Casa West – Domingo en la mañana
-Este dedito se merece un beso – Tori estaba sentada en la cama de Jade apoyada contra el respaldo y tenía a su novia entre sus piernas descansando su espalda sobre el pecho de la castaña, que a su vez se entretenía jugando con sus manos – este otro dedito también – decía mientras besaba cada uno de los dedos de la pelinegra – Y a este chiquito le damos un beso sólo para que no se ponga celoso de los otros – beso el dedo meñique.
-¿Y estos? – Jade alzaba su otra mano – si no los besas también se va a poner celosos – advertía – Y si mal no recuerdo, a esta mano tienes mucho que agradecerle – le recordó las maniobras realizadas en la noche.
-Mmm - Tori pensaba - ¿Puedo besar todas las partes de tu cuerpo que se lo merezcan? – pregunto dejando un pequeño beso en la mano que su novia había levantado, para después agarrar a su chica por la cintura, levantarla un poco y apretarla aun más a ella de manera que los pechos de Tori rozaban sutilmente la suave y blanca espalda de la artista – Hasta anoche pesaba que sabía lo que era estar con una mujer... – beso el cuello de su novia – Hasta anoche pensaba que sabía lo que era el placer... - poco a poco sus manos dejaban la cintura de su chica y empezaban a subir, tenían un destino específico – Tu cambiaste eso... - Tori frenó el recorrido de sus manos justo debajo de los pechos de Jade, necesitaba que fuera un movimiento coordinado – Tu... Anoche... me hiciste conocer el cielo... - ahora si, al mismo tiempo que su boca atrapaba el lóbulo de una de las orejas de Jade, sus manos apretaron fuerte pero delicadamente los pechos de su novia.
-Tori... mmm... bebe... - Jade sabía que si la castaña insistía su cuerpo iba a ceder, pero realmente no iba a aguantar otra ronda. Su novia era insaciable.
-Te amo – le dijo la castaña en el oído suavemente mientras con sus dedos atrapaba los pezones sensibles de sus pechos – Te amo y quiero hacerte el amor mil veces más para demostrártelo – esta vez volvió a agarrar los dos pechos de su novia tratando de abarcarlos con todas sus manos.
-Tormmm... ca...cariño... no es que... Dios...mmm – la fotógrafa trataba de detenerlos pero sus gemidos escapaban de su boca prácticamente.
-Si tu idea de detenerme es hacer esos ruidos, no vas por buen camino, me pones más loca aun – le informó mientras su mano derecha dejaba uno de sus lugares preferidos para empezar a bajar hasta el otro. Jade sabía que no iba a tener muchas fuerzas para detener a "la bestia", de hecho la castaña había ganado el juego cada vez que lo puso en práctica. Pero para alivio de la fotógrafa y para desgracia de la deportista empezó a sonar celular de la primera
–Tori... tengo que atender – trató de moverse pero los brazos y piernas de la castaña la frenaron – Vamos bebe... déjame atender – pidió suavemente
-No quiero – se negó la jugadora – Necesito tocarte – parece que ocho horas no le fueron suficientes.
-Podría ser Emma – la pelinegra tuvo que sacar su carta más fuerte.
-Ooooo... no se vale – se quejó Tori soltando a su novia para después dejarse caer en el colchón y taparse la cara con la almohada. Jade sonrío y acarició el estómago marcado de su chica para calmarla
–Te pareces a Beth cuando le niego su chocolate – le dijo mientras agarraba su celular – ¡Alo! – contesto aun riendo de como Tori murmuraba algo así como "tú eres mejor que el chocolate" debajo de la almohada.
-Jadelyn West tienes exactamente diez minutos para venir a buscar a tu hija, juro por Dios que si tengo que desayunar viendo al rencho ese...
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Cuando, donde y como el amor quiera (Jori adaptación)
FanficVictoria Vega, es una aclamada jugadora de básquet en Londres hasta que es elegida para jugar en la WNBA, con un pasado negro y su fama de mujeriega irrumpe en New york sin saber que un encontronazo con una pelinegra, mandona, idiota le va a cambiar...