CAPITULO 8:
Estuve un buen rato conduciendo, hasta llegar a un pequeño pueblo, la verdad es que desde que comenzó todo esto no había salido con el coche y me sentía algo rara, paré unos minutos para repostar pues estaba en reserva ya.
-¿Dónde estamos?.- preguntó Paula despertando de un profundo sueño, pues nada más meterse en el coche se había quedado dormida.
-En un pequeño pueblo, en seguida vuelvo.- le dije mientras bajaba del coche.- voy a poner gasolina no salgas del coche.
Me dirigí a la gasolinera pero para mi buena suerte no quedaba ni una gota, así que me dirigí a un coche que había ahí cerca que ví antes de llegar, miré haber si tenía gasolina en este si que tuve suerte pero me llevaría un poco más de tiempo coger la gasolina, a los pocos minutos ya había conseguido llenar el bidón y me dirigí rápidamente al coche.
-Ya estas aquí, menos mal me estaba preocupando, has tardado mucho.- dijo Paula la cual estaba en el asiento del conductor.
-¿Qué haces ahí?.- le pregunté seria.
- Es que has estado conduciendo durante todo este rato tú... así que e pensado que podría conducir yo un rato.- dijo sonriendo y cogiendo el volante del coche.
-Esta bien.- dije dando la vuelta al coche y montandome en el otro lado, ella sacó una gran sonrisa y arrancó el coche. Estábamos un buen rato en el coche ella no dejaba de hablar, reírse y haciendo como si fuéramos amigas de toda la vida y como si no hubiera pasado nada.
- Paula, no quiero que hayan mal entendidos, no te he perdonado lo que hicistes y no te voy a perdonar tan fácilmente.- dije secamente y muy seria pues parecía que ella creía que ya se había arreglado todo.- que me hayas salvado la vida no quiere decir nada.- ella no dijo nada se quedó en silencio mirando hacía delante para seguir con el trayecto.
Pasaron un par de horas y no podía dormirme, en todo ese rato Paula ya no había hablado más, en parte me alegrabs porque estaba tranquila durante un rato, pero me sentía algo mal por como le había hablado hace unas horas, pero tenía que hacerlo, no quería que pensara lo que no es.
Estuve mirando por la ventanilla durante un buen rato, solo se veía un paisaje desierto con unos únicos zombies por ahí. La verdad es que estaba todo más tranquilo de lo que yo creía que lo iba a estar pues no sabía como eran las cosas en el exterior ya que había estado todo el tiempo en la guarida de mi familia.
Estuve pensando en mi hermana, ¿cómo estaría? ¿pensaría en mi? esperaba que no pues ella creía que estaba muerta y conociéndola seguro que se hecha la culpa de todo, bueno seguro que si que piensa en mi y en los demás de la familia, ella no es de olvidar a la gente que quiere fácilmente. Esperaba que no hubiera pasado nada durante estos largos meses, que no solo mi hermana estuviera bien sino también todos sus amigos, Jake ese pequeño granujilla tan mono y al que tanto quería mi hermana, y Aidan ese chico me cayó bien desde el principio, siempre e desconfiado de todos los chicos con los que se ha juntado mi hermana, pero de amigos y tal pues ella nunca había tenido pareja, y no era porque no me cayeran bien para nada, la mayoría me encantaban pero siempre desconfié de ellos pues no quería que mi hermana sufriera por un chico pero Aidan siempre, desde el primer momento me atrayó confianza, me encantaba para mi hermana y a mi familia también le encantaba además todos veíamos que se querían de verdad y que se protegerían el una al otro siempre, y por eso espero que a él no le haya pasado nada porque quiero decirle lo que pienso yo y lo que pensaba mi familia de él.
Pronto de tanto pensar y del cansancio de lo sucedido durante el día me sentía más y más cansada hasta que poco a poco se me fueron cerrando los ojos hasta quedarme en un profundo y ligero sueño.
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Zombie enamorado [ Segunda Parte ]
RomanceSegunda parte del libro Zombie enamorado. Han pasado 8 meses des de la muerte de la familia de Kat y todos los demás, Kat y los sobrevivientes sigues huyendo y luchando por sus vidas. Pero lo que nadie sabe es que han habido dos sobrevivientes a aqu...