❝Haikyuu!!🏐 || One-shot's❞

Akaashi Keiji

La chica se lanzó al mar entusiasmada, no podía seguir esperando la hora en la cual su novio la había citado. Sintió como al contacto del agua sus piernas se juntaban y formaban su cola de sirena, una cuantas escamas aparecieron en su rostro y brazos, el color de sus ojos cambió a uno de color casi de fantasía, regresando a su forma original de sirena.

Nadó lo más rápido posible hacia la ubicación en la cual por primera vez por un accidente conoció a Keiji, el chico terrestre del cual se enamoró.

Al llegar no había nadie, se confundió ya que, Keiji era estricto consigo mismo sobre el tiempo de llegada a sus citas, siempre llegaba casi diez o veinte minutos antes, incluso más. No le prestó atención a ese mínimo detalle, debió de retrasarse debido a su trabajo, la emoción la llenaba, no podía enojarse.

Sin embargo, las horas pasaban, la noche cayó y no había rastro de su querido novio, nadó de un lado a otro buscándolo, alguna señal del porqué no había aparecido, sin respuesta alguna. Salió del océano decepcionada y dolida, su corazón frágil como el cristal se sentía herido, pero quería creer que fue porque su trabajo lo atrapó y quiso llamarla pero ella tenía su teléfono en su auto, aunque al momento de tomar su celular este no tenía ninguna llamada por parte del azabache, en cambio tenía varias llamadas de Bokuto y varios mensajes de Udai Tenma, el mangaka con el cual trabajaba su novio  y gracias a este se conocieron llegando a formar una amistad. Al llamar primero al bicolor este le gritó preguntando por Akaashi.

"—Él dijo que no vendría porque iría contigo a pedirte matri---"

La voz del mayor fue cortada y pudo escuchar una pequeña pelea, oyendo así las voces de Sakusa y Atsumu reprendiendo a su compañero de equipo.

"—____-chan, olvida lo que dijo el búho, ¿Kei-kun está contigo? —Atsumu quien había tomado el teléfono ajeno habló sereno, escondiendo el nerviosismo."

—Nunca llegó al lugar que acordamos...—respondió con la voz un poco quebrada. El silencio por ambas partes se sintió eterno, el rubio no sabía que decir pues incluso el ruidoso de Bokuto se había quedado callado ante la revelación de la menor— ¡T-tal vez se le hizo tarde en el trabajo!, ¡Llamaré a Tenma-san para preguntarle!

Nuevamente hubo un silencio pero este duró poco ya que Sakusa lo interrumpió.

—Lo llamamos también.—informó— Él nos dijo que iría contigo.

—¿Qué?

—Él nos dijo que iría contigo y qué quería hacer, pero hace horas que no sabemos de ustedes y por eso llamamos.

—No puede ser...Keiji, él...él no me dejaría plantada, debe ser un error.—murmuró, queriendo convencerse a si misma de sus palabras. Pero aún con ello, sus lágrimas caían por sus mejillas— ¡Voy a buscarlo, su auto no debe estar lejos! ¡Si vino, debe estar cerca, quizás me hizo una broma!

—____-chan...

—¡Adiós, los llamo luego!

Aunque dijo eso, no los contactó por mucho tiempo, había buscado a Keiji por todos los lados posibles, incluso en la casa de sus padres pero ni ellos lo habían visto, al parecer todos sabían lo que el de mirada azulada deseaba hacer pero ninguno se explicaba su desaparición, el corazón de ____ se quebraba con cada negativa que recibía al preguntar por su amado, así hasta pasar un año.

[...]

—¡Hey! ¡____!

Una de sus amigas —que al igual que ella era sirena— le habló con una sonrisa despreocupada igual a su actitud, su mirada que hace nada estaba perdida se fijó en ella. La rubia sonrió al ver que pudo captar la atención de su preciada amiga que seguía con el dolor en su pecho a pesar del tiempo.