A las dos de la tarde ambos se adentraron a una casa que nunca habían visto, la ceremonia terminó pasadas las once de la mañana, ahora sólo debían acomodarse en lo que restaba del día. Llevaron unas cuantas cajas a la sala, también a la cocina, al final decidieron subir las escaleras para explorar las habitaciones de arriba.
Entraron a la primera recámara con puerta color chocolate, era muy sencilla, una cama, mesitas de noche a los costados, un armario y unas macetas vacías, luego tres pasos después fuera de ésta habitación se encontraba el baño, que estaba cubierto de cerámica y piedra lisa. Ya sólo quedaba una habitación por explorar, la puerta era idéntica a la de la primera habitación, casi que se van de espaldas al ver una cuna en el centro de la recámara, vaya que su tío si hablaba muy enserio.
Sin chistar ambos abandonaron esa habitación, regresando a la planta baja, cada quién ordenando en un lugar distinto, sin siquiera dirigirse la palabra.
A las seis y media de la tarde ya tenían casi todo en su lugar, cuadros en las paredes, cojines en los sofás, platos en la alacena y ropa en su respectivo armario. Estaban cansados, pero también morían de hambre.
—¿Sabes cocinar? Es que yo no se —El joven Nara se sentaba agotado en el sofá, Neji lo hizo cargar la estufa y demás cosas pesadas, alegando que si lo hacía en el futuro tendrían problemas para engendrar la criatura que tanto le exigían, sólo era un oportunista de primera.
—¿No sabes hacer algo tan fácil y básico? —¿Que era lo que estaba criando la madre de Shikamaru? ¿un inútil? No había duda, estaba criando un bueno para nada, sin ofender a su madre claro.
—Es que por más que intento aprender no puedo —admitió avergonzado, después de casi haber quemado su casa, nunca más había prendido la estufa.
—Bueno yo cocino y tú limpias —se levantó del sofá arrojandole un trapo lleno de polvo al azabache —pero ni siquiera tenemos comida, anda vamos a comprar la despensa y de pasó comemos afuera —quito su delantal que portaba para no ensuciar su ropa.
—Ay que fastidió, yo no quería salir de casa —giro sus ojos haciendo un pequeño berrinche.
—Yo no te pregunte si querías salir o no, saldremos y punto, así tú eliges las cosas que te gustan.
Y claro que Neji tenía la última palabra, si algo había aprendido viendo a sus padres era eso, que si el líder hablaba eso se acataba, en su casa anteriormente el líder era su madre y ahora era Neji, siempre iba a seguir órdenes, que fastidió.
Caminaron en silencio por las tranquilas calles de Konoha, el sol ya se estaba escondiendo y le estaba dejando el pasó a las estrellas y la luna, tenían suerte de no haberse encontrado a alguien conocido, pues sería muy raro verlos juntos.
A las casi nueve de la noche se adentraron en su nuevo hogar, acomodando la comida en su respectivo lugar, estaban agotados y sólo querían descansar, aunque había un problema y era que sólo había una cama.
—Tú duerme en la sala —Neji se puso su pijama listo para adentrarse en la cómoda cama.
—¿Y por qué no duermes tú en el suelo?
—contraataco el Nara también poniéndose su pijama.—Porque quiero dormir en la cama —respondió con sutileza adentrándose al colchón y las sábanas.
—Bueno yo también quiero —también se acostó en la cama, casi que invadiendo el espacio personal del azabache.
Casi ninguno pego el ojo, era muy raro tener la cercanía de alguien más, sentir su respiración y sus movimientos, era extraño, pero dentro de si se sentían protegidos por el otro, eso era algo que ninguno de ellos admitiría en voz alta.
Neji fue el primero en levantarse, pues siempre era muy puntual a la hora de entrenar, aunque hoy no lo haría con su equipo, sino con su prima Hinata, ya que Ten ten y Rock lee estaban fuera en una misión con otro equipo.
Se adentro a la cocina empezando a cocinar lo que sería su almuerzo y el de quisiera o no, su esposo. También llevaría un poco para Hinata.
Ya estaba listo, se había duchado y cepillado, el pelicastaño ya se había ido a entrenar con su equipo y sensei, sólo quedaba el. Al bajar a la planta baja quería golpear al Nara, el idiota había olvidado su almuerzo. Resignado tomo las dos loncheras, tendría que llegar un poco tarde, pero eso era lo de menos.
Al atravesar el campo de entrenamiento lo primero que vieron sus ojos fue al Nara, luego a Ino, Chouji y Asuma, que a su parecer lucían un tanto asombrados por verlo ahí.
—Olvidaste tu almuerzo —extendió la lonchera al pelicastaño, sintiendo los tres pares de ojos observarle.
—Sabía que se me había olvidado algo —rio de forma liviana llevando sus manos por detrás de su cabeza, observando la inexpresiva cara del castaño.
—A la próxima no te lo traigo —salió disparado por los árboles para encontrarse con su prima.
—No sabía que tú y Neji eran amigos —Ino codeo de forma burlona a Shikamaru.
—¿Quién dijo que somos amigos?
—Pues el Hyuga trajo tu almuerzo, eso da a entender mucho —chouji llevo unas papitas a su boca, deleitandose con el sabor a tocino.
—Él no es Hyuga —no sabía porqué su boca había dicho tal cosa con tanto reproche.
—¿Pero que cosas dices Shikamaru? Claro que Neji es Hyuga —Ino volvió a codearle por las costillas a modo de juego.
—¡Te digo que no lo es!
Ante todo esto, Asuma sólo se mantenía en silencio, viendo la tonta pelea de sus estudiantes.
—¿¡Entonces si no es Hyuga que es!? —Ino ya se había desesperado, ese equipo iba a matarla, pero más Shikamaru.
—Es Nara, Neji Nara —admitió orgulloso.
Un silencio los embargo por un breve momento, aunque las risas no tardaron en llegar, Ino reía como gallina de corral y Chouji casi que se atraganta con sus papitas, incluso su sensei se había reído.
—¿De que se ríen?
—De que Neji es un Nara, si como no —chouji estalló en carcajadas e Ino se le unió.
—Ino, si te casaras con Sasuke ¿cuál sería tu nuevo apellido? —era increíble que tendría que explicar esto con palitos.
—Pues sería Ino Uchiha —casi que se le ponen los ojos en forma de corazoncito.
—Ya tienes la respuesta, Neji es Nara —suspiro, estaba rodeado de idiotas.
—¿¡Se caso con alguien de tu clan!? —Chouji no podía creerlo, el reservado Neji estando casado.
—que idiotas son ustedes —giro sus ojos fastidiado.
—Se casó con Shikamaru —por primera vez Asuma decía algo desde la llegada del Hyuga.
—Ay si como no —Ino rio entre dientes —¿escuchaste eso Shikamaru? Tú casado
—volvió a reír llevando una mano a su estómago.—Ay que fastidió, Neji si se casó conmigo.
Y ahí las risas acabaron.
XD
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Obligados a estar juntos |Shikaneji|
Fanfiction-Te están amenazando -dijo algo más que obvio. -¿No me digas? Pensé que me estaba felicitando por nuestro hermoso matrimonio, querido -habló con su sutil sarcasmo que lo hacía destacar.