letal; ns

20

Pensé por fin haberme deshecho de ese sentimiento inexplicable de irritación hacia Niall horas atrás mientras estábamos en el camino y milagrosamente, no había abierto la boca. No sabía por qué era, ni cuando llegó, solo sabía que estaba ahí y de la nada, se esfumó.

Pero entonces, lo observé con una sonrisa estúpida e innecesariamente grande, riéndose escandalosamente como si no le importaran los oídos de las personas a su alrededor. Era ensordecedor y provocaba una sensación burbujeante y caliente de mi estómago, que sabía perfectamente, era rabia.

No sabía por qué a Zayn le encantaba perder el tiempo sabiendo que él era el responsable de toda esta bola de zopencos descerebrados. Él estaba comiendo de una lata de arvejas, mientras Niall, a su lado, comía de una lata de sopa de maíz. Había atado a Walter y a Jaxon al salpicadero de una de las camionetas apenas llegaron al lugar en donde pensaban pasar la noche, un valle enorme a un lado de la autopista, lo suficientemente vacío y silencioso como para considerarse seguro para la noche.

Después, habían decidido comer algo alrededor del fuego mientras el cielo se oscurecía. Todos estaban conversando, yo no podía parar de mirar entre mi lata de conserva y Zayn. Había perdido el apetito.

Dejé la lata de lado y me levanté abruptamente.

—¿A dónde vas? —cuestionó Olivia al ver mis movimientos repentinos.

—No es asunto tuyo.

Caminé alrededor del circulo de personas hasta Zayn, pero quizá, estaba demasiado ocupado riéndose como una puta adolescente como para tan siquiera notar que estaba de pie detrás de él.

—... No lo sé, nunca he probado la cerveza —escuché a Niall decir al llegar.

—¿No? —Niall sacudió la cabeza— No te pierdes de nada, es como soda de pan.

Niall casi se ahoga con una cucharada de su sopa, mientras Zayn se unía a él con una risotada. Al menos hasta que me aclaré la garganta sonoramente. Zayn miró sobre su hombro, encontrándome detrás suyo, irguiéndome sobre ambos.

—¿Necesitas algo Harry?

—A decir verdad, sí. Dame algo que hacer, en vista de que hoy te has tomado el día libre —le eché una mirada ponzoñosa a Niall, quien continuó comiendo como si nada. Si tan solo pudiera ver cómo estába a mirándolo, no estaría comiendo tan tranquilo.

Cuando regresé la mirada a Zayn, el hijo de puta estaba sonriendo.

—Bueno, creo que hoy me apetece descansar. ¿Por qué no montas guardia esta noche? Solo ve al Jeep, enciende las luces y vigila el perímetro.

—Bien —dije sin más, a punto de darme la vuelta.

—¡Oye! ¿Por qué no llevas a Niall contigo? La noche es larga y necesitas mantenerte entretenido...

—¿Y qué va a hacer un niño ciego para mantenerme entretenido? ¡Oye! —exclamé hacia Niall— No sabía que también eras payaso.

Pude ver sus mejillas enrojeciéndose de inmediato. Zayn me miró de mala manera, y pude ver en sus ojos, un brillo malicioso destellar de la nada.

—Yo tenía en mente otra cosa. He escuchado que se la han pasado muy bien leyendo juntos mientras estabas en cama, pueden arreglárselas para pasar el rato —dijo Zayn con una sonrisa altiva. Abrí y cerré los puños, para evitar estampárselos en la cara.

Últimamente, no solo había estado demasiado irritado con Niall, sino también con Zayn. Es como si ambos se hubieran puesto de acuerdo para hacerme la vida miserable.

—Lo que sea —mascullé— ¡Apresúrate topo, no tengo toda la noche! ¡Si te pierdes por ahí no es mi problema!

• • •