Mi Compañera | 𝘌𝘥𝘸𝘢𝘳𝘥 𝘊𝘶𝘭𝘭𝘦𝘯 𝘺 𝘵𝘶 |

CAP 20: Espías y... ¿¡Emmett Tomando Café!?

𝗡𝗮𝗿𝗿𝗮 𝗘𝗱𝘄𝗮𝗿𝗱

El resto del día en el Instituto fue tan pesado como en el almuerzo, los pensamientos de todos éstos adolescentes me llegaban como olas sin avisar y con mucha fuerza. De pronto todos podían estar en silencio y con pensamientos no muy importantes ni fuertes, pero en un segundo podían estar pensando a gritos desde; si alimentaron a su gato, hasta en cómo morirán. Pero en lo que más pensaban era en nosotros, Los Cullen. ¡Hasta los profesores pensaban en nosotros!.

Al salir del instituto, t/n nos dijo que tenía que hacer un par de compras personales y me pidió el volvo, le dije que yo la llevaría pero se negó rotundamente y dijo que debía ir sola. Al final, por más de que no me gusta que alguien más conduzca mi auto, le di las llaves y ella se fue, dejando en advertencia de que no la siguiéramos y que no nos preocupáramos si pasaban 10 horas y aún no llegaba. Y eso nos hizo dudar a todos.

Después de que se fuera, Emmett la siguió a velocidad vampírica desde el bosque, guiándose por su olor.

Yo conduje el Jeep a toda velocidad hasta casa, con Alice, Rosalie y Jasper. Todos estábamos algo inquietos y aunque ninguno dijo nada, todos sabíamos que era nuestra oportunidad para descubrir más sobre el pasado de t/n y entender que es lo que ocurre.

Llegamos en menos de 5 minutos a casa, Rosalie y Jasper se quedarían y explicarían que ocurría a Esme y a Carlisle de ser necesario. Alice y yo nos fuimos en el Aston Martin.

Emmett llamó unos minutos después diciendo que t/n se había detenido en una tienda de Port Angeles y nos dio la dirección, pero dijo que debíamos darnos prisa porque se notaba que t/n no estaría ahí por mucho tiempo.

Aceleré hasta que llegamos a Port Ángeles, vimos el volvo estacionado en frente de una tienda de ropa.

Alice:-¿Vino a comprar ropa sin mi?-dijo Alice indignada, yo solo rodé los ojos y estacione el auto a unos metros del volvo y al hacerlo vi a una persona muy conocida; sentada en una mesa de una cafetería que estaba en frente de la tienda de ropa con una taza de café.

Edward:-¿Ése es Emmett?- Alice volteó en seguida y lo miró tan confundida como yo.

Él pareció vernos y saludó con la mano mientras soplaba su café. Ésto tenía que ser una broma.

~Hola Eddie, el trabajo de espía me agotó, correr desde el Instituto hasta Port Ángeles me dió sed y qué mejor que el café ¿no?~ De todas las estupideces, ésta es la más grande.

Alice:-¿Qué hace Emmett en ésa tienda tomando café?- preguntó casi riendo. Y como no faltaba más, Emmett se estaba tomando el café.

Le señalé el reloj de mi muñeca a Emmett y le hice una seña para que entendiera que tenía que salir de ahí rápido y montarse en el auto antes de que t/n saliera de la tienda y lo viera.

~Edward, deberías probar el café, tiene un sabor extrañamente adictivo. ¿Sabías que dicen que el mejor café es Colombiano?... Creo, algo así escuché~

¡¿Qué?! Lo miré como si estuviera loco, de hecho, Emmett ya está loco, ésto era el colmo.

Alice:-¡¿S-se está tomando el café?!- chilló Alice-¿Está loco? ¡que asco!- Lo más loco es que Emmett parecía disfrutar del café mientras lo tomaba.

Edward:-Según él, tiene un sabor adictivo- dije con cara de asco. Después de la conversión, la comida humana no sabe nada bien para nosotros.

2 minutos después Emmett estaba saliendo de la tienda... ¡Con tres vasos de café en las manos!.

Edward:-¿Pero qué...?

Alice:-¡Ay no!

Emmett:-Hola hermanito y hermanita- dijo entrando al auto y sentándose en el asiento trasero.