chapter twelve

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ADVERTENCIA: Contenido explícito, sangre, juego con cuchillos, BDSM.

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Giselle esperó impaciente a que fuese la hora que Draco le indicó. Le prometió organizar una salida rápida, avisándole a McGonagall que ella debía irse por el estado "grave" de su madre.

Rogó para que le creyera y no hiciera preguntas que Draco quizás no iba a saber responder. Pero ya lo conocía, era un buen mentiroso y manipulador.

Se encontraba dentro dentro de su habitación. Su bolso ya contenía ropa necesaria para un fin de semana completo, y la puerta estaba asegurada con un hechizo para que nadie pudiese abrirla. No iba a arriesgarse, si alguien quisiera entrar, lo primero que pensaría es que necesita estar sola.

Caminó de un lado a otro, desviando su mirada cada cinco minutos hacia el reloj ubicado en su mesa de noche. El tiempo parecía ir más lento.

Hasta que sorpresivamente, veinte minutos después, apareció la anatomía masculina de Draco. Lucía el mismo traje, y en su mano traía un maletín negro.

—Por fin llegas. —rodó los ojos.

—Ya sabes como es Minerva, le gusta saber las cosas con cada detalle.

—¿Permitió mi salida?

Asintió. —Sí, le dije que solo sería este fin de semana, que tú y Scorpius estarían bajo mi cuidado ya que tu padre está de viaje y tu madre enferma.

—Mm, suena convincente.

El platinado sonrió orgulloso, tirando de los bordes de la chaqueta para acomodarla alrededor de su cuerpo.

—Bien, ¿estás lista?

—Eso creo.

—Okay... solo vas a necesitar una cosa. —tomó su cintura para acercarla.

—¿El qué? —frunció en ceño.

—Fuerzas para resistir tus piernas después.

Ni siquiera le permitió responder a su frase cuando murmuró el hechizo de aparición que los hizo aterrizar perfectamente en su mansión. Para su suerte, no había tenido mareos esta vez.

Se dio cuenta de que estaban en su habitación. El sol del atardecer brindaba los últimos rayos de luz que entraban directo por las ventanas, dando un toque acogedor y tibio. Su cama perfectamente hecha sin ninguna arruga, y todos los objetos en el mismo lugar que pudo apreciar la visita anterior.

Y ese olor tan característico. Menta y perfume caro.

—Puedes dejar tus cosas sobre la cama, ¿deseas comer algo?

FORBIDDEN | Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora