Perdón por estar tan desaparecida pero les juro que vale completamente la pena💗
Dean
Me puse de puntitas para terminar la ultima linea del grafiti. Primera vez que me había demorado tanto en hacer uno. Pero valió la pena completamente.
Era una sola rosa pero con distintos tonos de rojos y rosados. Además que tenia como grietas con colores más oscuros.
Si la Dafne lo viera gritaría de felicidad.
— Hermanito, te quedo la raja — me felicito él Julian a mis espaldas.
— Gracias— me limpié las manos con un paño que se me ocurrió traer — igual siento que le falta algo.
Un toque de morado tal vez.
— Yo encuentro que esta bien así.
— Le sigue faltando algo.
— Acepta que te quedo linda la wea.
— Pero si le falta algo po.
— Andai como el hoyo de nuevo— rodó los ojos — fúmate uno y relájate porfa.
— No quiero nada.
— Apuesto que a la Olivia si la quieres — pregunta con picardía.
Lo ignore porque era verdad. Hace dos días que no se nada de ella, con cuea me ve las historias. La podría ir a buscar y dejar de ser tan weon, pero ser weon es mi especialidad y ser necio mi pasatiempo.
— Quien diría que andarías achacado por una mina — me pego un codazo y movió sus cejas con picardía.
Solo que la Olivia no es cualquier mina, ni mucho menos una que pueda arrancar de mi cabeza con facilidad.
Literalmente me enredo en sus rulitos.
Guarde todas mis latas en mi mochila para acompañar al Julian, al almuerzo me pidió que lo acompañara a una plazuela que nos quedaba cerca porque tenía que hacer una entrega.
— ¿Se te arreglara el humor con unas papitas?
— Ya se me pasara, pero igual te acepto las papitas — sonreí.
Me acomode mi gorro y la mochila, le hice señas al Julian para que se subiera y así irnos lo más rápido posible para ir a mi casa apenas terminemos.
El que él Gabo quiera hablar con nosotros me tiene nervioso, él es de esos que si te tiene que decir algo lo dice altiro no le importa ni el lugar ni la situación. Por eso el que ahora quiera hacerlo de una manera más seria me pone nervioso.
— Villita, no vallas tan rápido que no quiero morir.
Despabile y frene un poco. Tenia razón, iba muy rápido.
Un par de cuadras más y ya estábamos en la plazuela, tenia varias bancas así que apoye mi bici en una y me senté.
— ¿No falta nada para la once? — preguntó mirando su celular.
— Creo que no, la Dafne no me dijo nada.
Con lo calculadora que puede llegar a ser ya nos hubiera dicho todo lo que le falta.
— Me dicen que ya están aquí — dijo él Julian mirando su celular. — Manito, estoy con un weon en bici — grabo un audio.
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Picao a flaite
Novela JuvenilEn la micro te pueden robar tu celular o te puedes enamorar, por culpa del Dean a la Olivia le paso lo primero.