LEYENDA DEL PASADO. Rengoku en DXD.

CAPÍTULO 10: UN DÍA EN EL INFRAMUNDO.

Rengoku se encontraba en el inframundo, más específicamente en la casa de la familia Gremory. Había recibido una invitación de parte de Sirzechs para reunirse con él.

Rengoku san, nos gustaría que se quedara con nosotros hoy y mañana, hay cosas que nos gustaría hablar con usted. Le dijo el Maou Lucifer.

Rengoku: Estaría encantado pero debo trabajar. Además hay varias cosas que han ocurrido que me tienen intrigado y me gustaría resolver antes que todo pueda salirse de control.

Sirzechs: No se preocupe Rengoku san, en su trabajo lo hemos cubierto, han avisado que tuvo que salir de viaje por asuntos familiares y se ausentará por un par de días. Y sobre los problemas que le afectan, quizá pueda ayudarle. dijo sonriendo.

Rengoku: No quisiera provocarle tantos problemas.

Sirzechs: En absoluto, es más. Mis padres estarán encantados de recibirlo. Por favor sígame.

Rengoku: De acuerdo, pero solo estaré un par de días, ya que hay un poco de agitación en la academia por unos visitantes inesperados.

Sirzechs: ¿Es por las chicas de la iglesia? Estoy al tanto de ello. Sona Sitri le informó a su hermana Serafall y ella a su vez me informó a mi. No se preocupe, estarán todos bien. He mandado a un grupo pequeño de soldados a vigilar la zona. Cualquier cosa que suceda nos avisaran. Ahora acompañeme por favor, quiero hablar con usted antes que mis padres quieran acaparar toda su atención.

Rengoku: De acuerdo. Lo sigo Sirzechs san.

Ambos varones iban por la casa, platicando cosas triviales de la vida. Hasta que llegaron a unas puertas enormes.

Grefya: Sirzechs sama, le he preparado todo como me ha pedido. Rengoku san, es un gusto verlo de nuevo. asintió la maid. Y a nombre mío y de mi hijo, le agradecemos que haya protegido a la señorita Rias y a toda su nobleza. De verdad muchas gracias.

Rengoku: No hay nada que agradecer, son mis estudiantes y está claro que los protegería aunque me fuera la vida en ello, mi deber es proteger a las futuras generaciones, y ellos aún tienen mucho que vivir.

Grefya: Aun así, muchas gracias Rengoku san. La maid le dio una última reverencia y se retiró.

Rengoku, correspondió a lo hecho por la peliplata.

Sirzechs: Grefya, quédate por favor es importante que tu escuches esto para que puedas hacer las diligencias correspondientes, solo pide que nos avisen cuando lleguen mis padres de casa de los Phoenix o algún mensaje de los soldados de Kuoh.

De acuerdo, Sirzechs sama. Grefya había salido a dar las indicaciones mientras Rengoku y el pelirrojo, se quedaban tomando una taza de té que había dejado la maid.

¿Y qué le pareció el departamento que le conseguimos?. Pregunto el pelirrojo.

Está muy cómodo, aunque aun sigo sin adaptarme a la cajita que saca imágenes. pero en general, me gusta la comodidad que me han brindado.

Sirzechs: En absoluto Rengoku san, lo que usted ha hecho por nuestra familia no tiene precio.

Grefya, había vuelto al estudio, y sin más Sirzechs habló.

Bien, ya que esta Grefya aquí, podemos hablar. Vera Rengoku san, he conseguido lo impensable. He logrado que los líderes de las otras dos facciones acepten una tregua total, un alto a las hostilidades, pero para que esto resulte como queremos deben aparecer las espadas Excalibur que han sido robadas de lo contrario dudo que podamos cerrar el acuerdo de manera satisfactoria. Además, hay dos líderes aparte de las tres facciones que están interesados en este acuerdo. Uno es el dios Nordico, Odín y la otra persona es la líder de los yokais de Kioto, Yasaka. Ambos son líderes excepcionales y si logramos un acuerdo de esa magnitud, creo que podremos estar en un largo y próspero periodo de paz como no se había visto en los últimos mil años.