🔗T R E I N T A Y C U A T R O🔗

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JungKook salió de la Universidad acompañado por YoonGi mirando al cielo con una sonrisa.

—Entonces... él quiere ser tu novio... —Vocifero YoonGi sin dejar de mirar al frente caminando con JungKook a su lado fijándose si había quizá una tienda de helados cremosos.

El Sol estaba bastante enojado y su única forma de mostrarlo quizás era aumentando la temperatura de la tierra.

—Ah si~... me está cortejando, él es realmente lindo hyung~ —Hablo JungKook completamente embobado con una sonrisa en su rostro de enamorado. —Me gusta muchísimo...

Se encogió de hombros y luego se detuvo frente a una heladería entrando a esta dando saltitos.

—Se nota bastante que te gusta... cada vez que puedes hablas de él y lo guapo y dulce que es —Negó entre risas mientras caminaban al mostrador y pedían sus helados.

Como era de costumbre JungKook pidió de plátano y YoonGi de menta con chocolate.

—Yo pago Koo, tomalo como un regalo... ¿Bien?

—Hyung, no es necesario tengo dinero... puedo pagarlo no necesitas tomarte la molestia —Trato de convencerlo el castaño pero el de cabello a juego con su helado se negó rotundamente.

Al ver que no lograba convencerlo se cruzó de brazos con un puchero lamiendo con la punta de su lengua el helado en sus manos.

Los ojitos de JungKook brillaron cuando logró ver a un pequeño perrito peludo color blanco con manchitas color capuchino en su pelaje sintiendo la necesidad de acariciarlo.

—¡Te espero afuera Yoon! —Dijo con una sonrisa y enseguida salió del local escabullendose entre la gente hasta llegar al perrito que movio su cola eufórico cuando el omega se agachó a acariciarlo. —Ah, creo que tengo aún dos panecillos de mi almuerzo, te los daré

En un movimiento ágil se colgó la mochila del brazo y con la mano libre y algo de dificultad logró abrirla buscando en su interior uno de los bollos rellenos de ensalada con pollo que había comprado para su almuerzo, no le molestaba que el pequeño perrito se los comiera y pudiera disfrutarlos.

—¡Aquí están! —Dijo con una sonrisa emocionado y luego se giró a ver a los lados notando que había muchísima gente haciendo una mueca. —No te dejarán comer tranquilo aquí... ven por aquí

Agitó los bollos metiéndose por un callejón lleno de humedad siendo seguido por el can que agitaba su colita emocionado.

JungKook colocó los panecillos con cuidado sobre el piso asegurándose de que estuviera lo más limpio posible acariciando la cabeza del pequeño que comía con emoción sintiendo su corazón cálido de haber podido haberle dado la comida del día al pequeño, si por él fuera se llevaría a cada uno de los perritos en la calle pero no podía...

Aunque pronto su preocupación y pequeña felicidad cambio por nerviosismo cuando sintió a alguien detrás de él haciendo que se levantará fe un salto trastabillando girandose enseguida para encontrarse con un chico que estaba completamente vestido de negro con sus manos en los bolsillos y una sudadera larga puesta, a penas se le distinguía el grasoso cabello verde que caía sobre sus ojos tapando los mismos debajo de la gorra de la prenda con sus manos dentro de los bolsillos de unos pans grises con la cabeza agachada.

JungKook paso saliva con fuerza alejándose levemente, no sentía su aroma... quizás era beta, o algún alfa o omega cubierto por inhibidores.

El chico no dijo nada y sólo se quedó en silencio.

—Lo siento... es, ¿Es tuyo? —Preguntó Jeon refiriéndose al perrito señalandolo con la punta de su dedo índice.

El hombre no respondió y por el contrario se acercó al omega demandante sin titubeos y cuando este trato de irse tomó con fuerza su muñeca haciendo tanta presión con su mano que un jadeo de dolor salió de los labios del castaño dejando caer su helado de plátano sobre uno de los tenis Converse que el desconocido usaba.

Y para los nervios y mala suerte de JungKook este gruño enfadado.

Por instinto el omega desprendió feromonas amargas, su mano temblaba, sentía que le iban a romper la muñeca por la fuerza con la que lo estaban agarrando... su garganta se hizo un nudo cuando trató de gritar y sólo imploraba que YoonGi se diera cuenta pronto.

Entonces los labios del contrario se abrieron para hablar.

—Eres Jeon JungKook... tienes dieciocho años, estudias artes en una Universidad aquí en Seoul, naciste y creciste en Busan, ambos de tus padres son chefs en un restaurante en el lugar donde naciste... eres nuevo en la ciudad, hace unos meses llegaste

El chico hablaba tan rápido pero con tanta claridad que los ojos del castaño se nublaron de lágrimas, estaba aterrado y su miedo sólo fue en aumento cuando el peliverde sacó de su otro bolsillo una pequeña navaja dibujando una sádica sonrisa en sus labios.

—Y actualmente eres la pareja de Kim Yugyeom...

—Sueltame... —Vocifero JungKook tratando de zafarse pero fue en vano.

—¡NO TE MUEVAS! —Soltó las palabras con coraje haciendo un corte en su brazo sacándole varias lágrimas al de cabello castaño que sólo jadeaba de dolor al sentir otro corte. —¡¿Qué se siente ser su pareja?!, ¡¿Cómo es dormir en su cama?!, ¡DÍMELO JUNGKOOK!

Kook quería solamente llorar viendo como gotas de sangre caían estrepitamente al piso sorbiendo su nariz temblando, sentía como su lobo llamaba a Yugyeom aullando desesperado.

—¿No me vas a responder eh?... bien —El chico levantó la navaja dispuesto a clavarla en el brazo del menor, pero antes de lograrlo el perrito al que Jeon alimento se lanzo a morderle el tobillo haciendo que el contrario soltara un quejido de rabia y que la navaja cayera al piso.

JungKook trato de correr pero sus piernas temblaron y sólo pudo caer también abrazando su mano contra su pecho.

Por el contrario el peli verde empujó al perrito haciendo que golpeara la pared con un chillido buscando a ciegas la navaja.

—¡JungKook! —YoonGi se acercó corriendo al omega pero al percatarse que había alguien más frente al castaño perdió todo rastro de cordura. —¡¿Quién carajos eres?! —Gruño abrazando al omega contra su cuerpo notando que el peliverde tembló ante su voz.

No había duda.

Era omega.

—Te hice una pregunta. —Uso su voz de alfa. —Respondeme.

Pero JungKook también era omega y sintió un vuelco en su estómago temblando aún más.

—Hy-hyung... a...yudalo... —Tembloroso señaló con su mano herida y sangrante al perrito que se encontraba tirado en el piso con la respiración agitada.

YoonGi al ver la mano sangrando de Jeon no dudo ni un segundo en cargar a quien ayudó al omega, le gruño al chico en el piso que sólo se cubrió más y luego salió subiendolos a ambos a su auto.

—Y-Yoon... —Kook estaba muy agitado, no paraba de temblar o llorar... parecía que hubiera corrido 10 kilómetros sin parar. —Quiero... lle... Yugy...

Y luego de eso, se desvaneció.

Star.

🔗Contrato🔗 || [Omegaverse] •YugKook•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora