10 STEPS; #6

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–Buenas, los tenía un poco abandonados

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–Buenas, los tenía un poco abandonados... lo siento por eso.

­–¡¿Aris?! ¡¿Con quién hablas?!

–¡Con nadie mamá! ¡Estoy haciendo un proyecto de la escuela! – esa ya nadie se la cree, pero el rizado seguía insistiendo con esa excusa. –Bueno, como podrán ver hoy estoy grabando en mi cuarto, porque Linda tiene que trabajar y aún no le digo a nadie más sobre "10 PASOS PARA ENAMORAR A TEMO".

Mientras Aristóteles acomodaba la cámara sobre el tripie y se aseguraba que la imagen estuviera bien enfocada, un mensaje llego al celular del rizado, y con la sonrisa de bobo que puso al leer el mensaje, ya ustedes se imaginaran de quien era.

Digamos que él y Temo habían comenzado una relación no formal, es decir, salían a citas, se tomaban de las manos, se mimaban el uno al otro, tenían sus apodos cursis... pero aún no eran novios oficialmente, ya que cierto chico quería completar su plan al pie de la letra.


PASO #6: GANARSE AL SUEGRO

ARIS

El caminar hacía la casa de mi chico ya era algo habitual en mi día a día, o al menos en los días de escuela, ya que otra vez me encontraba caminando a dejar a Temo sano y salvo en su casa.

Amaba estos pequeños momentos junto a él, con su mano entrelazada con la mía y yo dando suaves caricias con mi pulgar sobre el dorso de su mano; estos momentos que pensé que nunca me iban a suceder a mí, ya que creía que nunca llegaría la persona indicada a mí vida, pero cuando menos lo esperaba, un bonito chico con ojos mieles llamo mi atención.

–Chulo– apreté ligeramente la mano de Temo para llamar su atención, ya que estaba tan entretenido evitando pisar las líneas o grietas de la banqueta, es algo que descubrí sobre él recientemente.

Cuando vamos caminando, de un momento a otro, Temo empieza a jugar a evitar pisar las líneas de la calle; en algunas ocasiones para molestarlo lo empujo suavemente para hacerlo pisar las líneas, y él se avergüenza por no notar en qué momento comenzó a distraerse jugando.

Adoraba aprender más cosas sobre él.

–¿si, Ari? – el castaño detuvo sus pasos y dirigió sus ojos a los míos, no pude evitar acercarme y dejar un beso en medio de sus labios, haciendo que sus mejilla cambiaran de color a un rosa pálido.

Una maña o costumbre que ambos habíamos agarrado después de ese hermoso accidente, en el cual tuve mi primer beso... es que al momento de saludarnos, o solo porque uno quería darle un beso al otro, lo hacíamos, pero dejando un casto beso en la mitad de los labios del otro.

–Ya llegamos a tu casa precioso – Temo volteo asombrado, notando que efectivamente estábamos justo frente a la puerta de su casa.

–Llegamos rapidísimo – volteo a verme con una pequeña sonrisa en sus labios –¿Seguro que no pasas?

Love me like that... /Aristemo/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora