Soñaba contigo antes de conocerte. (Amor entre chicas)

Durmiendo con la tentación

Las chicas llegaron a la casa de Katherine. Eran las 8:00 pm, aún era temprano. Decidieron ver una película de comedia en la que salía Adam Sandler.

-¿No tienes palomitas? -Preguntó confiadamente Candy.

-No, de hecho no. -Contestó bobamente Katherine. -Pero si quieres puedo ir a traer, hay una pulpería al frente de esta casa, ponle pausa a la película y ponte cómoda.

-Ya lo estoy Kath -Dijo entre risas Candy. -¡Apresúrate!

-¡OK, no vayas a pegarme mamá! -Exclamó Katherine con jocosidad.

-Pues anda rápido si no quieres que lo haga y no te detengas a hablar con nadie- Advirtió Candy mientras le sacaba la lengua aniñadamente.

Katherine salió entre risas.

Al volver, Katherine escuchó a Candy hablando con alguien, lo cual la extraño mucho, ya que su padre no llegaría hasta las 10:00 pm y su madre evidentemente no llegaría ya que estaba en otra ciudad por asuntos de trabajo.

Pronto se dio cuenta. Su hermana Megan había llegado desde New York.

-Hermanita mía, ¿me has extrañado?- Preguntó Megan con un tono lleno de ironía.

-Pues ciertamente no mucho, Megan. Pero que bueno que estés en casa, ¿qué tal estuvo New York City?

-Exquisito. No tienes idea, Katherine. Nueva York es una ciudad fantástica, ¡todo es tan moderno, rápido y las tiendas tienen ropa tan a la moda! -Decía Megan presumiendo con un tono lleno de arrogancia. -Es una verdadera lástima que no hayas querido ir conmigo hermanita.

-No es necesario tu sarcasmo Megan. Las dos sabemos que si no fui, no fue por falsa de entusiasmo ni deseo. Fue por tu culpa.

-Vamos hermanita, no peleemos delante de tu amiguita, Candy es una niña muy distinguida, sabes, creo que hasta ahora, es la única de tus amigas que es de mi agrado.

Candy sonrió tímidamente.

-Oh, sí, Candy es muy simpática y buena persona, por lo tanto no debería hablarte mucho, ya que tú no lo eres. -Exclamó Katherine ardiendo en celos.

Candy interrumpió:

-¡Katherine! No seas tan grosera. Al menos no conmigo aquí.

-Está bien Candy, como quieras. Es más, invita a Megan a ver la película con nosotras.

-¿Porque no me invitas tú, hermanita? -Interrumpió Megan.

-Vale, hermana mayor, quédate, tenemos palomitas, refrescos y una divertida película con Adam Sandler.

-¡Oh, sabes cuánto amo a Adan Sandler! Temo que aunque no me hubiesen invitado, me habría quedado con ustedes. -Estableció Megan.

Katherine estaba furiosa.