Picao a flaite

𝗏𝖾𝗂𝗇𝗍𝗂𝗍𝗋𝖾𝗌

Olivia

Solo rezaba para que no estuvieran tan enojados. La llamada que me hizo la Alessia para avisarme que ya me venían a buscar me dejo preocupada.

La casa era pequeña así que no se me dificulto volver al comedor.

Han pasado tantas cosas que mi cabeza aun no procesa ni como llegue aquí ni mucho menos que me termine comiendo con él Dean nuevamente.

Aunque no me quejo.

Ay diosito, mejor me hubiera quedado en la pieza, mi mamá y mi papá me miraban con cara de querer cortarme en millones de pedacitos.

— Perdón, perdón — me disculpe apenas entre al comedor.

— ¿¡Como se te ocurre desaparecer así!? — grito mi papá — Tienes a tú mamá enferma de los nervios.

Mi mamá lo miro mal y el solo evito su mirada.

— Mentira, esta enferma de los nervios desde que estuvo contigo — dije molesta, odio cuando me hecha la culpa de todo.

— ¡Olivia, contrólate! — me grito mi mamá.

— ¡Mas encima ni el celular respondes!— me volvió a gritar mi papá— ¡Como tan irresponsable!

— Perdón, pero no ando pendiente del celular.

— Deberías — dijo mi mamá— después de la caga monumental que te mandaste.

Conchamimami, como se enteraron tan rápido.

— ¿De que caga están hablando? — me hice la weona.

— No te hagas la weona, Olivia Sofia — dijo enojada mi mami, me cacho altiro.

— No es por aguarles su reto, pero creo que es mejor que lo hablen en su casa — él Fredy apareció en la puerta principal.

¿Que chucha hace este weon aquí?

Lo mire esperando que explicara su presencia pero el solo miraba al pasillo por donde vine.

— ¿Y el quien es? — preguntó mi madre apuntando en mi dirección, tenía cara de como si hubiera visto un fantasma.

Mire por sobre mi hombro y vi al weon que últimamente no sale de mi cabeza.

Ahora si que cabe mi propia tumba.

Diosito recibe a sor Olivia en tu santo reino.

— Soy el hermano de la Dafne — se presento él Dean— la amiga de la Olivia — mintió.

Si bien eso no tenía sentido al menos mi papá se relajó y dejo de apretar los puños como weon.

—¿Y donde está tu hermana? — pregunto mi papá.

— Ayudando en el negocio, pero no se preocupen que aquí no paso nada —dijo él Dean con tranquilidad — La Olivia vino porque se calló y la Dafne le ofreció venir a secar su ropa — explicó— Yo llegue justo antes que ustedes.

La facilidad que tiene para mentir debería ser preocupante, hasta yo que lo conozco y se perfectamente que miente le estoy creyendo.

— Yo voy a comprar así pueden hablar tranquilamente— aviso el Fredy y salió de la casa. Este weon anda raro.

Mire mis pies que estaban llenos de barro, ahora entiendo porque dijo que me había caído. Este hombre piensa en todo.

— Nos vamos — aviso mi papá y salio indiferente.

Mi mamá le sonrió al Dean pero a mi me ignoró completamente, siguió a mi papá hasta fuera de la casa.

— Creo que mejor salgo altiro.