Mi Lindo Capricho (Slenderman & Tú) #CREPYAWARDS2020

Capitulo 19 parte 2

ATENCIÓN este capítulo puede contener escenas subidas de tono.

Puse una canción que creo le va bien al ambiente de los protagonistas. Espero lo disfruten.

El sonido del broche siendo retirado resonó por toda la habitación. Poco a poco fui retirando su bra, y ahí estaba esa deliciosa vista de nuevo, pero esta vez estaba totalmente a mi alcancé.

— Estas bien Slender?

Pase saliva antes de responder a su pregunta.

— Claro es solo que...

— ¿Que?...

— Nunca había estado tan cerca de una Chica.

Ella no dijo palabra alguna. Se recostó nuevamente temblando de frío, mis pensamientos eran un mar de sentimientos, me levanté poco a poco ya que está situación me incomodaba más de lo debido, no podía disfrutarlo.

Mientras retrocedía me tope con su tocador haciendo temblar las cosas que en el había. No pude evitar mirar al espejo y en mi mente reino el pánico, La triste realidad me trajo nuevamente los pies a la tierra, por primera vez en mucho tiempo volví a ver mi esbelto y extraño cuerpo en el espejo, mi silueta era temible, horrorosa.

Mi rostro era una desgracia, estaba horrorizado por lo que se presentaba en el frente, estaba loco si pensaba que realmente ________ me amaba. Daba asco.

— Quítare tu pantalon, ¿esta bien?

Me apresure para terminar con esto de una vez por todas, en que diablos estaba pensando cuando decidí raptarla, cuando decidí que me hiciera compañía, ¿como sería una relación entre ella y yo? Por dios que estúpido fui al pensar que podían pasar las cosas como si fuese yo un ser vivo normal. ¿Que podía yo ofrecerle a la chica?

— _____________.

— Si Slender — Contesto un poco más aliviada.

— Yo...

— Tu?

— Yo... Yo... Iré a dejar tu ropa al cuarto de lavado.

Note que mi respuesta no era la que esperaba pero ¿que podía hacer?

Baje hasta el cuarto de lavado y puse la ropa sobre el cesto.volvi a la habitación pero algo llamo mi atención.

¿Rosas? un ramo de rosas descansaba sobre la mesa, pronto sentí como mi cuerpo se encendió, sentía rabia, una irá frenética incontrolable. Destrose con mis manos las malditas flores y sentí mi cuerpo hervir de irá. Descubrí que le tenía enviada, sí, al estúpido de Alexander, el podía hacer con toda libertad lo que yo no, podía cortejar a _________ a su antojo y jamás sería juzgado por su apariencia, no tiene que lidiar con ser un Monstruo toda su vida, quizás a ________ Le gusté o llegué a gustarle después de todo.

— ¿Quien te regalo Rosas? — la sujete de los hombros con tal violencia que hace no mucho llegué a usar con ella, pude escuchar un quejido debido a la fuerza que llegue a ejercer.

— ¡Calma! — Dijo mientras trataba de entender que pasaba — Me estás lastimando, ¡por favor basta!

Ella aceptaba regalos de ese maldito, su rostro debía agradarle, en cambio el mío, el mío debía darle repulsión.

— Eres una mentirosa, tú no me amas — deje su cuerpo en la cama con la misma violencia con que la tomé.

Ella podía verse completamente confundida, pero ya no más, no seguiría este juego maldito, no jugaría más a ser un ser humano, no jugaría más a la casita, lo mejor sería irme para siempre. Mi cuerpo estaba preparado para lanzarse por el ventanal pero ella me detuvo en seco tomándome por una de mis delgadas muñecas.