Había estado demasiado ansioso marcando mentalmente los días en el calendario de su celular ¿Por qué? ¿Por qué los días tuvieron que pasar tan lentos? No, la verdadera pregunta era ¿Por qué siquiera estaba creyéndose que lo que dijo ese chico en el bar era cierto? Eres un ignorante, se recriminó, es un hecho de que no irá.
— Aunque no puedo sacar su hermoso rostro de mi cabeza — se dijo — ay, como detesto a la gente guapa.
— Wow, entonces debes estar odiarme como nunca ¿no es así?
Se giró a su lado y observó a Seungmin llegar al almacenamiento con dos cajas nuevas, tenía que estar bromeando para haber dicho eso sin una pizca de gracia.
— ¿Y quién te ha dicho que eres guapo? — preguntó tratando de molestarle.
— La jefa, mi exnovia, mi madre, mi Instagram y obviamente — Jeongin se sonrojó y se acercó mostrando su puño listo para actuar — un Jeongin borracho.
— ¡Cállate! — se quejó avergonzado — prometiste no mencionar eso otra vez, eres malo, te odio, te odio.
— ¿Qué pasa aquí? — Jisoo ingresó al lugar y abrazó en un acto rápido al más menor — ¿Por qué mis hijos están peleándose otra vez?
— Jeongin anda vagando en el trabajo de nuevo, Jisoo noona.
— ¡N-No es cierto! — contestó con prisa.
— Sí, sí, haré como que los oigo — Jisoo soltó su agarre de Yang y empezó a abrir algunas cajas de las que había traído Kim — Pónganse a trabajar, debemos alistar todos los pedidos que tenemos para enviar esta tarde o tendré problemas, y si yo tengo problemas...
— Nosotros tendremos problemas — dijeron los menores.
— Los amo — respondió terminando de decorar unas cajas listas para enviar — terminen las 6 cajas que quedan y me las llevan adentro.
— Sí, Jisoo noona — hablaron ambos al unísono.
Definitivamente hoy sería un día agotador, pero tal vez la noche la haga más interesante o al menos trataría de mejorarlo.
Al salir del trabajo se fue junto a Seungmin a cenar a un restaurante cercano a la zona, no tenía ganas de cocinar algo y hoy era quincena, es decir, día de pago. Los menores de la pasaron charlando sobre un nuevo lugar al que querían visitar una vez tomen un descanso el fin de semana del mes entrante, querían un tiempo de amigos e irse de viaje a algún lugar que sea relajado y fuera de la ciudad, a veces es bueno desconectarse de todo y disfrutar de la naturaleza. Al terminar de cenar, Seungmin y Jeongin se separaron en la parada de autobuses del centro comercial al que fueron a pasar el rato luego de comer, y aunque Kim pensaba que su amigo se iría a casa, en realidad éste tomó camino contrario y se dirigió al mismo bar.
Solo por curiosidad.
Eran las 9:10 cuando ingresó al local y pidió algo para beber, se sentó en la misma mesa de la otra vez y esperó, esperó verlo entrar por la misma puerta y sentarse a su lado, charlarían, reirían y al final se harán los mejores amigos. Él estaba demasiado ansioso, maquinando miles de escenas en su cabeza, con el corazón palpitando a un ritmo un poco más acelerado de lo habitual de tan solo pensar en volverlo a ver, sus manos jugaban entre sí y no dejaba de ver la hora marcada en la gran pantalla de su celular, porque claro, él tenía que venir de algún modo ¿Verdad?
10:52 PM
Apagó la pantalla del aparato y suspiró levantándose de la mesa, dejando el dinero cerca de su vaso vacío y caminó hacia la puerta. Bueno, tal vez no.
ESTÁS LEYENDO
Don't blame it on me | HYUNIN
Fanfiction❛❛Ese peculiar chico de cabellos oscuros suele llegar al mismo bar todas las noches, pide siempre el mismo trago y se emborracha solo en la última mesa vacía de al fondo. Todos comentan que lo oyen decir que es más feliz cuando bebe que cuando se en...
