Capítulo 12
Los momentos perfectos no duran mucho tiempo, es injusto saber que entre más especial el momento, menos tiempo podrás vivirlo, desgraciadamente las cosas que más nos gustas, son las que más rápido se acaban y es algo con lo que tenemos que aprender a vivir.
La canción se acabó, él y yo seguíamos riendo bajo el agua de los aspersores aun sin separarnos, sin embargo, alguien detrás de nosotros carraspeo la garganta provocando que Nick volteara a ver; en el umbral de la puerta se encontraba un señor de edad, mirándonos fijamente con el ceño fruncido.
— ¿interrumpo? – comento lo más serio posible.
— Mierda – dijo Nick por lo bajo – Nonno, por favor – esta vez se soltó de mi y dio unos pasos hacia el señor
— Abajo – dijo el señor, Nick no dijo nada más y me tomo de la mano llevándome escaleras abajo. Al llegar Aaron se acercó a nosotros, mientras Nick lo miraba de mala manera
— Lo siento chicos, el Nonno no me dio tiempo de avisar
— Déjalo – comento Nick algo molesto y camino hacia el mostrador, yo puse mi mano en el hombro Aaron y le sonreí dulcemente, el solo me miro con arrepentimiento, segundos después, el señor, bajo las escaleras y camino hacia la salida, pero antes de irse se volteó hacia nosotros.
— La tua ragazza, ven conmigo – dijo señalándome
— Nonno per favore non farlo non stavano facendo niente di male (Abuelo, por favor no lo hagas, no estaban haciendo nada malo) – comento Aaron en italiano
— silenzio! non sto parlando con te (¡silencio! No estoy hablando con usted) – grito el señor y Aaron se calló de inmediato – parliamo – me extendió su mano
— Nonno... – iba a protestar Nick, pero el señor lo callo de inmediato
— Fammi parlare con lei o porterai l'abbonamento per un mese (Déjame hablar con ella o traerás el abono para un mes) – no entendí ni la mitad de lo que dijo, pero Nick no protesto después de eso, el señor se acercó a mí y volvió a extenderme su mano, un poco tímidas la tome y salimos del lugar — Andiamo a prendere un gelato? – yo lo mire confundida — mi dispiace, vamos a comer un helado – dijo con un ascenso demasiado italiano, yo sonreí y asentí.
Sin decir nada más, fuimos al parque en el centro del pueblo, nos acercamos a un señor que vendía helados y el Nonno pidió dos de chocolate, luego se acercó a mí y me ofreció uno.
— ¿no te gusta el chocolate? – pregunto confundido al ver que no recibía el helado
— Si, me encanta
— ¿entonces? – pregunto confundido, yo tomé el helado y le sonreí
— Pensé que me regañaría o algo por el estilo – dije sincera dándole un lambetazo al helado, el señor volteo a verme y me sonrió
— ¿Cuál es tu nombre?
— Polly – dije tímida
— io sono Franco, un gusto – estrechamos manos – no te voy a regañar, solo quería darle un susto a Nickolas, rompió mis reglas – lambio su helado – te ves decente
— lamento mucho si lo molestamos, pero por favor no le haga nada a él – Franco sonrió ante mi cometario
— Ragazza calma, tenerte aquí es suficiente castigo, eso le asusta
— ¿Por qué lo asustaría?
— Le gustas y no quiere que el Nonno te aleje de él – reí ante su comentario mientras nos sentábamos en una banca del parque
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Hola, Blanca ✔️(completá)
Novela JuvenilTodas la vidas son imprecisas e imperfectas, todos somos regidos por nuestro pasado presente y por los pensamientos de lo que será nuestro futuro. somo seres hechos de pequeños fragmentos de lo que nos dejan las personas que conocemos, de nuestras c...