Capitulo 16: Simples espectadoras

1.2K 79 3
                                    

...Y Jade lo supo, ya no había nada más por decir, sólo queda hacer. Tomo el rostro de Tori y la besó. La besó como si no hubiera otro día para hacerlo, como si de ese beso dependieran millones y millones de vida, como si fuera la última posibilidad de ser feliz. Tori no se había quedado atrás, apenas sintió el contacto de los labios de Jade con los suyos se entregó al beso como si los labios de la pelinegra escondieran el secreto mejor guardado. Tori supo que ese era el lugar donde quería pasar el resto de su vida, besando a Jadelyn West. Cuando algo tan esencial para vivir como el aire, pero que tan poco le importaba a ellas dos en ese momento, fue necesario, se separaron.

-Guauuu – fue lo que alcanzó a murmuran Jade apenas abrió sus ojos – eso fue fue...Increíble – la pelinegra buscó los ojos de la castaña pero los encontró aun cerrados – Vega abre los ojos por favor – pidió Jade acariciando su rostro.

-No quiero abrirlos – dijo simplemente la castaña. Jade sonrió

-Tori, vamos, abre los ojos – insistió y volvió a acariciar el rostro de la deportista.

-No, si los abro me voy a despertar del sueño y seguramente te has ido o alguien viene a interrumpirnos o aparece tu novia...

-Ex novia – corrigió Jade siguiéndole el juego.

-Bueno o aparece tu ex novia o te enojas conmigo por algo. Asique pienso quedarme con los ojos bien cerrados para seguir soñándote – Finalizó Tori y apretó aun más sus ojos. Jade se acerco despacio a su boca y agarró entre sus dientes el labio inferior de Tori, mordiéndolo un poco.

-Auchhh eso dolio – se quejo un poco en broma la deportista.

-¿Te dolió? – pregunta Jade y la castaña asiente aun con los ojos cerrados - ¿ves? Es como si te hubiera pellizcado. No es un sueño. Tú y yo estamos aquí, en mi terraza. Solas – murmuró la pelinegra –Así que, ¿me quiere hacer el favor señorita de dejarme ver sus hermosos ojos que tanto me gustan? – Jade alzó sus manos y suavemente acarició cada parpado de la castaña. Y así fue, Tori obedeció, abrió sus ojos y se encontró con un par de ojos azules mirándola intensamente

Eres tu – dijo Tori – eres real – afirmaba mientras con sus mano derecha iba recorriendo el rostro de la fotógrafa que sólo se quedó disfrutando del roce – Ese beso fue el más perfecto de mi vida – Jade sonrió – es más si hubiera un concurso de besos lo tendrían que descalificar por ser demasiado perfecto – esta vez las dos sonrieron.

-Tori

Jade – dijeron las dos al mismo tiempo - Dígame su majestad – dijo la castaña tomándole la mano y besándola. Jade le dio un pequeño golpe por el apodo a la jugadora y tardo en hablar

–Tori yo, yo pensé que te habías ido con la modelo hueca y... - La castaña sacudió la cabeza

No me fui a ningún lado, es decir, si me fui pero no me fui con ella ni con nadie. Me fui a caminar, quería pensar y bueno cuando llegue al auto vi esto – fue hasta el sillón y agarró paquete muy bien envuelto - y no quería dejar de dártelo - La pelinegra tomó el paquete y volvió a mirar a Tori

-No deberías haberlo hecho – le dijo

-¿Qué cosa? ¿Volver o el regalo? – preguntó bromeando la castaña, sabía que Jade se refería al regalo

-El regalo listilla. No tenías porque regalarme nada - decía mientras abría el paquete – Además... ¡Dios mío!... Tori... esto es, es... hermoso – Jade sostenía sobre sus manos una cadena de plata con un dije de rubi – y muy, muy caro... no puedo aceptarlo – lo puso de nuevo en la fina caja que venía y lo alejó de ella.

Cuando, donde y como el amor quiera (Jori adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora