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–Estoy sorprendida primo– exclamo la rubia presionando el un botón de la cámara, para que esta empezara a grabar– es la primera vez que uno de tus planes va funcionando.
–Wow, gracias por el apoyo Linda– el rizado respondió de manera sarcástica, mientras volteaba los ojos.
–Sigue haciendo eso y se te van a quedar así los ojos.
–Como sea, empecemos con el video– se notaba la emoción en sus ojos; ¿y quién no lo estaría? Es decir, el chico estaba a días de poder ser el novio del chico que le gustaba.
PASO #7: CITA ... ¡¿CARIÑO?!
ARIS
–¿una cita? – pregunto el lindo chico que se encontraba acariciando mi cabello con delicadeza.
–Sip– respondí explotando la "p" en mis labios –me gustaría llevarte a cenar esta noche– esta vez dirigí mi mirada hacía arriba, ya que mi cabeza estaba recostada sobre las piernas de Temo.
Él me respondió con una linda sonrisa y un pequeño asentimiento de cabeza; tome su mano que se encontraba acariciando mi cabello y deje un beso sobre la palma de esta.
–Me gusta mucho tu cabello Aris– dijo regresando a su antiguo labor de jugar con mis rizos, seguramente cuando nos tuviéramos que ir, mi cabello estaría todo esponjado.
–A mi me gustas mucho tu– coquetee guiñándole un ojo.
Temo se sonrojo inevitablemente, pero pude escuchar como carraspeo ligeramente y se acercó un poco a mi rostro.
–¿De verdad? ¿Qué tanto?
–Tanto que no me alcanzan las palabras para explicártelo– Temo se acerco más y termino dejando un beso en mi labio superior, para después dejar otro sobre la punta de mi nariz y por último en mi frente.
Los besos del castaño hacían que olvidara todo por completo, solo podía sentir como un toque eléctrico, o hasta podría decir mágico en cada lugar que él besaba; me hacía olvidar el hecho de que estábamos en un parque rodeados de personas; cuando estoy con Temo nada más importa, solo él, solo yo, solo nosotros.
¿Eso es muy egoísta de mi parte?
Puede ser, pero realmente me siento demasiado bien como para que me llegara importar sonar egoísta.
–Ari.
–Temo.
–Tú también me gustas mucho– volvió a besar mi frente– mucho– beso la pequeña arruga que se me marcaba en la nariz cuando sonreía– mucho.
Se que ambos hubiéramos seguido con nuestra cursilería por todo el tiempo posible, pero un ruido proveniente del celular de mi casi novio nos interrumpió.
–Te hablan bonito– dije sentándome y sacando el celular de Temo del bolsillo de mi sudadera; se lo extendí y él contesto inmediatamente.
–¿Bueno? – Temo tomó mi mano para jugar con ella mientras atendía la llamada –¿Sorpresa? ¿Tiene que ser ahorita? – guardo silencio mientras la persona al otro lado del celular -la cual reconocí como Pancho al oír su voz- contestaba. –Si, estoy con él– sonreí y dejé un beso rápido en su mejilla. –Bien, voy para allá.
–¿Todo bien? – pregunte mientras me levantaba del piso y extendía mi mano para ayudar a Temo.
–Si, solo que Papancho dice que tiene una sorpresa para mí en casa– tomo mi mano y se puso de pie– ya que regreso relativamente temprano a casa puedo aprovechar y pedir permiso para nuestra cita de esta noche. – me acerqué y rodé su cintura con mis brazos, mientras él ponía los suyos alrededor de mi cuello.
–Mmm me parece perfecto– di un ligero apretón sobre su cintura y me separé para entrelazar nuestras manos.
Así fue como comenzamos a caminar hacía su casa nuevamente; donde al parecer una sorpresa le esperaba, podía ver la cara pensativa de Temo intentando adivinar lo que podría ser.
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–Seguro que no están en tu mochila– estábamos en frente de puerta de la casa de Temo, pero al parecer el hermoso chico a mí lado había perdido sus llaves.
–Ya revisé bien, tal vez ni siquiera las traía conmigo hoy– mordió su labio como si intentara recordar algo. –Bueno, después me ocupo de eso– cerro su mochila y separo de puntitas para poder alcanzar el timbre de su casa; lo cual me hizo soltar una pequeña risa, era adorable. –No te burles– hizo un puchero.
–Eres una hermosura– estaba a punto de besarlo pero me detuve al ver como la puerta se abría, supongo que era uno de mis cuñados o ya nos hubieran gritado "chiflando y aplaudiendo".
–¡Bienvenido a casa cariño! – exclamo con alegría un total desconocido para mí, pero al parecer no tan desconocido para Temo.
Estaba a punto de decir algo pero el pequeño grito emocionado que salió de los labios de mi chico me interrumpió, lo siguiente que vi fue como se lanzaba a los brazos del extraño y ambos se fundían en un cariñoso... muyyyy cariñoso abrazo.
–¡Te extrañe tanto! – soltó Temo aún en los brazos de ese roba casi novios. Solo pude sentir el sudor frío bajando por mi espalda, y un dolor punzante en mi pecho.
–y yo te extrañe a ti– él extraño apretó más su agarre al cuerpo de Temo.
