~ Vigésimo Noveno

200 40 87
                                    

Una semana después, recibieron una llamada importante. Hyunwoo atendió el teléfono de su pareja, quien seguía en el piso de arriba terminando de bañar al pequeño, para encontrarse con la cálida voz de su abogada.

— Oh, buenas noches Hyunwoo… Me sorprendió un poco no dar con Hyungwon, ¿ Cómo estás hoy? — Yeojoo sonaba simpática, como siempre, pero con un ligero timbre de emoción en la voz que desconcertó un poco al moreno.

Pues, bien… Terminando de hacer la cena, ¿Ya has cenado, Yeojoo?

Mientras mantenía una cordial conversación con la pelinegra, vio de soslayo a Hyungwon bajando las escaleras con el infante en brazos, sus bucles húmedos y adorables adornando su pequeño y sonriente rostro. El moreno les sonrió de regreso y, con algunos movimientos de manos, le explicó al contrario quien estaba del otro lado de la linea.

— Ya que Hyungwon ha regresado, ¿Qué tal si me pones en altavoz? Necesito contarles algo a ambos. — Propuso la pelinegra, entonces.

Con cierta extrañeza por el repentino pedido, el mayor hizo lo que ella le pidió, mientras Hyungwon dejaba al bebé en su sillita, ya estando todos en la cocina, y sostenía él mismo su teléfono.

Adelante, entonces — La incentivó el castaño, tomando asiento en la isla, al lado de su pareja.

— Muy bien — Ella se aclaró la garganta, estirando la insoportable espera, y entonces, lo soltó — Solo quería contarles que el lunes pueden pasar por mi oficina para firmar los papeles de adopción, nuevos papis oficiales de Jooheonie.

Se escuchó un jadeo, seguido de un golpe sordo y un breve silencio en la línea que hizo sonreír a Yeojoo, quien se había imaginado que tendrían exactamente esa reacción cuando recibió la llamada de confirmación esa misma tarde. La conversación siguiente fue precipitada y caótica.

¡¿Yeojoo, lo dices en serio?!

Ay, cariño… No llores así que asustarás al pequeño.

Perdón, yo… es que…

Ya, ven aquí…

— ¿Nunu? ¿Poque wonnie lloda?

Wonnie, está muy feliz cariño, solo eso...

Yeojoo amplió su sonrisa al escucharles consolarse y alentarse mutuamente, mientras Jooheon preguntaba que pasaba en el fondo y la risita nerviosa del mayor resonaba de fondo. Si, ellos estaban destinados a convertirse en una bella familia. Le alegraba haberles podido ayudar a lograrlo, a pesar de las dificultades e injusticias.

— Felicitaciones a ambos, han hecho un maravilloso trabajo.— Les felicitó, pasados unos segundos, con una amplia sonrisa de satisfacción. — Me han dado la noticia las mismas asistentes del centro de tenencia y adopciones, han quedado fascinadas con su trato al pequeño y todos los avances que Jooheon ha presentado mientras le cuidaban. Es un caso poco visto, así que, ellas esperan poder verles en unos meses para un nuevo encuentro de supervisión...

[...]

El diagnóstico final de Jooheon fue positivo en cuanto a su condición anterior y la actual.

Efectivamente, el pequeño no había logrado crear un vínculo afectivo real y seguro con sus padres biológicos durante sus dos años de vida, por lo que la presencia o no de ellos, incluso la de algún otro adulto de referencia, le eran completamente indiferente a Jooheon. Solo bastaba que alguien respondiera a sus llamados o que cumplieran con sus necesidades básicas para contentarse.

Serendipia || ShowhyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora