella a veces ni se enteraban, y sentía un alivio tan grande. Comenzó a leer los comentarios en Twitter y le llamó mucho la atención que la mayoría admiraba su fortaleza para aparentar esa felicidad frente a cámaras siempre, de haber salido adelante a pesar de todo. Cada comentario que leía le hacía convencerse que había hecho lo correcto y estaba feliz por eso. No esperaba conseguir información tan rápido pero ya estaba ansiosa por ver si, de esa manera, encontraría a su hijo.
Ya hablamos de su ansiedad, nos falta la inseguridad. Pese a ser ella una mujer con una belleza envidiable y una carrera increíble, sus inseguridades siempre estuvieron a flor de piel, mucho más en cuestiones del corazón por decirles de alguna manera.
Esa semana había sido difícil para ella, no solo por haberse enterado de lo del hogar, sino también por la cercanía que estaba teniendo la madre de Luz con Flavio.
Ella y Luz ya se habían conocido como madre e hija y, según supo por Flavio, las cosas habían ido mejor de lo que pensaba. Luz había aceptado las disculpas de Nat pero le pidió que no la separara ni de Flavio ni de ella porque, pidiéndole perdón de por medio, quería vivir con ellos. Nat aceptó porque ya había avisado que no quería separar a su hija de sus seres queridos y, por esa razón, no intentaría formar un lazo muy estrecho con ella. Quería, por ponerle un nombre, ser algo así como su tía. Le comentó su problema con la depresión y Luz la comprendió.
Sin embargo, mas allá de no formar una relación con Luz, a quien sí se estaba acercando demasiado era a Flavio. Todos esos días o iba a verlo a su casa o le llamaba para pedirle ayuda con una u otra cosa porque no tenía dinero y Flavio le había ofrecido su ayuda en lo que necesitase. Él como siempre tan bueno, pensaba para sí.
Pero ella no era una persona celosa ni le molestaba que él la ayudara, pero los había visto el día anterior en el parque cuando el le daba un poco de cosas para cocinar, y se sintió extraña al ver como ella lo miraba y se reían juntos. Nat era una chica preciosa, lo admitía, y no parecía ser mala. Y esa inseguridad que la suele visitar ocasionalmente, hizo acto de presencia y le hizo imaginarse muchos escenarios futuros posibles. El más repetido: ellos como padre de Luz.
Sabía que estaba mal que pensara de esa manera pero no lo podía evitar y se maldecía por ello. Además estaba segura de su relación con el aunque lo echaba de menos porque, a causa de sus trabajos, no habían tenido el tiempo suficiente para verse. Después de todo lo que habían vivido, necesitaban un tiempo a solas.
Así también le ayudaría a librarse de todas esas inseguridades.
....
Holaaa!
Logré escribir un cap jaja. Espero que les haya gustado. Al final estoy tomando el camino largo, aún no sé q final tendrá, díganme que les gustaría.
Muchas gracias por todo, vi que mi fic está como numero 1 en flamantha y no entiendo por qué eso pero me pone muy contenta
En fin, hasta la próxima!!
Un beso!!
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Nada Es Lo Que Parece
FanficLas apariencias engañan, es un dicho muy popular. Podemos aparentar ser alguien que no somos y demostrar algo que no sentimos por el simple hecho de querer ahorrarnos preguntas.