CAPÍTULO 35: MISAKI CUMPLE LA PROMESA A SU PADRE

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Amanece después de un día de verdades y sufrimiento, Kenji apenas durmió, se levanta a las siete, se viste y sale para la clínica a saber de la salud de los cuatro muchachos que su hijo uso como conejillos de indias. Al llegar pasa directo a la unidad de cuidados intensivos para que le den información de Ryuichi, el Dr. encargado del área le indica que está estable pero sigue en coma, Kenji se queda un momento viendo a su nieto y recordando todo lo que Eiji ha hecho y las lágrimas caen solas por su mejilla.

En silencio y con una tristeza amarga se dirige a la habitación de Feilong, lo encuentra dormido, se sienta a su lado y comienza a pedirle perdón en voz baja, se siente responsable por las acciones de su hijo. Sale de la habitación para visitar a Mikhail y Kirishima que se encontraban también dormidos. Es poco lo que puede hacer por los muchachos, da indicaciones para que reciban la mejor atención y se va de la clínica. Pide al secretario que lo lleve a ver a su hijo Eiji a la estación de policía.

Kenji pide hablar con su hijo, que se encuentra detenido en la estación en espera de su traslado a la cárcel.

Kenji: hijo ¿Cómo te encuentras?

Eiji: que descaro, preguntar eso siendo tú el que me puso en esta situación

Kenji: ah hijo mío, fuiste tú mismo el que decidió hacer las cosas mal

Eiji: no hice nada malo

Kenji: dime algo, el dinero del que disponías era muy poco, ¿Cuánto querías tener?

Eiji: el dinero nunca es suficiente

Kenji: suficiente ¿para qué?

Eiji: para ser el más rico y poderoso del mundo

Kenji: ¿Qué ganas con ser el más rico y poderoso del mundo?

Eiji: satisfacción

Kenji: hijo, no te entiendo, sacrificas a tu propio hijo por satisfacción

Eiji: mi hijo está bien, es fuerte

Kenji: Ryuichi está en coma con pronóstico reservado, Feilong esta embarazado con riesgo de abortar, Mikhail y Kirishima están hospitalizados en proceso de desintoxicación

Eiji: mientes, ellos están bien

Kenji: Ryuichi ese día tuvo un infarto, tú con tus exigencias hacia él solo lo dañaste, nunca le demostraste afecto, le impediste hacer lo que él quería y lo llevaste a la desesperación. La cantidad de alcohol que consumía diariamente era suficiente para haberlo matado hace mucho tiempo, todavía crees que estaba bien

Eiji: no, eso no puede ser

Kenji: aquí te dejo el informe médico de los cuatro muchachos que usaste como conejillos de indias para tus fines de lucro, hijo si no sabes en qué te equivocaste no podrás redimir tus errores

Eiji: Ryuichi, va a estar bien

Kenji: solo Dios sabe hijo, nos vemos, te ayudaré en lo que pueda, pero tus crímenes no son sencillos

Eiji: gracias papá

Kenji sale de la cárcel con pesadumbre y dolor, su hijo querido se fue por el mal camino y ni cuenta se dio, fue un padre amoroso y pensó que tenía la confianza de su hijo para que le contará sus dudas, miedos pero él no lo llego a conocer a fondo, solo le mostro una faceta.

En la mañana Misaki desayuno con su familia, se veía triste y estaba cabizbajo, todos los animaban y él hacia el esfuerzo por sonreír para no preocuparlos. Su papá le pidió hablar en el estudio.

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