Mi Lindo Capricho (Slenderman & Tú) #CREPYAWARDS2020

Continuación Capitulo 25

~ Flash Back ~

La lluvia por fin había sesado después de casi una semana lloviendo, la niña que comenzaba a llegar a la famosa etapa de la pubertad yacía sobre su cama abrazando sus rodillas recordando aquella melodía que en su niñez le parecía linda pero ahora llegaba a comprenderla e incluso se identifica:

"Escondida por los rincones, temerosa que alguien la vea, platicaba con los ratones... La pobre muñeca fea.

Un bracito ya se le rompió, su carita está llena de hoyitos y al sentirse olvidada lloró lagrimitas de aserrín...

Muñequita le dijo el ratón, ¡Ya no llores tontita, no tienes razón! Tus amigos no son los del mundo por qué te olvidaron en este rincón. Nosotros no somos así.

Te quiere la escoba y el recogedor, te quiere el plumero y el sacudidor, te quiere la araña y el viejo Véliz, También yo te quiero y te quiero... ¡Feliz!"

Se cantaba a si misma en la oscuridad de su habitación. De pronto su armario se abrió poco a poco, de par en par, la niña limpio sus lágrimas y sintió su corazón saltar de nervios.

- ¿Mamá? - Dijo titubeante, se acercó para apreciar que ocurría.

Tocó el piso con sus pies descalzos mientras la ropa se movía. Se pasmo de repente cuando vio salir un brazo de el, un brazo muy peculiar, poco a poco salió de el mueble una criatura desconocida, una criatura con una vestimenta anormal, con lunares de colores en un fondo negro, zaco y pantalón con un sombrero de cirquero. La niña no sabía que sentir, pero antes de que está pudiera pronunciar algún sonido la criatura hablo:

- ¡Que tal! Escuché tu llamado y vine corriendo hasta acá. - Dijo con una amigable sonrisa en su rostro. Bien podría ser algún payaso de fiesta... Con Sancos en sus pies.

- Creo que te equivocas, yo no te llamé, ni si quiera se quién eres. - La niña no sabía que hacer, tal cosa debía ser un sueño, quizás debía preguntar - ¿disculpa, eres Real?

- ¡Más real que las vitaminas y el ebrio de la esquina! - Reí descontrolado ante su chiste tan malo.

- Llamaré a la policía - Dijo la niña corriendo hacia su puerta.

- Se lo que viviste hoy, te observé, tu padre se fue de la casa una vez más y en la escuela se burlaron de ti por tu nuevo acné.

Las palabras de la criatura asombraron a la jovencita, ¿este sería uno de los cuentos de mágicos de las películas?

- Que sabes tú de mi vida, lo dices tan fácil, "Mi padre se fue con aquella mujer por quinta vez" una niña de 12 años debe consolar a su madre qué llora por horas, no se qué hacer, no se ni si quiera por qué vine al mundo, por qué traer hijos al mundo si los abandonarás, ¿por qué? Para que las personas hablen a tus espaldas y se burlen de tu situación familiar, para que los amigos que tienes te critiquen por qué eres la única que no cumple con el estereotipo.

- Lo se linda, se mucho, por eso estoy aquí. Tengo mucho que decir y que aconsejar, ¡al mal tiempo buena cara!... No te dejare sola.

- La canción que cantaba hace un momento, mi madre la cantaba antes de dormir, me parecía tierna pero ahora, ahora siento que esa canción fue hecha para mí, para está pobre muñeca fea. Ni si quiera se por que te digo todo esto, ¿eres una especie de amigo imaginario?

- Quizás - sonrió

~ Fin del flash Back ~

- Oye, calma, calma, siendo sincera yo también estoy asustada.

- Espera, espera, espera... ¿Estuviste descalza?, mírate, tienes los pies tan polvosos y con rasguños.

- Es que me fui al hospital descalza, no tuve ni tengo cabeza para pensar en mis pies.

- Ven, vamos al baño a lavar tus pies. - extendió su mano para resivir la de ella.

El sonido del agua los acompaño junto con la aún cara de sorpresa que la dama tenía, el rostro que SPLENDORMAN acostumbraba a tener, no estaba ahora.

- ¿Como fue que diste conmigo?

- Me encontraba en una de las ciudades cercanas cuando los rumores llegaron, tan pronto como lo supe corrí hacia acá y todos los rumores eran ciertos. Llegué al hospital buscando niños heridos o personas que necesitaran ayuda. Justo salía del hospital cuando te vi pasar. Haz crecido pero tus ojos son los mismos... jamás los olvidaría.

Ella sonrió apenada sin saber que responder, dejo que el momento siguiera mientras metía sus pies en una tina pequeña.

- Durante años he estado detrás de esas dichas crepypastas, cada que pasa el tiempo aparecen nuevos. Esa plaga de malditos demonios, los acabaré, los odio con todas mis fuerzas.

- En verdad te ves molesto, ¿es por algo en especial?

- Nunca te hablé de esto pero, la razón por la que me gusta ser bueno con los niños es por qué alguna vez tuve un hermano menor, alguna vez fui un niño, fui su hermano mayor - comenzó a soyosar trabando de disimular su dolor - mi hermano tenía problemas pero jamás lo quise escuchar. Él desapareció, no se nada de él desde hace muchos muchos años... Estoy seguro de que las crepypastas tienen algo que ver en todo esto, esas malditas sabandijas. Encontraré a mi hermano ya sea vivo o muerto, no sin antes hacer que paguen.