¿Por qué no puedes amarme a mí?

Capitulo 28

-D'accord...- Canadá tomo a México de los hombros y lo alejó un poco, ya que el alemán no soltaba su mano pero tampoco lo veía.

-Ah-ah ¡Me tengo que ir! Un placer verlos ¡Con tu permiso México!- Alemania se apresuró a la salida por dónde Chile se había ido volteando a todas direcciones en su búsqueda.

-Eso fue...-

-Curieuse- completó el canadiense la frase de México.

-¡México!- Saludó Guatemala abrazando al contrario, seguido del Salvador, Belice y Honduras. Mientras ellos conversaban con el mexicano y se ponían al día con los detalles de la feria, Haití se acercó al canadiense y ambos comenzaron una conversación en francés.

-Entonces es oficial, tu y México- Canadá se sonrojó enormemente pero alcanzo a asentir -Me alegro mucho por ambos, lamento que hayamos interrumpido su cita-

-Oh no, nosotros realmente vinimos a verlos a todos ustedes-

-¿Más tarde van a salir juntos?-

-Bueno, no hemos pensado en eso, él ha tenido mucho trabajo ultimamente y no me gustaría interferir en sus deberes- Haití lo miró dudosa.

-Espera un segundo ¿Han tenido alguna cita durante este periodo que llevan siendo pareja?- Canadá desvió la mirada, no se había puesto a pensar en ello pero, realmente no habían tenido ocasión de reunirse propiamente como pareja.

-En realidad, creo que no- Haití le dió un zape en la nuca y Canadá se quejó.

-¿Y te haces llamar el hijo de Francia?- Canadá se encogió en hombros, no estaba a acostumbrado a que ninguno de sus hermanos o medios hermanos lo regañara -¿Qué es lo que te sucede?-

-NO QUIERO DISTRAERLO- gritó bajito.

-Canadá, eres una de las personas más gentiles que haya conocido nunca ¡Pero a veces de verdad llegas a un extremo que me saca de quicio!-

-Pe-pe-pero su trabajo es importante-

-Tu también- Le interrumpió la haitiana -Estar en una relación es un compromiso que requiere de dos personas, AMBOS deben cargar con las responsabilidades y beneficios-

-Es que yo... Realmente quiero ser distinto al resto-

-¡Pues enseñale que eres distinto! ¿Cómo va a ver tu carita toda tierna si siempre estás detrás de él? Ya estás a su lado, haz que se de cuenta- Haití empujó ligeramente al canadiense para que se sumara a la conversación de México con los centro americanos. Canadá volteo más de una vez con duda pero Haití lo miraba con una cara de insistencia difícil de negar. México lo vió de reojo y decidió terminar su conversación para acercarse al canadiense.

-¿Qué pasó amor? ¿Tienes hambre ya? ¿Te cansaste?-

-Ahhh yooo...- Canadá comenzó a pensar, sería la invitación a su primera cita, su primera cita con la persona de la que ha estado enamorado durante siglos ¡SU PRIMERA CITA CON MEXICO! Debía ser algo mágico, algo que podría describir con los poemas que tanto ama leer... Necesitaba más tiempo -Solo quería saber si puedo tomar tu mano- No era su mejor excusa, pero era parcialmente cierto.

-Awww claro mi vida, ven acompañame a ver al resto, luego podemos comer juntos-

-Su-sure...-

-STOP THERE MEXICO!- gritó USA desde el otro lado del lobby -Necesito hablar con mi hermano- Dijo acercandose a ambos.

-Oh merde...- Dijo Canadá para sus adentros.

Mientras tanto, Alemania se encontraba caminando por las calles de la CDMX tratando de pasar desapercibido... Tanto como su 1.80 de altura, piel blanca, ojos verdes y cabello rubio se lo permitieran. En general, solo le importaba que Chile no lo viera siguiendolo. Si gente, lo esta siguiendo, no importa cuanto quiera negarlo.