¿Por qué no puedes amarme a mí?

Capítulo 3

Si esto era un sueño, que por favor nadie lo despierte. Canadá temblaba de emoción al sentir a México tan cercano a él, hablándole de sus aventuras con sus hermanos, riendo, bromeando y disfrutando de la compañía del otro. Dentro de su cabeza esta sería la primera cita que le contaría a sus hijos, algo así como "Y fue ese día que la historia de amor de tu papi y mía comenzó" No podía evitar sonreír al imaginárselo.

Es cierto que al inicio los silencios incómodos de su parte eran constantes, pero eso no desanimó en ningún momento al mexicano, quien, decidido a pasar tiempo con él, tomó las riendas de la conversación.

Sus tartamudeos seguían atormentándolo, pero la paciencia que le tenía su enamorado le hacía sentir con más confianza.

En algún momento de la conversación la dueña del lugar les regaló una canasta de galletas, ambos countrys acercaron sus manos a la canasta con la intención de tomar una. Fue a penas un ligero roce de pieles, un leve acercamiento entre sus dedos, lo que hizo que Canadá se atreviera a mirar esos ojos color marrón que hacían que su sangre se acumulara en sus mejillas.-Oh, lo siento- Se disculpó el mexicano - ¿Gustas? - Le acercó con amabilidad la canasta de galletas, sonriéndole tranquilo. Para México, Canadá era como un niño asustadizo y adorable; tenía un instinto protector con él desde que se conocieron, pero nunca se atrevió a verlo más allá de una amistad muy tierna. Por el contrario, Canadá sintió su corazón acelerarse al ver a su crush ofrecerle un postre. No respondió, solo tomó una de las galletas, apartó rápidamente la mirada y le dio una mordida.

México rio por lo bajo por la acción del canadiense, su mano estaba por colocarse sobre su cabeza para darle una caricia amistosa, haciendo que Canadá sonriera y cerrara los ojos, en espera del dulce contacto.

-CANADA, ARE YOU HERE? – Preguntó un agitado y algo mojado USA, seguido de Australia y Nueva Zelanda. Ahora, para la familia Anglo parlante, Canadá era como el bebé de la familia, aunque sea el segundo mayor... Entonces, la escena de un Canadá hecho bolita en su asiento, con los ojos cerrados, un México con la mano alzada en su dirección y aspecto "amenazante" ... No era la mejor combinación -WHAT THE HELL ARE YOU DOING MEXICO?¡-

USA se acercó a pasos pesados al mexicano, mientras los gemelos se apresuraron a inspeccionar que Can no estuviera herido.

-Wey en primera bájale de huevos, segunda, no estábamos haciendo nada, solo hablábamos-

-Bro please...- Dijo como pudo el canadiense, pues Nueva Zelanda presionaba sus cachetes mientras revisaba su rostro.

-If you did something to my little bro, you'll pay it!-

-Oh que la chingada, que no le hice nada- Ambos Norte americanos continuaron discutiendo por un rato, hasta que México, harto del estadounidense prefirió retirarse. Pero USA no lo dejaría irse sin una advertencia.

-I'm warning you México. Si vuelvo a verte cerca de mi hermanito voy a...-

- ¿Vas a qué? – Retó el mexicano -Te recuerdo que además de tu hermano, es mi amigo ¡Además no manches USA! ¿Qué le voy a hacer a Cany? Si bien sabes que también es como mi hermanito...-

Hermanito... Hermanito... Esa palabra perforó profundo en la mente del canadiense. Así que es así como lo ve... ¡¿Así es como todo el maldito mundo lo ve?! ¿NADIE EN ESTE ASQUEROSO PLANETA LO TOMA EN SERIO?

Sin quererlo, Canadá comenzó a derramar lágrimas preocupando a todos a su alrededor.

-¡CANY! ¿QUÉ PASA? ¿QUÉ TIENES? -

-DOES IT HURT?!-

-DO YOU FEEL DEEZEE? –

-WHAT IS IT?!-

-Solo...- Su voz salía débil y entrecortada -Solo...- Pero no aguantaba más -SOLO DÉJENME EN PAZ ¿ES MUY DIFÍCIL DE ENTENDER? NO SOY UN NIÑO... JE NE SUIS PAS UN ENFANT... I'M NOT A CHILD... ¿EN QUÉ IDIOMA TENGO QUE DECÍRCELOS PARA QUE ENTIENDAN? –

Canadá salió corriendo del lugar, entre lágrimas y maldiciones. Sus hermanos corrieron detrás de él. Solo México se quedó petrificado en su lugar, nunca había visto a Canadá tan enojado, de hecho, nuca lo había visto enojado. De alguna manera le dolió mucho ver esas lágrimas caer sobre sus rosadas mejillas ¿Habrá sido algo que dijo? ¿Será que se estresó por estar discutiendo con USA?

México se dejó caer sobre la silla, tenía que pensar en cómo arreglar las cosas con el canadiense. Miró de reojo la mesa, Canadá había dejado su libro y las galletas. Lo tomó con la intención de guardarlo para devolvérselo luego, pero un lápiz calló de él, con su pulgar guardó la página mientras lo levantaba. Al querer ponerlo de nuevo entre las hojas, se percató de que los bordes de las hojas tenían pequeñas anotaciones. La curiosidad movió sus acciones y las leyó.

"I love you Méx" "C + M = <3" "This poem is for Méx" "Je t'aime mon Mexique"-Canadá... ¿Gusta de mi? -