Más de ti ©

38

"Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos."
—Romanos 8.28 (NTV).

Bethany

Corro empleando todas mis fuerzas en un campo abierto, el escenario parece una pintura porque las hojas de los árboles que me rodean no se mueven. Estoy jadeando, mis pies duelen y mis fuerzas se ven reducidas. Tropiezo con algo y caigo estrepitosamente sobre mis rodillas. Todo duele, una presión se instala en mi pecho.

Una sombra se erige a mi derecha, convirtiéndose en esa mujer que me había perturbado hace meses. Me alejo arrastrando mi cuerpo hacia atrás con frenetismo.

—¿Qué haces aquí? ¿No se supone que te habías ido? —Pregunto.

Sonríe con malicia—Quizás sí me fui, quizás no me fuí—Enuncia jugando conmigo, desaparece de mi campo de visión, y de forma repentina se instala a mi derecha de cunclillas, respingo ante la impresión, está sosteniendo un mechón de mi cabello, pero me zarandeo para alejarla—Me alimento de tu dolor—Explica—¿Cuando vas a entender que no te desharás tan fácil de mí?—Se carcajea burlándose de mí—¿Cuando vas a entender que NUNCA serás feliz?

Ya ni siquiera le tengo miedo. Su presencia me produce rabia.

—Yo soy feliz.

Su gesto se tuerce, es una imagen horrible a decir verdad.

—¿Lo eres ahora? —Pregunta con voz gutural—Porque estás en un avión con destino a sepultar a tu tía tan amada.—Una punzada—¿No te has preguntado algo? Si Dios es tan bueno como dice ser y ustedes se esfuerzan por profesarlo ¿Por qué insiste en llevarse a quienes ustedes tanto aman? —Su tono es tan...

¿Alguna vez han leído la biblia? Ya saben, cuando en Génesis la serpiente se acerca a Eva para tentarla a comer del fruto, en su actitud había cizaña y persuasión. Algo similar ocurrió cuando Jesús ayunaba en el desierto y tuvo hambre, el diablo se acercó y le dijo "si eres el hijo de Dios, haz que éstas piedras se conviertan en pan", es como si buscara que neguemos la autoridad y soberanía de Dios.

No comprendo el plan de Dios, tampoco entiendo por qué tía Anna murió, me duele porque estoy confundida, pero jamás le reprocharia algo, porque se lo debo todo a él.

—La biblia dice que Jesús es la resurrección y la vida, y el que cree en él, aunque esté muerto, vivirá—Le doy una mirada mordaz—El diablo no puede matarnos dos veces.

Eso parece abofetearla y se desvanece. Apoyo mi cabeza sobre mis rodillas. No sé cuánto tiempo me quedo así, pero cuando alzo mis ojos, el escenario cambia y estoy en la playa, sintiendo la arena en mis pies, oyendo las olas colisionar con las rocas. Astibo a una mujer de cabello castaño rizado en la orilla, ella llora desconsoladamente. Mi corazón se acelera cuando la reconozco, a paso lento me acerco y cuando estoy a su lado me siento. Ella al verme y reconocerme, deja de llorar, toma mi mano y le da un apretón que me transmite amor, entonces ahora mis lágrimas fluyen, pero es por felicidad.

* * *

Todo ha sido un sueño. De eso me percato cuando abro los ojos y me encuentro a mí misma descansando en el hombro de Jeremy. Tiene sus ojos cerrados y su respiración es armoniosa, me trasmite paz.

Pese a lo que acabo de deducir, puedo ver que tiene una expresión triste que denota preocupación. La misma que tenía cuando se apareció en la puerta de mi departamento, lo admiro y en parte agradezco que sea él quien me haya dado la noticia.

No entiendo nada, en éste momento tengo tanto ruido en mi cabeza. Y quizás por eso estaba corriendo en ese sueño, quiero huir del ruido, de las interrogantes, de ésta realidad que me produce dolor.